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medio ambiente

Google muestra qué hemos hecho con el medio ambiente en Colombia en los últimos 30 años

Un 'timelapse' de imágenes satelitales muestra cómo la minería, la expansión urbana y la frontera agrícola han afectado nuestros ecosistemas.

Google publicó hace poco una herramienta que deja ver en formato timelapse la evolución de la tierra en los últimos treinta años. En internet se han divertido mirando cómo crecieron Las Vegas o Nueva York. O cómo se han derretido los glaciares. O cómo se han secado lagos, ríos y mares. O cómo se construyó Dubái. Millones de imágenes satelitales de todo el mundo se prestan para todo.

Colombia no ha sido ajena a esos grandes cambios en el paisaje. La población del país subió de 30 a 48 millones desde 1985 y los bordes de las ciudades se tuvieron que expandir, en muchos casos hacia municipios vecinos o hacia las montañas. También llegaron los grandes, pequeños, legales e ilegales proyectos mineros. Y por esa y otras causas perdimos en los últimos 20 años más de 5 millones de hectáreas de bosque.

Pues bien, veamos cinco lugares donde, por una u otra razón, los ecosistemas han llevado la peor parte.

Cerrejón, La Guajira

Aunque la empresa que explota la mina de carbón más grande del país insista en que ha reforestado la vegetación que ha tumbado, estas imágenes satelitales muestran cómo en pocos años cambia el color de la zona de verde oscuro a café arenoso. Y eso sin contar los ríos, que no se alcanzan a ver bien, y la calidad del aire, de la que ya han alertado.

San José del Guaviare, Guaviare

A principio de año, el Ideam señaló los lugares con mayor deforestación en todo el país. San José del Guaviare encabezaba la lista. La frontera agrícola y los cultivos de coca han arrinconado por años a los bosques en esa zona del país, muy cercana a la Amazonía.

La Macarena, Meta

Quizás recuerden que, hace pocos meses, el escándalo que generó una noticia logró frenar una licencia para explotar petróleo cerca a Caño Cristales, ese río de varios colores que, así sea por fotos, produce orgullo a los colombianos. Lamentablemente, esa protesta para defender el medio ambiente en una zona histórica de la guerrilla en el Meta fue más fugaz que otra cosa. Fíjese en el mapa y verá por qué, detrás de San José del Guaviare, La Macarena es el segundo municipio con mayor deforestación en el país: grandes cultivos de coca, cambios en el uso de las tierras, construcción de carreteras ilegales, etc.

Río Quito, Chocó

En octubre pasado el senador Antonio Navarro sobrevoló con otros políticos algunas zonas de Chocó. Durante los días siguientes a su visita saturó su cuenta de Twitter de fotos aéreas de un paisaje árido para denunciar lo que sus ojos no creían: el río Quito se estaba secando por culpa de la minería legal e ilegal. También se habían sorprendido recientemente en la Corte Constitucional, al punto que ordenaron al Gobierno imponer medidas para sacar de ahí las dragas que estaban desviando el cauce que siempre había llegado al río Atrato. Mire cómo, en los últimos cinco años, se crea una gran mancha café en los bordes del río.

Bogotá

Y por último, pero no menos importante, no deje de echarle una mirada al crecimiento de la capital. Va a entender varias cosas si mira detenidamente. La ciudad, que ha duplicado la cantidad de habitantes en este tiempo, ha tenido que buscar dónde albergarlos. Fíjese en la expansión hacia el norte y el occidente, también hacia las laderas de los Cerros Orientales, y por supuesto en el sur. Crecer de esa forma no es gratis para el medio ambiente: los estragos los han sufrido los ecosistemas de la sabana, los cerros, los ríos, los humedales, las reservas forestales. La discusión sobre desarrollo sostenible no es en vano.