Vean la foto de este artículo que retrata medio paquete de los extintos cigarrillos: en la apertura ya ni siquiera se distingue la iconografía de Mustang, la segunda marca de cigarrillos que los colombianos más recuerdan. Se lee Rothmans, en cursiva, "OF LONDON", producidos sin embargo en Chile. A pesar de que los tabacos de esa marca tan nuestra se producían desde hace rato en Chile, el nombre que desaparecerá es lo que duele un poquito en el corazón maltrecho de fumador.
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La simpleza del caballo erguido en dos patas, que en una época patrocinaba algo tan contradictorio como un torneo de fútbol, será reemplazado por una antipática figura de dos leones escoltando un escudo que representa la marca: más de 125 años de historia, desde 1890. Pero el detalle que molesta es la creativa ( tal vez por eso molesta más, porque es creativa) forma en la que nos vamos despidiendo de los Mustang: la marca se va cayendo, como si se tratara de una etiqueta que se puede desprender de la marca verdadera. Ya la "M" y la "u" no se pueden ver del todo bien.Ayer en una fiesta alguien me dijo que la transición duraría un año: es decir, según mi fuente, tendremos hasta mayo del otro año para ver cómo se hace un amague de etiqueta que se va cayendo, como si Mustang nunca hubiera sido Mustang, como si el cigarro de obreros y gomelos, el "Sustang", el "mustican", hubiera sido una broma de décadas para darnos esta sorpresa: que era una mera etiqueta encima del verdadero cigarrillo: el Rothmans. ¿O se dirá "el Rothman"? Ni idea.Lo peor de todo es que por culpa de la publicidad antitabaquismo, que ocupa casi un tercio de la cajetilla, ya no le veremos final digno. Será triste ver cómo el caballo desaparecerá para dar paso a un azul más oscuro que no nos dice nada a los fumadores colombianos. Increíble. ¿Será que alguien ya hizo una petición en Change.org para frenar esa vaina?*Manden antidepresivos, por fa.
