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Hablamos con el fotógrafo que retrata a recién casados haciendo una mamada

El holandés Michael Klooster se hizo viral después de realizar un reportaje a una pareja recién casada, todavía vestidos de novios, que simulaba una felación.
Fotografía cortesía de Michel Klooster

Este artículo se publicó originalmente en Broadly, nuestra plataforma dedicada a las mujeres.

El complejo sector industrial de las bodas es grotesco: flash mobs de compromisos, ceremonias grabadas por drones y publicaciones en redes sociales anunciando que "Ha dicho que sí".

No habiendo ninguna duda de que el apocalipsis es inminente, hoy mi editor me ha pedido que escriba sobre el prometedor fenómeno de las fotos de boda de novios simulando una felación. ¿Lo he escrito correctamente? Creo que se me ha metido algo en el ojo.

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Aquí está el manual para todo aquel que tenga la suerte de no haber estado nunca en una boda y no haber hecho nunca una felación: estas fotos de mamadas suelen mostrar a las novias simulando una felación a sus prometidos, ya sea en un coche antiguo o detrás de un arbusto. Esta novedad es para parejas que quieren demostrar lo adorables y sexualmente liberados que son. Pronto llegarán a alguna boda heteronormativa a la que vayas.

Este nuevo "género fotográfico" simulando una mamada empezó a llamar la atención del público tras viralizarse un par de imágenes de unos recién casados, tomadas por el fotógrafo holandés Michel Klooster. Él está de pie en el bosque y ella se agacha delante. "¡Es una pasada!", señalaba Buzzfeed. En Chipre, la pareja de recién casados británica Mark y Samantha Simons se sumó a la moda. Lo hicieron delante de un coche vintage al atardecer.

Estas fotos de mamadas suelen mostrar a las novias simulando una felación a sus prometidos, ya sea en un coche antiguo o detrás de un arbusto

Semanas después, otra pareja del Reino Unido hizo lo mismo en la puerta de una iglesia griega. Pero, como muchas otras cosas que los británicos hacen fuera de su país, los vecinos de la zona no se tomaron demasiado bien esto. Después de que Matthew y Carly Lunn simularan una felación fuera del monasterio ortodoxo de San Pablo, en Rodas, un obispo local prohibió que cualquier pareja extranjera se casara allí.

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"Solo estábamos simulando una felación y echándonos unas risas", se quejó Matthew Lunn a raíz de los comentarios que hizo el periódico británico The Sun. "Los griegos han reaccionado de manera exagerada". Una pareja, cuya ceremonia programada en San Pablo se ha cancelado por el revuelo que causó la fotografía de la mamada, está considerando tomar acciones legales contra los Lunns.

Pero, ¿cómo se siente el fotógrafo responsable de desatar este subgénero mordaz sobre esta nueva tendencia? Y, sobre todo, ¿por qué lo hace?


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Parece ser que Klooster no es el responsable de crear el género de las fotos de boda de novios simulando una mamada, sino los EUA (o eso afirma él). Realmente, no es de extrañar que el país que nos dio la serie Say yes to the dress se inventara otra manera de profanar la sagrada institución del matrimonio.

"El año pasado vi una foto de unos recién casados practicando una mamada en un sitio web de los EUA", explica Klooster a Broadly. "No soy la primera persona que hace esto, solo he sido el primero cuya foto se ha hecho viral".

Inexplicablemente, el acercamiento falocéntrico de Klooster a los álbumes de bodas ha ganado admiradores en todo el mundo. "He recibido un montón de mensajes de fotógrafos de todo el mundo que se han interesado por mi enfoque creativo", dijo entusiasmado.

Después de que Matthew y Carly Lunn simularan una felación fuera del monasterio ortodoxo de San Pablo, en Rodas, un obispo local prohibió que cualquier pareja extranjera se casara allí

No obstante, no quiere ser conocido por el "tipo que retrata mamadas": "Yo quiero ser un fotógrafo famoso por hacer fotografías bonitas".

Le pregunté a Klooster cómo se sentiría si tomara fotos de mamadas no simuladas y, sorprendentemente, me dijo que no le gustaría. "Me negaría porque no me dedico a la fotografía pornográfica".

Luego le pregunté si no le importaría fotografiar cunnilingus, a lo que me respondió, "claro que no, lo único que necesito es una pareja maja que se atreva a hacerlo".