No todo aquí se trata de casas coloniales, historia revolucionaria y apacible vida pueblerina: Santa Clara, en el centro geográfico de Cuba, también es la cuna de una de las más importantes universidades del país y constituye el punto de partida para quienes anhelan explorar el interior de la isla. Santa Clara ofrece una versión de la realidad cubana más sosegada —y con menos turistas— que La Habana.Aunque algunos melómanos recuerdan la ciudad porque en 1920 cantó aquí el tenor italiano Enrico Caruso, hoy Santa Clara es famosa entre los roqueros por albergar Ciudad Metal, el mayor festival de rock pesado de Cuba: una vez al año, y desde 1999, las cabelleras más extravagantes de la isla se reúnen aquí para agitarse al ritmo del heavy metal.Pero quienes sacarán mejor provecho de esta ciudad serán, sin duda, los fanáticos del Che Guevara. Para ellos Santa Clara es una meca: en la ciudad y sus alrededores no sólo están los sitios donde el argentino fraguó sus victorias clave contra el régimen de Batista —todas conmemoradas con estatuas, museos, monumentos y plazoletas— sino que también se encuentra el Mausoleo del Che. Aquí yacen, desde que fueron devueltos por Bolivia en 1997, los restos del hombre cuyo rostro conociste estampado en una playera mucho antes que en un libro de historia.
Publicidad