Preguntamos a una experta en relaciones por qué Melania no deja a Trump

El pasado lunes, en una inusual aparición en televisión, la exmodelo y posible primera dama Melania Trump aprovechó la entrevista con Anderson Cooper para tratar de demostrar al público que su marido no odia a las mujeres.

Posicionándose a favor de su marido, Melania salió al paso de todas las acusaciones contra Trump, desde las conversaciones filtradas con Billy Bush hasta las denuncias de presuntos abusos sexuales por parte de varias mujeres. En unas declaraciones que se contradecían ligeramente con las que había hecho anteriormente, expresando su decepción por los comentarios despectivos de su marido sobre agarrar a una mujer "por el chochete", Melania adujo que Bush había sido el instigador de los comentarios, incitando a Trump a hacer comentarios soeces y de mal gusto.

Melania prosiguió con su defensa asegurando que el comportamiento de Trump no era más que un rasgo de su personalidad pueril. "Si es que a veces digo que tengo dos niños en casa: mi hijo y mi marido. Conozco la forma de hablar de algunos hombres, y por eso lo digo". Preguntada sobre las declaraciones de la periodista de la revista People, Natasha Stoynoff, en las que acusó a Trump de haberla agredido sexualmente durante una entrevista, Melania desmintió las palabras de Stoynoff y aseguró que ciertas cosas de las que contaba ni siquiera ocurrieron. "En ese artículo también dijo que me había visto en la Quinta Avenida, y yo le pregunté, 'Natasha, ¿cómo es que ya no te vemos?'. Nunca hemos sido amigas. Ni siquiera la reconocería si la viera".

Cuesta entender que, pese a las pruebas cada vez más numerosas, Melania siga junto a un hombre que, en el mejor de los casos, es un misógino lamentable y, en el peor, un depredador sexual. Según la psicóloga y experta en relaciones Nicole Martínez, la actitud de Melania no difiere mucho de la de esa amiga que siempre justifica el comportamiento abusivo de su novio.

Quizá el comportamiento contradictorio de Melania te resulte familiar, ya que es el que adoptan las mujeres que siguen con sus horribles maridos o novios. Según Martínez, sus actos (y la ausencia de ellos) dicen mucho de Melania. A lo largo de toda la campaña de Trump, incluso después de los comentarios ofensivos vertidos por el candidato, Melania ha permanecido en silencio, hasta hace bien poco. Sin embargo, durante la entrevista quiso dar una imagen de mujer fuerte e independiente. "No paraba de usar términos que están de moda", explica Martínez, "reforzando la idea de que era fuerte e independiente. Estaba intentando demostrar justo lo contrario de lo que es".

Martínez también puso de manifiesto la incapacidad de Melania para reconocer que su marido no tiene la razón. En lugar de eso, se dedica a culpar a los demás por los errores de Trump. "Es muy común", añade. "Muchas mujeres prefieren no contar a sus amigos o familiares que sus maridos les han sido infieles porque no quieren provocar aversión hacia ellos". Asimismo, Martínez asegura que aquellas personas metidas en una relación tóxica a menudo se niegan a admitir que han decidido voluntariamente estar con alguien despreciable y, para mitigar su sentimiento de culpa, fingen que sus parejas no son tan terribles, al fin y al cabo.

Pese a lo común que es esta dinámica de pareja, Martínez concluye que no hay forma de conocer los verdaderos motivos de Melania. "Podría ser que realmente esté enamorada de Trump. Podría ser por dinero o porque se siente intimidada por la figura de un hombre rico y poderoso".

Según su experiencia, Martínez asegura que las mujeres que niegan los actos reprobables de sus parejas suelen acabar igual. "Siempre terminan siendo engañadas".