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Música

La guía Noisey al pop de Nueva Zelanda

Desde Mac McCaughan (Superchunk) a The Chills pasando por las reediciones de Captured Tracks y Crowded House, los guiamos por el mundo del pop kiwi.

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Es muy fácil crearte un mito cuando te faltan datos. Para mí, Nueva Zelanda era la tierra prometida y ni siquiera tenía muy claro por qué. Escuchaba algunos nombres relacionados con mis grupos favoritos de entonces y estaba muy convencido de que me gustaban mucho sin haber escuchado nada. ¿The Clean? ¿The Chills? ¿Tall Dwarfs? Me habría hecho una camiseta con rotuladores si hubiese podido escuchar ni que fuese una canción. Me moría de ganas.

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Con el tiempo si fui escuchando a todos esos grupos, encontrando algunos discos físicos y volviéndome loco descargando ilegalmente en blogs dedicados exclusivamente a colgar discos salidos de la isla. El pop kiwi por fin a mi alcance, aunque un poco tarde para dibujarme las camisetas. Sirva esto de ajuste de cuentas con mi yo adolescente: Quique, tenías razón. El pop kiwi es la mejor música del mundo.

LA CULPA DE TODO LA TIENE MAC MCCAUGHAN

Y Stephen Malkmus (Pavement), y David Feck (Comet Gain), y unos pocos amigos que me pusieron tras la pista de un grupo llamado The Clean. Pero sobre todo, la culpa es de Mac McCaughan, que el año 2003 sacó una antología de The Clean que me hizo perder la cabeza. Él fue quien me puso por primera vez frente a todos esos nombres que me moría de ganas de escuchar sin mucho éxito. Por lo que él mismo nos explica, también sus inicios con el sello fueron duros:

"Tenía un par de amigos en la universidad que conocían su música y me la recomendaron en 1986. Uno de ellos hacía un fanzine llamado Too Fun Too Huge donde escribía sobre todos esos discos, y también había reseñas de los discos de Flying Nun en Forced Exposure. Creo que el primer disco que encontré fue el Lost EP de The Chills, luego vino Kaleidoscope World y Hallelujah All The Way Home de los Verlaines. Eran discos muy difíciles de encontrar y cuando lo hacías, solían ser muy caros, pero entonces vivía en Nueva York, así que era más fácil si tenías por costumbre pasear por tiendas de discos. Se encontraban cosas.

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Los Chills vinieron a tocar en el New Music Seminar –Nueva York- en la época de Brave Words, y conducimos desde Carolina del Norte para ver a The Bats en el Maxwell's en 1988. Lo divertido ahora es que creo que el primer disco de Flying Nun que escuché fue un disco de The Fall. Era muy fan suyo en el instituto y uno de sus discos más difíciles de encontrar era Fall In A Hole, un directo grabado en Nueva Zelanda y editado por Flying Nun. Lo encontré en una tienda de discos de Los Ángeles en 1985, pero no supe de los grupos de Flying Nun hasta un poco más tarde porque eran muy difíciles de conseguir. Estuve trabajando un par de años en una tienda de discos en Carolina Del Norte y el sello tenía algo de distribución. Alguno de sus grupos empezó a conseguir tratos para reeditar algunas cosas a través de Homestead/ Dutch East India en Estados Unidos, así que eso ayudó un poco. En esa época The Chills firmaron con Warner, Chris Knox con Caroline, The Clean sacaron Vehicle en Rough Trade, The Bats firmaron con Mammoth… así que algunas de esas cosas se volvieron más fáciles de encontrar.

Nos encantaba la idea de ayudar a que estos discos fuesen más accesibles en Estados Unidos, y Anthology (de The Clean) es una colección de clásicos de todos los tiempos, aunque el primer grupo con el trabajamos fueron los 3Ds. Venus Trail es un disco increíble. Giramos con ellos y también tocamos algunas veces con los Verlaines.

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The Bats firmaron con Mammoth Records, otro sello de Carolina Del Norte, y vinieron a la ciudad. Creo que fue durante la gira que hicieron con Straitjacket Fits y Jean Paul Sartre Experience. Querían grabar unas canciones en los estudios Duck Kee en Raleigh, donde grababan muchos grupos de Merge, y me pidieron tocar la guitarra en una de sus canciones, fue emocionante y estaba muy nervioso. Esos días estaba grabando el primer disco de Portastatic así que le pedí a Kaye si podía cantar en una canción y lo hizo, fue muy linda accediendo. Son alguna de la gente más maja que puedas conocer, así que nos hicimos amigos y todavía estamos en contacto.

Algo que me alucina de todos esos grupos es que todavía están haciendo discos increíbles. Por lo que respecta a grupos jóvenes, alguien me mandó unas canciones de un grupo excelente llamado The Shifting Hands. ¡Pégales una escucha!"

TOY LOVE

Suele considerarse a Toy Love como la piedra de toque del pop kiwi, pero lo cierto es que un poco antes existió un grupo previo de sus dos líderes, Chris Knox y Alex Bathgate, que se llamaban The Enemy y fueron uno de los primeros grupos de punk de Nueva Zelanda, pero fue su grupo posterior el que lo cambiaría todo. Eran un grupo de pop esquinado, pegajoso pero algo retorcido, que sentaría las bases de lo que luego sería el sonido Dunedín, una de las principales ciudades del país. Duraron sólo un par de años pero fue suficiente para crear uno de los sonidos más reconocibles del pop independiente de los 80. De sus cenizas nacerían Tall Dwarfs, más psicodélicos y locuelos que Toy Love, y la carrera en solitario de Chris Knox, uno de los protagonistas principales de esta historia. Pero no sólo ellos: Paul Kean acompañaría como técnico de sonido a todos los grupos primerizos de Flying Nun para formar al poco tiempo The Bats, Mike Dooler pasaría por Snapper y los Builders de Bill Direen, y Jane Walker pasaría por varios grupos sin demasiada repercusión. Las obras completas de Toy Love iniciarían las reediciones neozelandesas de Captured Tracks.

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NO PUEDO GASTAR 100 EUROS EN UN DISCO

¡No puedo y no quiero! Fuera de algunos discos concretos, los clásicos ocultos de Nueva Zelanda cotizan bastante altos en el mercado de discos de segunda mano. Es por eso –y por otras tantas cosas—que Mike Sniper es alguien tan importante en esta historia. Su sello Captured Tracks lleva unos años reeditando el catálogo de Flying Nun sin olvidar algunas joyas de la época fuera del sello más conocido. Hablamos con él para que nos cuente su historia con el sello:

"Debía tener 12 o 13 años la primera vez que escuché "Heavenly pop hit" en el programa "Modern Rock on the Jersey Shore" de Matt Pinfield (antes de ser VJ en la MTV hacía un programa de radio). Me atrapó desde el principio. No tenía internet, claro, así que tenía que confiar en la sección de importación de tiendas de Jersey Shore como Silver Tunes. Empecé a ver que muchas de las cosas que me gustaban llevaban el sello Flying Nun, el recopilatorio Tuatara, Tall Dwarfs, The Bats, The Clean… desde entonces, me zambullí en esta maldición insana que compartimos muchos de los coleccionistas del sello. Todavía necesito muy fuertemente los discos de Ballon D'essai y Sporting Life así que es casi un problema médico.

Tuvimos a un becario de Nueva Zelanda hace uno años, Josh Burgess. Le llevé a un rincón de la oficina y le dije que si podía conseguir que reeditasemos Kaleidoscope World y Brave Words en vinilo le daría un extra de 1500 dólares [Ríe]. Entonces conocía a Ben Howe y a Mathew Davies y empezó todo. Tenemos un acuerdo muy abierto basado sobre todo en el respeto mutuo. Es una calle de dos direcciones además, porque ellos nos ayudan en su territorio también.

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Hay gente que quiere acercarse el máximo posible al tiempo y lugar de esas grabaciones, es por eso que los originales siempre serán caros. Nuestro trabajo es reeditar estos discos y hacerlos accesibles para la gente a la que no le preocupa tener el original o marcar esa muesca al encontrar uno. Les dijimos a Flying Nun que todas las tiendas de discos del mundo deberían tener una sección del sello con discos de los Verlaines, los Bats o Chris Knox, y si somos capaces de conseguirlo, también cosas más raras. Creeme, me encantaría reeditar a The Rip y cosas así, pero muchas veces el artista no está interesado."

NO PUEDO GASTAR 100 EUROS EN UN DISCO

¡No puedo y no quiero! Fuera de algunos discos concretos, los clásicos ocultos de Nueva Zelanda cotizan bastante altos en el mercado de discos de segunda mano. Es por eso –y por otras tantas cosas- que Mike Sniper es alguien tan importante en esta historia. Su sello Captured Tracks lleva unos años reeditando el catálogo de Flying Nun sin olvidar algunas joyas de la época fuera del sello más conocido. Hablamos con él para que nos cuente su historia con el sello:

"Debía tener 12 o 13 años la primera vez que escuché "Heavenly pop hit" en el programa "Modern Rock on the Jersey Shore" de Matt Pinfield (antes de ser VJ en la MTV hacía un programa de radio). Me atrapó desde el principio. No tenía internet, claro, así que tenía que confiar en la sección de importación de tiendas de Jersey Shore como Silver Tunes. Empecé a ver que muchas de las cosas que me gustaban llevaban el sello Flying Nun, el recopilatorio Tuatara, Tall Dwarfs, The Bats, The Clean… desde entonces, me zambullí en esta maldición insana que compartimos muchos de los coleccionistas del sello. Todavía necesito muy fuertemente los discos de Ballon D'essai y Sporting Life así que es casi un problema médico.

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Tuvimos a un becario de Nueva Zelanda hace uno años, Josh Burgess. Le llevé a un rincón de la oficina y le dije que si podía conseguir que reeditasemos Kaleidoscope World y Brave Words en vinilo le daría un extra de 1500 dólares [Ríe]. Entonces conocía a Ben Howe y a Mathew Davies y empezó todo. Tenemos un acuerdo muy abierto basado sobre todo en el respeto mutuo. Es una calle de dos direcciones además, porque ellos nos ayudan en su territorio también.

Hay gente que quiere acercarse el máximo posible al tiempo y lugar de esas grabaciones, es por eso que los originales siempre serán caros. Nuestro trabajo es reeditar estos discos y hacerlos accesibles para la gente a la que no le preocupa tener el original o marcar esa muesca al encontrar uno. Les dijimos a Flying Nun que todas las tiendas de discos del mundo deberían tener una sección del sello con discos de los Verlaines, los Bats o Chris Knox, y si somos capaces de conseguirlo, también cosas más raras. Creeme, me encantaría reeditar a The Rip y cosas así, pero muchas veces el artista no está interesado."

ALGUNOS GRUPOS DE FLYING NUN QUE NUNCA LO LOGRARON

Y UNO QUE SÍ LO CONSIGUIÓ POR TODO LO ALTO

Crowded House son un fijo de la radio fórmula para maduritos, un clásico de M-80 y uno de esos grupos que no puedes evitar cantar de vez en cuanto. No importa lo mucho que les odies (y no es mi caso), un día te vas a poner tierno con ellos. Antes de Crowded House, los hermanos Finn formaban parte de Split Endz, un grupo a medio camino entre el pop más clásico, la nueva ola, el punk y el vodevil, y uno de los padres de la escena que vendría. Tanto es así que como un buen padre, su líder Neil Finn acudió a ayudar a Flying Nun en uno de sus momentos más bajos. En los 90, en un momento de crisis económica, la mitad del sello fue adquirida por el sello Festival Mushroom Records. Como sabes la industria discográfica fue a peor, y Warner absorbió el sello en 2006, dejando a Flying Nun sin ningún poder dedecisión en un entramado de multinacional complicadísimo. Tres años más tarde el amigo Neil Finn con su mujer y un amigo pusieron el dinero necesario para recuperar Flying Nun. De no ser por la M-80 es muy posible que ahora mismo siguiésemos buscando a lo loco los discos del sello.

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EL ANIMAL KIWI

Nueva Zelanda era lo suficientemente grande como para tener escenas paralelas, pero demasiado pequeño como para que no se tocasen de algún modo. No había razones para estar aislado, aunque hubo quien si buscaba cierta desconexión con lo que pasaba a su alrededor. Ese fue el caso de Brent Hayward, que a finales de los 70 tocaba en The Amps (luego Shoes This Tight), uno de los grupos más ruidosos de la capital de Nueva Zelanda y compañeros de correrías de Toy Love, entre otros. Exyonki y probablemente ex un montón de cosas más, en un momento se cansó de la ruidera y se propuso hacer canciones frágiles, de una belleza inquietante y fuera del cobijo de ninguna escena concreta. Fue determinante conocer a Julie Cooper, activista del teatro independiente, con quien formaría el grupo al poco de conocerse. El resultado lo podemos escuchar en un primer disco precioso de folk alucinado, esquelético y algo socarrón llamado Music Media, quizá la nota a pie de página más increíble de toda esta lista de grupos y escenas. El disco está grabado en una noche en una vieja sinagoga. Acaban de tocar allí, así que simplemente esperaron a que se fuese todo el mundo para montar todo el equipo y ponerse manos a la obra. A la mañana siguiente ya tenían listo uno de los mejores y más secretos discos grabados en Nueva Zelanda.

NO SÓLO DE POP VIVE EL HOMBRE

Paralelamente a todas esta escena más o menos pop, había un sello que juntaba la música más burra de la isla, Xpressway Records. Si te gusta el No Wave, los primeros Sonic Youth, todo el sello Siltbreeze o Jandek, deberías tenerlo ya apuntado con letras florescentes. Xpressay lo fundó Bruce Russell, miembro de uno de mis grupos de rock ruidoso favoritos, los desquiciantes The Dead C. Llevan en activo desde finales de los 80, así que si no sabes por dónde empezar, busca su recopilatorio Vain, Erudite and Stupid: Selected Works 1987-2005.

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DE GIRA POR NUEVA ZELANDA TOCANDO CON TU ÍDOLOS

Ya te dijimos que The Missing Leech es una alma inquieta. Sabíamos de su viaje a Nueva Zelanda, donde tocó con alguno de los músicos más míticos del pop kiwi, así que le pedimos que nos contara un poco de cómo fue.

"Empezaba a trabajar por primera vez en una gira internacional y sólo teniendo maquetas editadas uno se pregunta si será posible. Con casi un año de antelación fui uniendo fuerzas y contactos. Lo curioso es que nunca me plantee que podría ser tan espectacular hasta que llegué a manos de un pequeño promotor local Lee Wallace. Acababa de perder mucho dinero con la gira de Low por NZ de ese mismo año (2008) y pensó que con un "cantautor" seria más fácil. Lo fue y puso en común algunos de sus artistas favoritos juntos para parte de la gira en la zona de Auckland y alrededores. Chris Knox (Toy Love, Tall Dwarfs…) dijo que si porque lo que hacía le recordaba a sus inicios, Otis Mace también, gente que eran mis ídolos. Yo no entendía cómo podía pasar. Entonces al mismo tiempo recibí un mensaje de correo de Robert Scott de The Clean, The Bats… Preguntando si podía abrir para mi concierto en el Backstage de Dunedin. Pensé: "será otro músico", pero era él y estaba flipando. Me negué a ser el artista principal, como no.

Al mismo tiempo contacté con el artista británico de folk punk Patrik Fitzgerald en se momento residente en Christchurch. Patrik me ayudo sin conocerme y me abrió las puertas de su casa en la montaña. Grabé parte de mi primer disco con él produciendo. Tocando con él fue fácil atraer a público local interesante. Vino Alex Bathgate de los Tall Dwarfs. Sentado en primer fila y coreando "TV Crusaders". Nunca olvidaré ese momento. Uno de mis ídolos cantando conmigo. En el concierto con Chris Knox conoci a Peter Gutteridge (Snapper, The Clean…), que por desgracia nos dejó hace poco. Chris Knox atrajo público de su calibre y estaba, por ejemplo, Martin Phillipps (the Chills). Abrir para Chris Knox y que encima improvisase un tema sobre mí y me invitara a improvisar fue espectacular. Peter me dijo que era de lo más punk que había visto en mucho tiempo, des de los Sex Pistols en Auckland. Me hablaron de los tiempos mozos del DIY, pero en general preferían hablar del momento y nunca haciéndose los importantes. Preguntaban mucho.

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Gracias a tocar con Chris Knox participe en el tributo a Toy Love, una de sus primeras bandas. Llego a numero 1 en las listas independientes pero al 41 de generales. Versioné con los Animic "The Bride of Frankenstein". Así conocí a Shayne P Carter (Bored Games, Straitjacket Fit, Dimmer…) o a Hamish Kilgour (The Clean, The Mad Scene…), otros grandes héroes que compartían disco con nosotros. Todos recuerdan los conciertos, el ambiente muy bueno. Competitividad pero sin malicia, el cine independiente que pude ver en maratonianas tardes en la filmoteca de Wellington. Sin duda des de un sillón con smoothie de mango todo lo que tenga que ver con Flying Nun apetece más."

THE CHILLS, LOS REYES DEL POP LÍQUIDO

Nos pusimos en contacto con Martin Phillips, líder de los Chills y uno de los protagonistas de esta historia, para que nos contara de primera mano cómo fueron esos primeros días del pop kiwi que nos obsesionan. Además el grupo acaba de grabar un disco después de algo más de una década y nos regaló uno de los conciertos más emocionantes del pasado Primavera Sound. El día que hablé con él por teléfono tuve que contenerme alguna lágrima.

"En Nueva Zelanda había una escena de post punk bastante diferente a la escena punk "habitual", fans de la música de los 60 y de las canciones bien escritas. Era una mezcla de gente interesante, sobre todo teniendo en cuenta que Nueva Zelanda es un sitio tan pequeño. Es sorprendente que pudiésemos tener tanta repercusión dentro y fuera de la isla. Fue un tiempo muy emocionante para empezar un grupo.

Lo más importante es que compartíamos todo, desde el equipo hasta los lugares. Íbamos a vernos los unos a los otros siempre que podíamos y estábamos muy emocionados con escuchar las canciones nuevas de todos. Y también eramos críticos. Íbamos a las mismas fiestas. Todo giraba alrededor de la música y la amistad. Alguien descubría a grupos como Can, Faust o Neu!, otro estaba con Felt, otro llegaba con el nuevo disco de Magazine, compartíamos toda esa música entre todos y nos animábamos a hacer cosas nuevas. Eso nos ayudó mucho.

Hubo un tiempo a mitades de los 80 en que David Kilgour y yo estuvimos haciendo algo de música juntos. Incluso llegamos a hacer un grupo pero sólo hicimos un par de ensayos porque vimos que no iba a ningún sitio. Habría sido un gran grupo de haber funcionado. Algunas veces toqué como invitado de The Clean, pero nunca fui miembro real del grupo. Entonces mucha gente tocaba en muchos grupos distintos y se ayudaban entre sí, se enseñaban canciones…

Me gusta esa definición, pop líquido, creo que es por esa reverb en mi guitarra, al principio la usaba para tapar mis errores, porque no confiaba demasiado en mis habilidades. The Clean usaban una reverb muy bonita en sus guitarras, era parecida a la de los Seeds, que era increíble. Pero era complicada de reproducir en estudio, y supongo que en ese margen de error es donde está nuestro sonido. Mis canciones son canciones de pop pero las tocamos como si fuese rock, eso complica un poco la manera de grabarlas. Tampoco pasa nada porque un disco no tiene porque ser como el directo.

Después de todos estos años tuvimos la oportunidad de volver a grabar y nos está yendo muy bien. Los años siguientes a editar Sunburnt seguí haciendo música pero fueron tiempos complicados, tuve problemas con las drogas y todo se volvió más difícil. Pero pude salir adelante y me di cuenta de que podía hacerlo si reunía a la gente adecuada. En los últimos años hay una escena muy potente escribiendo grandes canciones. Por ejemplo, todos los grupos del sello Fish Writer, es perfecto para empezar a buscar."

DOS NOTAS A PIE DE PÁGINA

Acabo de repasar todo esto y es posible que sea solo la introducción así que seré breve: Busca el nombre de Hamish Kilgour y encontrarás el Santo Grial del pop independiente más libertino y excitante. Ha estado en The Clean, The Great Unwashed, Baiter Space, ha tocado con The Moles, Dean Wareham, Samara Lubelski, dentro y fuera de Nueva Zelanda. De todas estas excursiones fuera de The Clean, mis favoritas son sus discos de The Mad Scene y esta canción en la que acompaña a Bill Direen, otro favorito del que mejor te hablo otro día.