*Este artículo apareció originalmente en Noisey, una plataforma de VICE.No sé cómo llegué a Lucrecia Dalt. Lucrecia llegó a mí en 2012 con su álbum Commotus, publicado por la casa experimental Human Ear Music, hace un par de años. El disco me gustó tanto que se lo regalé a un par de amigos míos, esperando compartir aqella conexión que yo alcancé a experimentar con la música de Lucrecia en 2013. Atmósferas densas, llenas de velos que inmediatamente me sedujeron de por vida al mundo de Lucrecia.Me pareció muy random, que de todo el roster de Mutek.mx, me contactaran específicamente para entrevistarla a ella. Lucrecia llegó a mí de nueva cuenta. En realidad, sólo escuché el Commotusy hasta hace poco, retomé la tarea de escudriñar los nuevos momentos que Lucrecia había desarrollado. Así que preferí estacionarme, no investigar más para nuestra entrevista y concentrarme en rascar en aquella conexión. Supe que podía conectar con ella de la misma manera en que lo hice con su música. Así, la entrevista se concentró en los puntos de contacto que creo tengo con ella…Remedios Varo. Tengo recuerdos de pequeña muy fuertes de ser llevada por mi madre a ver la exposición de Remedios en el Museo de Arte Moderno. Esa experiencia fue para mí, muy definitiva. Ahora que compartiste algo sobre ella a través de tus redes, puedo relacionar perfecto a Remedios Varo con tu música.
Conecté con ella, ya que llegué a una imagen suya por un libro que estoy leyendo que se llama El Monte Análogo. Es una novela de ciencia ficción bastante "loca" en la que básicamente están intentando encontrar un monte que no tiene cima y que es infinito. Entonces, todas las técnicas que el tipo utiliza para poder estar en un momento, con la curvatura del mar específica, hacen que él y su barco lleguen al Monte Análogo. Remedios tiene una imagen que se llama igual, así es cómo llegué a su trabajo. Además de que me parece fantástica y guapísima.Ahora que hablas sobre el mar y las curvaturas, me remiten mucho a la biografía que tienen en discogs escrita sobre ti, por todas estas cuestiones físicas y filosóficas de tu otra vida profesional. La bio se concentra poco en tu música y desarrolla mucho más temas filosóficos.
Es lo que me gusta de hacer cualquier tipo de arte. Poder conectar disciplinas e interconectarlas (incluso a nivel muy básico). No te tienes que ir a hacer grandes investigaciones. En mi caso, haber estudiado Ingeniería Civil y haber trabajado dos años en Geotecnia evidentemente me han marcado. Aunque en este momento ya no domino el tema, dado que se te olvidan mucho los nombres de las rocas, el haber estado ahí empieza a tomar sentido después de haber estudiado eso al mismo tiempo que comencé a hacer música. ¡Ya! empecé a hacer música hace 10 años exactamente, a los 25. Y hasta ahora siento que todo tiene más sentido. También, se mezclan con las influencias que vienen de mi familia desde Colombia. Finalmente, eso es un comprimido que hace que eso tenga sentido y que las cosas que yo hago hoy tengan sentido.Hablando de geografía, me interesa saber cómo te han definido musicalmente los distintos lugares en donde has vivido. Colombia, Barcelona y Berlín. Cómo se imprime eso en tu música… ¿Te condicionan?
Es verdad, te condicionan y también es que descubres muchas más cosas del lugar. Cuando llegué a Alemania empecé a escuchar un montón a Asmus Tietchens (1947), que no conocía antes. Un músico de Hamburgo que hacía una música espectacular. En cambio, cuando estuve en Barcelona escuchaba música de librería. Particularmente un músico que se llamaba Alessandro Alessandroni (1925). Influencias mucho más mediterráneas. Ahora sí, es más Alemán. Estoy en los procesos de sintes, entre otras cosas. Ciertos procesos más cercanos a lo que salió en Alemania en los setenta, ochenta y noventa. Claro que te condiciona. Imposible que no te afecte.Me interesó mucho el método de Terepa, por su enfoque experimental. ¿Quién convoca al ejercicio?
Esta es una iniciativa de Kouhei Matsunaga quien estaba en Pan Records. El es buen amigo mío y pasó un día que… Yo soy buena amiga de Julia Holter también. Y Kouhei estuvo en Berlín, y quedamos para tomar algo él, Julia, Rashad Becker y yo… Y es una iniciativa suya que desarrolló y se le ocurrió convocarnos en un segundo. La idea es tocar todos al mismo tiempo en lugares diferentes, siendo consciente de que estás tocando con otras personas y que sólo puedes comunicarte a un nivel telepático (risas)… Lo más importante es la conciencia de cómo te afrontas a trabajar con eso. Después de tocar, se juntan las pistas y es lo que se mezcla y eso es lo que se publica…Esto me remite mucho al FRKWYS de la disquera Neoyorkina de The RVNG. Ellos tienen un ejercicio de improvisación musical que se organiza por el capo de la disquera y es a través de el segundo volumen de FRKWYS que yo conocí a Laurel y Laurel también participó en este Terepa junto a ti. ¿Qué opinas de su música, la sigues?
Me gusta mucho. Sí, la conocí también hace poco. Y siempre me han parecido muy interesantes los caminos que toma. No sintinéndome identificada 100 % con lo que ha hecho últimamente, pero siempre le he visto mucho valor y sobre todo me parece que sí, que es una persona —una música— que siento que trabaja con elementos importantes para mí. Como por ejemplo, dejarse influenciar por mil cosas a la vez. Ella habla mucho de libros, de historias. En su primer disco hablaba de conceptos muy específicos que para nada tienen que ver con la música. Y luego, sí están… ¿Por qué no usarlos?***Más conversaciones con artistas colombianos e internacionales, aquí.
Publicidad
Conecté con ella, ya que llegué a una imagen suya por un libro que estoy leyendo que se llama El Monte Análogo. Es una novela de ciencia ficción bastante "loca" en la que básicamente están intentando encontrar un monte que no tiene cima y que es infinito. Entonces, todas las técnicas que el tipo utiliza para poder estar en un momento, con la curvatura del mar específica, hacen que él y su barco lleguen al Monte Análogo. Remedios tiene una imagen que se llama igual, así es cómo llegué a su trabajo. Además de que me parece fantástica y guapísima.
Publicidad
Es lo que me gusta de hacer cualquier tipo de arte. Poder conectar disciplinas e interconectarlas (incluso a nivel muy básico). No te tienes que ir a hacer grandes investigaciones. En mi caso, haber estudiado Ingeniería Civil y haber trabajado dos años en Geotecnia evidentemente me han marcado. Aunque en este momento ya no domino el tema, dado que se te olvidan mucho los nombres de las rocas, el haber estado ahí empieza a tomar sentido después de haber estudiado eso al mismo tiempo que comencé a hacer música. ¡Ya! empecé a hacer música hace 10 años exactamente, a los 25. Y hasta ahora siento que todo tiene más sentido. También, se mezclan con las influencias que vienen de mi familia desde Colombia. Finalmente, eso es un comprimido que hace que eso tenga sentido y que las cosas que yo hago hoy tengan sentido.Hablando de geografía, me interesa saber cómo te han definido musicalmente los distintos lugares en donde has vivido. Colombia, Barcelona y Berlín. Cómo se imprime eso en tu música… ¿Te condicionan?
Es verdad, te condicionan y también es que descubres muchas más cosas del lugar. Cuando llegué a Alemania empecé a escuchar un montón a Asmus Tietchens (1947), que no conocía antes. Un músico de Hamburgo que hacía una música espectacular. En cambio, cuando estuve en Barcelona escuchaba música de librería. Particularmente un músico que se llamaba Alessandro Alessandroni (1925). Influencias mucho más mediterráneas. Ahora sí, es más Alemán. Estoy en los procesos de sintes, entre otras cosas. Ciertos procesos más cercanos a lo que salió en Alemania en los setenta, ochenta y noventa. Claro que te condiciona. Imposible que no te afecte.
Publicidad
Esta es una iniciativa de Kouhei Matsunaga quien estaba en Pan Records. El es buen amigo mío y pasó un día que… Yo soy buena amiga de Julia Holter también. Y Kouhei estuvo en Berlín, y quedamos para tomar algo él, Julia, Rashad Becker y yo… Y es una iniciativa suya que desarrolló y se le ocurrió convocarnos en un segundo. La idea es tocar todos al mismo tiempo en lugares diferentes, siendo consciente de que estás tocando con otras personas y que sólo puedes comunicarte a un nivel telepático (risas)… Lo más importante es la conciencia de cómo te afrontas a trabajar con eso. Después de tocar, se juntan las pistas y es lo que se mezcla y eso es lo que se publica…Esto me remite mucho al FRKWYS de la disquera Neoyorkina de The RVNG. Ellos tienen un ejercicio de improvisación musical que se organiza por el capo de la disquera y es a través de el segundo volumen de FRKWYS que yo conocí a Laurel y Laurel también participó en este Terepa junto a ti. ¿Qué opinas de su música, la sigues?
Me gusta mucho. Sí, la conocí también hace poco. Y siempre me han parecido muy interesantes los caminos que toma. No sintinéndome identificada 100 % con lo que ha hecho últimamente, pero siempre le he visto mucho valor y sobre todo me parece que sí, que es una persona —una música— que siento que trabaja con elementos importantes para mí. Como por ejemplo, dejarse influenciar por mil cosas a la vez. Ella habla mucho de libros, de historias. En su primer disco hablaba de conceptos muy específicos que para nada tienen que ver con la música. Y luego, sí están… ¿Por qué no usarlos?***Más conversaciones con artistas colombianos e internacionales, aquí.