Trump podría ser el 'instrumento de paz' que necesita el mundo, según el Papa Francisco

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que durante su campaña electoral utilizó una retórica antiimigrante y se pronunció a favor de expulsar de su país a mexicanos y musulmanes, ahora podría convertirse en un 'instrumento de paz', según el Papa Francisco.

Esta mañana el mandatario estadounidense visitó El Vaticano, donde fue recibido por el Papa argentino quien regaló al presidente una escultura de un olivo y le dijo a través del intérprete que el objeto simbolizaba la paz.

"Se lo regalo para que sea un instrumento de la paz", dijo el Papa. Trump respondió: "Necesitamos paz".

Francisco también dio a Trump una copia firmada de su mensaje pontificio de la paz de 2017 cuyo título es "La no violencia, estilo de una política para la paz", y una copia de una carta que escribió a sus fieles en 2015, sobre la necesidad de proteger el medio ambiente de los efectos del cambio climático.

"Bueno, los leeré", dijo Trump. La postura del líder republicano sobre la legislación medioambiental choca con la visión de Francisco de que el cambio climático está causado mayormente por la actividad humana. Para Trump el cambio climático no existe.

Trump entregó al Papa una caja con las cinco primeras ediciones de libros del líder estadounidense por los derechos civiles de los afroamericanos, Martin Luther King, que fue asesinado.

El encuentro con el Papa marca la tercera parada de un viaje por el extranjero que terminará el sábado, como parte de un recorrido mundial que enlaza diferentes religiones monoteístas tras la visita de Trump a Arabia Saudita, a Israel y a los Territorios Palestinos.

Desde su campaña Donald Trump ha insistido en la construcción de un muro que separe su país completamente de México y en frenar el ingreso a Estados Unidos de la migración desde Latinoamérica, lo que ha molestado al Papa.

"Quien piensa construir un muro en lugar de puentes no es cristiano", dijo en varias ocasiones en referencia a Trump. El presidente de Estados Unidos le respondió que eran "vergonzosos" sus comentarios.

Según reportaron medios que estuvieron presentes en el evento, Francisco sonrió al recibir a Trump fuera del estudio, aunque no fue tan sociable como lo ha sido a veces en otras visitas de jefes de Estado. Trump también parecía apagado.

Incluso cuando ambos estuvieron sentados en el despacho del Papa en la presencia de los fotógrafos y los periodistas, Francisco evitó platicar.

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