Fotos de bailarinas plus-size que devuelven al carnaval su sentido inclusivo

En una acera de São Paulo, una passista —una bailarina del Carnaval de Brasil, un festival anual que marca el comienzo de la Cuaresma— se quita las sandalias y se pone un par de tacones dorados. Es un domingo nublado y es probable que llueva. Carina Vidal (37) sigue sonriendo aunque se da cuenta de que dejó su teléfono en el baño del bar donde se cambió de atuendo, y ahora ya no está. Es el último día de ensayo para Vidal y otros miembros de Acadêmicos do Tucuruvi, una escuela de samba, y los miembros de su sección Plusamba, un grupo de bailarinas de talla grande, esperan hacer un brillante debut en el desfile del Carnaval de este año.

Aldria Adiolá, la coordinadora de Plusamba, se inspiró para reunir a mujeres que se veían diferentes a los artistas brasileños acostumbrados a ser el centro de atención durante el Carnaval, especialmente después de un incidente reciente que las bailarinas tuvieron. "Otra escuela de samba nos invitó a actuar. Ensayamos todo, pero justo antes del carnaval, la otra escuela decidió no incluir nuestra sección", recuerda la mujer de 33 años.

Pero Adiolá sabe que ellos se lo pierden. Este año, las 30 mujeres conquistarán al municipio de Anhembi, siguiendo los tambores de Acadêmicos do Tucuruvi, y traerán una mayor diversidad de cuerpos y tamaños a las festividades del Carnaval.

Su camino no ha sido del todo fácil: a principios de enero, el 75 por ciento de los disfraces del grupo se perdió durante un incendio grave en el almacén de la escuela. Por esa razón, los miembros de Plusamba usan conjuntos nuevos. "Seremos diosas griegas", explica Adiolá.

“Antes, el Carnaval no se trataba sobre el estereotipo del cuerpo o la apariencia. Eso es algo nuevo que vino por los medios y la publicidad, que ponen énfasis en mujeres que representan la industria del fitness y que actúan junto a los músicos durante el espectáculo. Es por eso que necesitamos demostrar que todos tenemos derecho a divertirnos, vernos como reinas o musas", explica.

Algunas de las mujeres en Plusamba no tienen experiencia previa en celebraciones del Carnaval, pero eso no las detiene de participar. “Me veo como el tallo de una planta cuando bailo”, dijo Cátia Tappi, 40.

Tappi, quien ama los autos y el trabajo de mecánica, está acostumbrada a animar a otras mujeres. "Intento demostrarles que todas las mujeres pueden conducir, tener un auto personalizado o cambiar una llanta”, afirma. Y por lo tanto, también la animaron a bailar samba y practicar mucho para brillar. "Apenas el otro día, me escondía detrás de un auto. Pero ya no más, les guste o no”.

Larissa Zaidan está en Instagram.