Este artículo se publicó originalmente en Tonic, nuestra plataforma dedicada a la salud."Luces cansado". Esas son las dos últimas palabras que cualquiera de nosotros quiere oír cuando llegamos al trabajo, con los ojos adormilados y aferrándonos a nuestro café. Sin embargo, nuevas investigaciones sugieren que las personas no sólo pueden detectar la pérdida del sueño con tan sólo mirarte, sino que cuando la perciben, tienen menos deseos de querer acercarse a ti.Un estudio publicado en la revista Royal Society Open Science, basado en el trabajo anterior de investigadores del Instituto Karolinska de Suecia, muestra que las personas con falta de sueño parecen menos saludables y menos atractivas en comparación con sus contrapartes bien descansadas. El nuevo estudio reproduce ese hallazgo anterior y muestra que las personas son menos propensas a socializar con personas que no tuvieron un buen descanso.Los investigadores pidieron a 25 estudiantes universitarios, tanto hombres como mujeres, dormir ocho horas continuas durante dos noches seguidas. (Recibieron dispositivos que rastreaban sus movimientos para confirmar que habían dormido bien). Una semana más tarde, les pidieron que durmieran sólo cuatro horas durante dos noches consecutivas.Después de cada sesión, los investigadores tomaron fotos de los participantes y trataron de hacer las cosas de la manera más consistente posible: todos vistieron una camiseta color gris oscuro, tenían el rostro relajado (sin sonreír) y posaron sin maquillaje, con el cabello recogido, y con un mínimo de joyería. Las fotos fueron mostradas a 122 evaluadores, quienes las juzgaron con base en el atractivo, la salud, la somnolencia y la confiabilidad. Curiosamente, las personas les dieron una calificación baja a las fotos de los estudiantes cansados en las categorías de salud y atractivo, pero no consideraron que fueran menos dignas de confianza. Sin embargo, los evaluadores estaban menos dispuestos a socializar con ellos.
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Los autores del estudio señalan que, para bien o para mal, tendemos a atribuir características positivas a las personas atractivas: asumimos que son más sociables y competentes en las relaciones interpersonales, mientras que las personas privadas de sueño en realidad son más propensas a los accidentes, menos optimistas y sociables, y menos capaces de leer y expresar emociones, así que pueden ver por qué, teóricamente, no están hechos para ser los mejores amigos.Pero puede haber otra razón por la que parece que nos alejamos de nuestros compañeros zombis: los seres humanos han evolucionado para evitar la enfermedad; mantenemos nuestra distancia ante un posible contagio. En esta línea de pensamiento, la falta de sueño podría ser una señal de mala salud. Así que, además de parecer menos atractivas, las personas cansadas pueden verse menos saludables e incluso contagiosas. "Tener un rostro que no luce saludable, ya sea debido a la privación del sueño o de otro tipo, podría activar mecanismos de prevención de la enfermedad en otros y hacer que el entorno sea menos propenso a la socialización", como mencionan los autores.Todo este juicio sucede en gran medida sin pensarlo, y estas formas de describirlo se basan en la psicología evolutiva. Y aunque esta explicación es intuitivamente persuasiva, también se basa en los datos de un número relativamente pequeño de jóvenes suecos. Sin embargo, es algo que debes considerar la próxima vez que te estés mirando en el espejo después de pasar toda una noche en vela.
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