Publicidad
Relacionados: Cómo logramos que funcionara nuestra relación de tres
Descubrí que cuando me dan celos, lo que origina ese sentimiento casi siempre es que, en el fondo, no siento que soy lo suficientemente bueno para Jon o Alex. Para mí, los celos son sinónimo de inseguridad.Es normal sentir celos; pasa todo el tiempo, sin importar qué tipo de relación tengas. Es parte de ser humano. Pero a fin de cuentas, lo que importa es la forma en que reaccionamos. Cuando me entra la paranoia, que es algo constante, trato de calmarme y analizar mi situación: ¿Qué es lo que realmente me da miedo? ¿Por qué no creo que merezco todo este amor?
Publicidad
Publicidad
Relacionados: Crecí en una familia poliamorosa
La gente con frecuencia me pregunta cómo le confesamos a nuestros amigos y familiares que teníamos una relación poliamorosa. No hay respuesta fácil para eso.Alex y yo presentamos a Jon con nuestros amigos y familiares durante nuestra boda. En ese entonces, parecía una buena idea: todos iban a estar juntos al mismo tiempo en el mismo lugar y queríamos que Jon estuviera ahí y que fuera parte de esa experiencia.Ahora que lo analizo, no me imagino lo difícil que debió haber sido para Jon y para las personas más cercanas a Alex y a mí. Y hoy, mi consejo es que tengas cuidado y no te abras tan rápido al escrutinio de tus seres queridos. Aunque las relaciones poliamorosas parecen normales cuando tienes una, están muy por fuera de la norma y no puedes esperar que todos acepten lo que nosotros sabemos: que el amor es vasto y que hay muchas formas de vivirlo y expresarlo. El poliamor asusta a la gente. Para algunos, cambia todo lo que creen sobre el amor.Una vez, alguien me dijo que estaba demostrando que todos los temores de los religiosos conservadores sobre los gays eran ciertos, que todos somos unas zorras, incapaces de comprometernos o de ser monógamos y que no tomábamos en serio al matrimonio. Y la persona que me lo dijo era gay. Mi respuesta fue: ¿Y qué? ¿Por qué no puedo vivir bajo mis propios términos? ¿Qué no se supone que para eso estamos luchando, para tener derecho a vivir como queramos? ¿Por qué una estructura social arbitraria quiere decirnos cómo amar y tener sexo? ¿Por qué habría de permitir que alguien me diga cómo amar y a quién amar?
Publicidad