¿Coronarse en Old Trafford?: El fin de semana en la Premier League

Después de meses de competición y una temporada exhaustiva, la contienda por el título podría llegar a su conclusión este fin de semana. La línea de meta está a la vista, y el Leicester se encuentra listo para tomar el último trago de bebida energizante hacia la victoria. Si el resultado es el esperado, podrían ser campeones de la Premier League este domingo.

Sin embargo, la pugna por los lugares en Champions League sigue a tope, al igual que la contienda por el descenso. Bueno, qué más da, incluyamos también la lucha por terminar a mitad de tabla. Hay peleas en todos lados que se cruzan entre sí. Nadie podría entenderlas si no fuese por esta guía al fin de semana de la Premier.

Además del Manchester United, el último equipo que ganó la liga en Old Trafford fue el magnífico Arsenal del 2001/02. La plantilla de aquel entonces incluía a leyendas como Sol Campbell, Freddie Ljungberg, y Patrick Vieira.

Su logro podría ser igualado este fin de semana por un equipo que incluye a Robert Huth, Marc Albrighton, y al ex jugador del Huddersfield Town, Danny Drinkwater. Si esta comparación sirve para poner en contexto la poca probabilidad del título del Leicester, entonces también sirve como un gran cumplido. Con una escuadra que es mucho más que la suma de sus partes, los zorros azules están a nada de conseguir el triunfo menos esperado en la historia de la Premier League; si no es que de todo el futbol inglés.

En muchos sentidos, son los herederos indicados del título del Arsenal de principios de siglo. Aunque no cuentan con la misma cantidad de calidad por jugador, el Leicester ha perfeccionado una fórmula ganadora basada en su habilidad para pasar el balón, para contragolpear y ser contundentes frente a la portería. Necesitan tres puntos para que nadie los alcance, y puedan asegurar su primer campeonato de toda su historia en el máximo circuito. Si logran coronarse en Old Trafford, sería un final digno de una campaña de ensueño.

Mientras que los descontentos fanáticos del Arsenal ya se acostumbraron a hablar de su "trofeo de cuarto lugar" en años recientes, el equipo ahora se encuentra en peligro de perder hasta eso. Después del colapso total de su pugna por el título, los "Gunners" están cinco puntos por encima del Manchester United en el cuarto lugar de Champions League; el equipo de van Gaal aún le falta disputar un partido.

Si el United puede cerrar la brecha este fin de semana, existe una posibilidad de que el Arsenal pierda su único trofeo de la temporada. A pesar de que el trofeo del cuarto lugar es completamente imaginario —y creado con el único propósito de hacerlos enojar—, el cuadro de Arsene Wenger está en serios problemas de perderlo ante un rival de renombre.

¿Ya se habían acostumbrado, no? Saquen las pancartas, amigos.

Un frió viento recorre la Premier League en estos momentos. En ocasiones, se puede escuchar un quejido. Hay sonidos caóticos alrededor del Liberty Stadium, Vicarage Road y Goodison Park. Esto es porque cada uno de estos recintos ya no tiene sobrevivientes, y lo único que queda son zombies.

Por supuesto, cuando hablamos de los zombies nos referimos a Francesco Guidolin, Quique Sánchez Flores y Roberto Martínez. Luego de estar conscientes de que se quedarán sin trabajo en el verano, se le nota como si no tuvieran vida. Mientras que Guidolin y Flores han hecho un trabajo increíble en el Swansea y Wattford, respectivamente, los resultados no se han dado en los meses recientes y sus puestos parecen llegar a su fin. Por otra parte, el Everton ha experimentado una temporada a la baja con Martínez; equipo plagado en toda la temporada por una defensa zombie.

Es muy poco probable que haya despidos antes del final de la campaña, pero sin importar cuál sea el resultado este fin de semana, el final se ve cerca. Esto deja a Guidolin, Flores y Martínez es un estado de agonía: no están vivos, pero tampoco muertos.

Aunque el Newcastle y Sunderland parecía que descenderían hace unas semanas, ahora pelean ferozmente para preservar sus estatus como equipos de primera. El Newcastle logró empatar, sorpresivamente, con el Manchester City y el Liverpool, mientras que el Sunderland pudo arrebatarle la victoria al Arsenal el fin de semana pasado si hubiesen sido más preciso a la hora de definir ante la portería. El sábado se enfrentarán al Crystal Palace y Stoke City, respectivamente —el Norwich viajará al Emirates al medio día— y estarán desesperados por conseguir una victoria.

Por más poca gloriosa que parezca la batalla por el descenso, no hay mucho más que ver en estos momentos.

El Sunderland, Newcastle, y Norwich se han aferrado con las uñas a la Premier League toda la temporada, pero ahora comienzan a sentir el horror de lo que podría habitar abajo. Han echado un vistazo a las borrosas profundidades de la Championship, la segunda división, y han comenzado a retroceder sin importar a quién se lleven en el proceso.

En su inexplicable miedo, los equipos amenazados por le descenso harán todo para sobrevivir. Ya se imaginaron lo que sería jugar el martes por la noche en el Ewood Park: si esto no es suficiente para motivarlos, entonces no sabemos qué podría serlo.

Ya que la mayoría de los equipos importantes tienen garantizado terminar la campaña de mitad de tabla para arriba, es tiempo de uno que otro partido sin trascendencia. El Watford vs. Aston Villa prácticamente no tiene sentido, al igual que el Everton vs. Bournemouth.

No importa cuántos goles haya, no importa cuántos vídeos de las acciones más destacadas existan, ninguno de los dos partidos estarán incluidos en los premios a lo mejor de la semana. Son un cruel recordatorio de la futilidad de nuestra existencia.