FYI.

This story is over 5 years old.

Porno

Un sólo hombre es responsable del género porno con monstruos

Un alemán mantiene vivo este subgénero del porno.
ER
traducido por Elvira Rosales

Existe un género oscuro del porno en el que un actor vestido con una enorme máscara de monstruo marino consigue tener sexo resbaloso y escamoso con mujeres.

Más de 100 videos de este fetiche específico existen en varias páginas de internet, filmados por diferentes equipos de producción. Pero en cada video, usan el mismo traje, hecho por Zagone Studios en Illinois. Los estudios de entretenimiento para adultos no producen los videos, pero son parte de una industria artesanal que hace porno comisionada por fans privados. Gran parte de estas obscenidades con disfraces consisten en adorar los pies, el falso incesto, sentarse en la cara, dominación femenina y otras categorías de fetiche más conocidas. Pero lo que hace al género de monstruos único es que el canon entero parece haberse reducido a un solo patrón.

Publicidad

“Sólo hay un alemán”, dijo Guda*, quien administra Bitch Slap Studios y su sello de “monstruos, aliens, superheroínas”, Xxxtremecomixxx. Guda me explicó que este hombre misterioso "ha gastado quién sabe cuánto dinero" para producir casi todo el contenido de porno de monstruos que existe.

Es imposible afirmar que este hombre es la única persona creando porno de monstruos, pero por lo menos sabemos que crea la gran mayoría. Es difícil decir exactamente cuántos videos ha ordenado este superfanático, porque algunos videos a la orden nunca fueron publicados para su venta y otros son difíciles de encontrar. Pero Cory Chase, del famoso tuit porno de Ted Cruz, director del estudio pornográfico Cory Chase Customs, dice que ha realizado casi dos docenas de videos para el fanático en años recientes. Guda, quien también trabaja como productor, director y actor, hizo casi cinco docenas para el hombre desde 2009. Guda también me dijo que uno de sus compañeros, que producía filmaciones en su propio estudio y ahora trabaja en Bitch Slap Studios, ha trabajado con este hombre por mucho más tiempo que eso. Pero Guda no pudo darme un número específico de años o videos.


Relacionados: Por qué el porno clásico sigue teniendo demanda


Desde 100 y hasta 15,000 dólares, los estudios porno personalizados harán casi cualquier cosa que los fetichistas quieran (por ejemplo: necroporno), mientras el cliente ofrezca algunas especificaciones y el dinero por adelantado para cubrir los costos. En este caso, el fanático misterioso manda a un productor como Guda un libreto detallando las escenas sexuales del monstruo que quiere ver y el traje de Zagone Studios.

Publicidad

(Cuando le mandé un correo a Zagone para preguntar si estaban conscientes de que uno de sus trajes se había convertido en característica de un subgénero del porno fetichista, un miembro del equipo de ventas y publicidad respondió, “No sabíamos que nuestro Traje del Monstruo Marino es usado en películas pornográficas. Esperamos que a los actores les parezca cómodo el traje y que la audiencia disfrute la belleza artística de nuestro disfraz".)

Quería hablar directamente con el fan misterioso y descubrir qué es lo que le gusta del sexo con monstruos. Entonces, le pedí a los estudios con los que ha trabajado que le pasaran mi solicitud de entrevista. Por desgracia, pero comprensiblemente, declinó la invitación para hablar sobre estos videos o su interés en los escenarios que describe. Y ninguno de los productores con los que pude conversar discutió nunca acerca del atractivo de este monstruo marino. Sólo manda notas, el traje (si la compañía no lo tiene todavía) y aclaraciones por correo cuando es necesario.

Sin embargo, Bitch Slap Studios me ofreció las notas que envió para una filmación reciente, misma que me permite indagar un poco más. “Sólo quiero el clásico misionero sin variaciones extravagantes. Sólo una gran cantidad de ángulos de esa posición básica”, dice la nota. "Que todo muestre a la chica y al monstruo, casi siempre a la mujer y algo del monstruo, pero nunca más monstruo que la chica”. Hace mucho énfasis para especificar que la mujer debe estar desnuda a lo largo de toda la filmación. Quiere ver tanto torso como sea posible y siempre quiere ver su rostro. El sexo simulado, en el que un actor finge que se coge a otro, está bien. Pero si aparece un pene, él prefiere que el equipo de producción utilice un strap-on para el monstruo (algo como sacado de Bad Dragon). Lo importante, parece, es ver a las mujeres reaccionar al monstruo.

Publicidad

En última instancia, los productos finales varían significativamente según el estudio, en especial cuando se trata de interpretar al monstruo. En videos como The Horny Monster from Beyond (2014), Peachy Keen Films —un estudio en donde encontré casi tres docenas de videos con monstruos a través de uno de sus canales de distribución— interpreta al monstruo haciendo movimientos ondulantes y gritando: "¡Nya nya!" Guda lo interpreta más serio, con gruñidos y amenazas en Sea Monster Got Me (2017) o Out of the Abyss (2017). Chase, quien a menudo interpreta al monstruo, utiliza un dildo verde brillante para coger en Alli Rae in Swamp Monster vs the Beauty (2014) y Melanie Hicks in Swamp Monster Attacks (2016). El estudio Chris 'Corner, por otro lado, sólo cuenta con un actor masculino que tiene el pito rosa y humano afuera de los pantalones negros que usa debajo de la camisa monstruosa en A Monster Rape (2016). (Este es el único video de monstruos que encontré en Chris 'Corner, pero sus archivos no son fáciles de rastrear.) Aunque los videos de Chase casi siempre muestran penetración con un consolador, Guda y otros en general se atienen a la simulación.

Sin embargo, el hombre misterioso parece que es menos aficionado a la exageración. "Quiero una sensación de horror sin ningún comportamiento tonto/gracioso", escribe en ese orden. Las especificaciones de la escena describen que el monstruo debe rugir y silbar. La actriz "está aterrorizada, llorando, suplicando, luchando, etc. Lo odia y lo demuestra, pero le permite salirse con la suya por miedo. Miradas evidentes de sorpresa, terror y miedo… ¡El monstruo se excita por su miedo!"

Publicidad

Relacionados: Platicamos con el director que pone a coger a tus superhéroes favoritos


No sabemos qué impulsa al cliente detrás del género del monstruo marino. Pero cada productor que entrevisté sobre fetiches de monstruos como este —hay un canon amplio sobre películas de sexo con vampiros y brujas que se consume más— sospechan que los deseos de sus clientes se derivaban de una asociación emocional que sucedió después de ver una película de terror en su adolescencia. En el caso de este fanático, ver a una bestia llevarse a una doncella agitada, que al principio está aterrorizada pero sucumbe ante la fuerza animal de la criatura —a la Drácula, King Kong o Creature from de Black Lagoon— podría haber sido una experiencia erótica formativa. Esto tiene cierto sentido intuitivo, porque estas criaturas y sus películas a menudo tienen una carga sexual. La conexión bestia-erotismo teóricamente coagula y se convierte en un fuerte impulso más adelante en la vida.

Mark Griffiths, experto en psicología de fetiches sexuales en la Universidad Nottingham Trent de Gran Bretaña, estuvo de acuerdo con esta explicación especulativa. Me dijo: “La mayoría de las investigaciones sobre los orígenes de las parafilias y los fetiches sugiere que comienza en la infancia y la adolescencia a través de la asociación de algo sexual con un objeto fetiche que normalmente no se considera sexual”.

Cualquiera que sea el motivo de los hábitos de este fan durante tantos años, probablemente no pueda mantener el subgénero a flote para siempre. De hecho, Chase dijo que las órdenes han disminuido en los últimos años. Guda lo atribuye al hecho de que algunos estudios, para compensar las pérdidas por piratería y la intensa competencia, han tenido que aumentar sus tarifas. "Sólo ordena un nuevo video cuando tenemos una modelo local que le gusta, porque es menos caro para él", dijo Guda, en lugar de pagar para traer una artista desde Los Ángeles, Miami o Nueva York durante una semana de rodajes.

Publicidad

Los estudios, sin embargo, pueden no extrañar el negocio del súper fan. De acuerdo con todas las personas con las que he hablado y que se han puesto el disfraz, es caliente y difícil de ver, lo que hace que incluso las escenas simuladas sean complicadas. Además, tienen que gruñir y actuar como una bestia de película de monstruos convincente tratando de asustar a alguien. "Tuvimos una modelo que usó el disfraz para nosotros y simplemente renunció", recuerda Guda, "porque empezó a odiar la vida" mientras llevaba el disfraz.


Relacionados: Los creadores del llamado porno ético quieren reformar la industria


Si bien Chase dice que las ventas de porno con monstruos en general son bastante buenas, Guda señala que las escenas con monstruos marinos se venden muy mal. El video con mayor rendimiento que han hecho recibió quizá 80 o 90 descargas en cinco años. Es probable que más personas hayan accedido a él mediante copias pirateadas, pero eso es apenas suficiente para cubrir el sueldo básico de su elenco y equipo, que va más allá de los costos de producción que cubren el pago de los fanáticos. Para él, el subgénero no genera pérdidas pero tampoco ganancias.

Básicamente, si este mecenas alguna vez sale del mercado, todo el género porno de los monstruos marinos se acabará. De alguna manera, el género no es impresionante: no desencadenó una tendencia, no despertó deseos comunes, ni modificó la percepción sexual de un nicho de la audiencia. Pero sí demuestra cuán perturbador puede ser el porno personalizado. Todo lo que necesitas es una persona con unos miles de dólares y un fetiche muy específico. Si tienen el tiempo y el deseo, pueden inundar el mercado con contenido, haciendo parecer a los buscadores desprevenidos que sus deseos singulares fueran compartidos por una legión.

“A veces me pregunto”, dijo Guda, acerca de qué es lo que atrae a los clientes hacia este porno personalizado. “Pero es probable que pueda pensar en todo tipo de hipótesis locas”. Lo mejor, sostiene, es no pensar demasiado y sólo fluir.

*En el mundo de los fetiches, algunos actores, productores y directores utilizan alias o monónimos. En esos casos, utilizamos sus sobrenombres preferidos.

Sigue a Mark Hay en Twitter .