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Música

Han pasado 15 años del Tijuana Sessions Vol. 1 de Nortec

Una mirada a la huella que dejó en la escena nacional y mundial.

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A finales de los años 90 la escena electrónica mexicana experimentó una primera etapa de expansión, la figura del DJ cobró fuerza, aparecieron clubes por aquí y por allá ofertando noches enteras dedicadas a los beats; la escena rave a pesar de haber sido golpeada y perseguida por los gobiernos en turno, lograba sobrevivir. Tijuana, Guadalajara y el entonces Distrito Federal, concentraban las propuestas sonoras más sólidas.

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A pesar de ser la más joven de las tres ciudades, Tijuana siempre se ha caracterizado por estar a la vanguardia y no es casualidad; la música ha sido relevante desde hace más de 127 años que se fundó, por ejemplo, el rock, que se gestó en los Estados Unidos y llegó a México vía la frontera. En el caso de la música electrónica, la llamada última esquina de Latinoamérica, fue la cuna que vio nacer a la agrupación con más trascendencia a nivel internacional al día de hoy: Nortec Collective.

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La fusión de música norteña y de banda con electrónica, sólo en Tijuana pudo haber ocurrido: en la ciudad donde en bares y cantinas lo mismo convive el acordeón de Ramón Ayala con los sintetizadores y cajas de ritmo de Depeche Mode. La ciudad del spanglish y de las cebras que no son cebras. La ciudad en la que pagas tus tacos con devaluados pesos mexicanos y te devuelven el cambio en dólares.

La idea de Pepe Mogt de experimentar con música de banda y norteña era solo cuestión de tiempo para que emergiera, ya en 1997 se había involucrado en el proyecto Zoo Sónico con Octavio Hernández, el cual consistió en la creación de piezas sonoras que surgieron a partir del procesamiento y manipulación de ambientes registrados en sitios característicos de Tijuana. De ese experimento se desprende el track Speedtrip que aparece en la compilación Motivos del Sitio 29, publicado en 1999.

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Fotografía: Revista Cambio. Junio 2001

La génesis del sonido Nortec ocurre en febrero de 1999, el día que Pepe Mogt asiste a la boda de su hermana, amenizada por un grupo norteño. El peculiar sonido atrapa su atención y es en ese momento que se le ocurre experimentar con tubas, acordeones y tambora, género que hasta entonces ningún otro artista de música electrónica había volteado a ver. "Qué pasa si lo saco de contexto, lo deconstruyo y lo convierto en algo que sea de mi agrado", pensó Pepe Mogt.

Astudillo, uno de los estudios de grabación más importantes de música de banda y norteña de la región, le facilita muestras de sonido, dichos samples contenían secuencias de bajo sextos, tubas, clarinetes y tarolas, mismas que comparte en un primer momento con Ramón Amezcua y posteriormente con Roberto Mendoza. Una semana después aparecerían los primeros tres tracks con el sonido Nortec: Polaris de Bostich, Ventilador de Fussible y And L de Panóptica. Al poco tiempo nacería como tal el colectivo, incorporando a sus filas a Clorofila, Hiperboreal, Terrestre y Plankton Man, lo mismo que a videoastas, diseñadores, artistas plásticos, entre otros.

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El sábado 22 de mayo de 1999 se realiza la primera presentación oficial del colectivo en el club Berlín de Tijuana con alrededor de 30 asistentes. "En nuestra primera presentación con este formato, en Tijuana, muchos esperaban a Bostich tocando el drum'n'bass y house que ya conocían. Se sorprendieron al escuchar sonidos de tubas, tarolas, y fue un shock. La gente no sabía cómo bailar. Pero aunque no sabían cómo moverse, unos bailaban quebradita, como se baila la banda sinaloense, otros tipo cumbia. No sabían cómo reaccionar, pero les gustó", comentaba Ramón Bostich al periódico argentino Página 12.

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Fotografía: vía Flickr Acamonchi

Para mediados de 1999 editan 1000 copias del disco Nortec Sampler, producción autofinanciada por los miembros del colectivo y distribuido de manera gratuita en línea, con amigos, fans, en radiodifusoras de Tijuana, San Diego y Los Ángeles. La portada incluía la imagen pasada por filtros de uno de los miembros de Los Tigres del Norte. Camilo Lara (de Instituto Mexicano del Sonido) le hace llegar una de esas copias al célebre productor ingles Chris Blackwell, responsable de lanzar a la fama a artistas de la talla de Bob Marley, Tom Waits y U2. Kim Buie, entonces ejecutiva de la naciente disquera Palm Pictures propiedad de Blackwell, firma con el colectivo un contrato de distribución y edición.

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"Los músicos Nortec están tomando algo muy cool, la música norteña, las cosas que sus padres escuchaban y están haciendo algo nuevo, poniendo su propio sello en él", explicaba Kim Buie al periódico texano The Austin Chronicle.

Para febrero de 2001 se publica en una primera etapa en Estados Unidos, Japón, Inglaterra, Colombia, Argentina y México el disco más importante que a la fecha ha dado la electrónica nacional y que en su momento fue considerado el más vanguardista de América Latina: Tijuana Sessions Vol.1, con ello el nombre del colectivo y el de la ciudad, cobrarían una relevancia a nivel mundial nunca antes vista.

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El disco se compone de 14 tracks instrumentales de los 6 proyectos del colectivo, los temas incluidos fueron selección de Pepe Mogt y Ramón Amezcua, el arte de la portada estuvo a cargo de Fritz Torres y Jorge Verdín. El álbum en general recibió excelentes comentarios de la crítica especializada, pero fue Polaris de Bostich el tema que destacaría por su complejidad sonora y originalidad. Josh Tyrangiel de la revista Time describía el track como "un circo extraño arribando a un pueblo más extraño aún".

La presentación oficial del álbum se realizó el 3 de marzo de 2001 en la mítica fiesta Nortec City en el viejo edificio que por muchos años albergó el Jai Alai de la festiva avenida Revolución de Tijuana, integrando instalación, video, diseño, y desde luego la música del colectivo.

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Nortec City fue clave en la relevancia que cobró el colectivo a nivel global, ya que Palm Pictures convocó para esa noche a varios de los medios estadounidenses más influyentes como The New York Times, Miami Herald, Newsweek, Los Angeles Times, entre otros. La calidad de la música de Nortec y la bocanada de aire fresco que significó para la escena de música electrónica mundial no está a discusión, sin embargo cabe señalar que las estrategias de marketing implementadas en un principio por Palm Pictures fueron clave en la fuerza e importancia que cobró el colectivo en la escena electrónica mundial.

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"Creo que en México podrían desarrollar un estilo propio y no nada más copiar lo que sucede en el extranjero. Por eso me llamó la atención la mezcla de música tradicional mexicana con electrónica que hace Nortec", afirmaba el célebre alemán DJ Hell, testimonio que aparece en un texto de José Luis Paredes Pacho, publicado en el libro El Paso del Nortec.

Luego de Nortec City, los ojos del mundo se posicionaron sobre lo que estaba ocurriendo en la frontera. La prensa escrita, la televisión y la radio voltean a ver la efervescencia cultural que se estaba generando en la ciudad, tanto en la música, como en las letras, en el net art, el arte contemporáneo y el street art. No es gratuito que la revista Neesweek haya incluido entonces a Tijuana entre los ocho nuevos centros de agitación cultural a nivel global.

Fotografía: Terrestre, ahora conocido como Murcof. Vía Mutek

La música de Nortec le daría la vuelta al mundo infinidad de veces, los festivales de mayor prestigio reclamaban su presencia: Coachella, Sonar, Mutek, Vive Latino y Tecnogeist, fueron algunos de los foros en los que se presentaron con gran aceptación.

"Me conecte con ellos (Nortec) indirectamente a través de un amigo de años que me entregó sus vinilos y CD´s. Es muy interesante lo que están haciendo, yo creí en un momento que iban a ser como una tendencia etno, de esas tantas de las que hay ciertos prejuicios en la situación de unir lo que se llama un grupo norteño o algo así, pero reconozco que era sólo eso, cuando escuche el disco me pareció muy moderno, muy interesante, un emprendimiento para tener en cuenta", opinaba Gustavo Cerati al sitio Buenos Aliens.com.

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Nortec firma un contrato para publicar tres discos con Palm Pictures, luego de diferencias contractuales entre el colectivo y la disquera, la publicación del Tijuana Sessions Vol. 2 se ve truncada. Las relaciones entre Palm Pictures y Nortec llegan a su etapa más difícil en 2003, para muestra los testimonios de algunos de los miembros del colectivo que aparecen en el libro Nor-Tec Rifa: Electronic Dance Music from Tijuana to the World de Alejandro L. Madrid. Es en este contexto que se da la salida de Terrestre y Plankton Man. "Blackwell decidió orientar su empresa hacia la producción de películas y DVD´s. Quedamos atados por un contrato y sin poder lanzar Tijuana Sessions Vol. 2, que sólo sale ahora, cuatro años después, en Nacional Records, con distribución de la discográfica Warner", afirmaba Pepe Mogt al periódico español El País.

Lo ocurrido después ya es historia, a 15 años de la publicación del Tijuana Sessions, Bostich+Fussible continúa de gira con el disco Motel Baja, álbum con el que dan por concluida su etapa de experimentación con la tuba, el acordeón y el bajo Sexto, Terrestre radica en Europa, sumando éxitos bajo el alias de Murcof, Plankton Man por su parte se une al músico Argel Cota para formar la ecléctica banda llamada Kobol. El resto de los proyectos que alguna vez conformaron el colectivo, no han renunciado del todo al sonido Nortec; Panóptica recién publicó el disco Bajos Tiempos, Hiperboreal hace tres años lanzó el disco Border Revolver, Fritz Torres deja Clorofila para continuar con sus proyectos de diseño, Jorge Verdín es quien se ha dado a la tarea de mantener con vida al proyecto, su último trabajo publicado fue el EP titulado Ahorita Vengo.

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"México es un país de tendencias cortas de tres a cuatro años, los miembros de Nortec trabajan desde la época de Artefakto; hacen música desde los ochenta y siempre han sido relevantes. Lograron definir un sonido propio, llevarlo a otras partes del mundo, ser reconocidos y respetados". Opina Erich Martino en el libro Arde la Calle de Julio Martínez Ríos.

Fotografía: Facebook Bostitch & Fussible de Nortec

Luego del desgaste natural que sufre cualquier agrupación a lo largo del tiempo, la realidad del colectivo Nortec es otra; pero más allá de diferencias al interior y peleas legales por un nombre, es justo reconocer que gracias a lo que hizo en su momento el colectivo, la fusión de electrónica con música de banda y norteña, se ganó un sitio preponderante en la historia de la música electrónica internacional y que nada ni nadie les puede ya quitar.

Nortec sentó las bases y las directrices respecto a cómo suena y cómo se produce una gran porción de la música electrónica en la actualidad. Hoy en pleno 2016 la fusión de géneros y sonidos en apariencia disímbolos marca la tendencia a seguir en el basto mundo de la música electrónica.

Alejandro Arámburo está en Twitter.

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