Un periódico de Panamá no está nada contento con el arbitraje de la Copa Oro

#DeportesCri ¡ Fucking Árbitro¡ - Portada de Crítica 23 de julio pic.twitter.com/w4QDtzPz6k
— Diario Crítica (@CriticaPa) July 23, 2015

Panamá perdió en las semifinales de la Copa Oro frente a México en un partido extremadamente controvertido. Al periódico Diario Crítica de Panamá no le agradó el resultado, o cómo se jugó, y optó por un encabezado… curioso: "¡Fucking árbitro!", tituló. Gente del Marca, os estáis quedando atrás.

El partido pareció amañado en contra de Panamá desde el principio. A pocos minutos del inicio, el panameño Luis Tejada vio la tarjeta roja en una disputa por el balón contra Francisco Rodríguez. El brazo de Tejada golpeó la cara de Rodríguez mientras los dos disputaban la pelota en el aire. Claramente fue falta, pero no merecía la tarjeta roja.

Al verse con 10 hombres en el campo, los jugadores panameños se abalanzaron sobre el árbitro estadounidense Mark Geiger para reclamar la tarjeta roja en cada acción de los mexicanos. A pesar de eso, Panamá se puso arriba en el marcador en el inicio del segundo tiempo cuando Román Torres se alzó rematar un tiro de esquina al fondo de la red. Sin embargo, Torres estuvo presente en otra situación controvertida que favoreció al 'Tri' cuando en el minuto 89 Geiger pitó penalti a favor de México por manos dentro del área panameña.

Los miembros de la selección de Panamá se volvieron locos. Después de un largo retraso, Andrés Guardado tiró la pena máxima y empató el partido. El seleccionador mexicano Miguel Herrera admitió que no había sido penalti; el mismo Guardado dijo que en caliente se había planteado fallarlo aposta.

Guardado volvió a marcar en el primer tiempo de la prórroga, de nuevo desde los once metros, para darle a México una ventaja de 2-1. Panamá siguió luchando. Cuando pareció que tendría un saque de banda más, Geiger pitó y concluyó el encuentro. Todo el equipo panameño se abalanzó de nuevo sobre Geiger, que tuvo que ser escoltado fuera del campo.

Los aficionados de las gradas —que se pasaron el partido tirando cerveza y otros objetos al campo— y los jugadores estuvieron al filo de empezar una contienda; los árbitros apenas pudieron controlar la situación. Después del encuentro, Panamá expresó su sentir hacia los "ladrones" de la CONCACAF.

En general, no fue una buena noche para el fútbol de Norteamérica y el Caribe.