FYI.

This story is over 5 years old.

medio ambiente

Tabanoy y la pregunta por el cuidado

¿Cómo vivir en libertad sin agredir a la naturaleza? El colectivo de la localidad de San Cristobal, en Bogotá, cree tener una alternativa.

Artículo publicado por VICE Colombia

“¿Cómo se puede vivir en libertad sin hacerle daño a la naturaleza?” Esta es la pregunta que mueve al colectivo Tabanoy de la localidad de San Cristóbal en los Cerros nororientales de Bogotá. Quizás la fuerza de esta pregunta no sea su obvia resonancia en un mundo que discursivamente abraza todo tipo de relatos ecológicos, sino sus ecos en el oficio silencioso y constante. Tabanoy no es carteles de ballenas ni metáforas entreveradas sobre lo verde y lo sostenible. Tabanoy es, principalmente, una apuesta filosófica y política por encontrar mejores formas de relacionarnos como sujetos, pero más importante de “autodescubrirnos” como tal.

Entender las fuerzas que nos conectan con distintos niveles de la naturaleza y del entorno, así como las relaciones que estos entornos implican, es una de las cosas que logra Tabanoy en su trabajo. Su oficio nace de la curiosidad y el conocimiento técnico (como licenciados en biología), de la pregunta incansable y el movimiento continuo. Ellos —que creen que la ciudad es mucho más que las cuadrículas urbanas— recorren los bordes semiurbanos (¿o semirurales?) intentando conocer y responder la pregunta por el cuidado de sí, de los otros y de la naturaleza. En bicicletas o caminando, van acumulando semillas, sonajeros, botellas, ungüentos, troncos, raíces y conversaciones e historias (ellos lo llaman “biochismes”) para ir construyendo un repertorio, una forma de entender y posicionarse de manera crítica frente a un mundo que los lanza hacia otros centros, hacia otras narrativas donde el cuidado solo está en función del consumo y la individuación extrema.