Regresa el clásico 'indestructible' de Nokia

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El relanzamiento del Nokia 3310 ha sido el hecho más importante en el Mobile World Congress, el mercado de smartphones más importante en el mundo, que se realiza esta semana en Barcelona. Sin embargo, esto podría ser el reflejo del estancamiento en la industria celular más que de la añoranza por móviles más simples.

El original Nokia 3310, lanzado en el año 2000, se convirtió en uno de los móviles mejor vendidos en la historia. Con su bajo precio y alta durabilidad, las ventas superaron las 126 millones de unidades. El nuevo modelo, lanzado ayer por la empresa HMD Global, la cual tiene licencia para comercializar el nombre de Nokia, espera apelar a la nostalgia que las personas sienten por el teléfono. El teléfono tendrá un precio de unos 50 dólares y fue presentado con sus tradicionales ringtones, con el clásico juego de la serpiente y con una batería de larga duración.

Nokia fue alguna vez el rey en la telefonía móvil, pero no logró vislumbrar lo mucho que crecería el mercado, por lo que en 2014 terminó vendiendo su negocio a Microsoft en más 7 mil millones de dólares.

Para los estándares actuales, el Nokia 3310 luce más bien como una reliquia que no tiene siquiera tecnología 3G, una pequeña pantalla que no es táctil y un teclado físico. Sin embargo, HMD cree que habrá una gran demanda por parte de aquellos que quieren liberarse un poco de la enorme carga digital.

Aunque el 3310 está acaparando los titulares, HMD también lanzó al mercado tres smartphones con sistema Android para competir con sus rivales. No obstante, las grandes compañías de teléfonos inteligentes enfrentan un bajo crecimiento en en ventas desde los últimos 12 meses, y sólo algunas empresas están logrando éxitos comerciales.

La compañía surcoreana LG presentó su modelo insignia, el G6, con pantalla de 5,7 pulgadas. Huawei, empresa de China decidida a pelear directamente contra Apple por el dominio del mercado, también lanzó el P10, sucesor del exitoso P9 con mejoras en la cámara y más opciones de color.

También se presentaron otros teléfonos de Sony, Oppo e incluso BlackBerry, pero el hecho de que los medios se enfocaran en los llamados dumb phones —dispositivos sencillos sin demasiadas características, como el Nokia 3310— es una muestra de que el mercado se encuentra en apuros este año.

Los analistas advierten que todo el escándalo que HMD ha provocado por la nueva versión del clásico teléfono podría hacer que algunas personas se olviden de sus smartphones también: "El lanzamiento del renovado Nokia 3310 amenaza con eclipsar los teléfonos más modernos de HMD", dijo a VICE News un analista de la empresa a través de un e-mail. "HMD tiene que evitar que la marca Nokia sea vista simplemente como algo nostálgico".

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