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Fotos

Ser viejo en Rumania puede ser muy divertido

Una serie de fotos para demostrar que la edad no es el problema y que sin pedo puedes ser feliz montado en un triciclo rosa y hacer señas inapropiadas con la mano después de tu jubilación.

Un amiga me contaba el otro día sobre lo aburrida que podría ser la vida de un anciano. Me dijo “¿puedes imaginar lo culero que debe ser tardar 15 minutos en cruzar la calle o estar constantemente cagándote en público?”

Entendí perfectamente a lo que se refería, pero es claro que ella también había visto muchas películas de clichés y estereotipos sobre ancianos. Mis abuelos, sus amigos, mis tías y tíos abuelos definitivamente no van con eso, y son perfectamente capaces de bromear consigo mismos sobre su edad.

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Decidí hacer una serie de fotos para demostrar que la edad no es el problema y que sin pedo puedes ser feliz montado en un triciclo rosa y hacer señas inapropiadas con la mano después de tu jubilación.

Davies (74) se ha mantenido activo a lo largo de toda su vida y todavía ama hacer ciclismo tanto como sea posible. Cuando le pregunté por qué viste las gafas de snowboard en vez de gafas de sol normales, me dijo: "Si choco mi bici, estas gafas no se caerán de mi cabeza".

Elena (68) siempre está mostrando su amor por el metal. En sentido figurado porque goza de la música de cualquier persona que quiera y le guste escuchar, y literalmente porque gracias a su reumatismo en la mano izquierda sus dedos están eternamente haciendo unos cuernos.

Ileana (65) ha usado esta máscara frente del espejo incontables veces, practicando para cuando tiene que entrenar a su nieto. 

John (78) me contó una historia de su juventud: "Cuando era pequeña, por alguna razón, estaba decidida a robar una tienda. Así que un día me metí antes de que el dueño llegara, con un calcetín en la cara, pero no robé nada y volví a casa con las manos vacías.

Jenel (83) jugando con un par de cubos Rubick. Dice que los ha completado muchas veces, pero sigue haciéndolo porque es muy relajante.

Lia (96) siempre está afuera trabajando en su jardín, usa el extravagante y elaborado sombrero porque la protege muy bien del sol.

Otilia (85) dice que su lámpara de plasma es su juguete favorito. Está encendida todo el tiempo y le presta la mayor atención posible. Una vez estaba tan concentrada viéndola que no notó que la cocina estaba en llamas. No te preocupes, la cocina está bien ahora.

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Doina (73) nunca se interesó por muchos hombres en su vida o por muchas mujeres, pero dice que siempre hay alguien que te hará voltear la mirada.

Calin (65) estaba en el lugar equivocado en el momento equivocado, tuvo un accidente donde se rompió en cuello. No ves todos los días a alguien que usa un collarín permanente corriendo por ahí con una pistola de agua, a él no parece importarle mucho.

María (73) y Steliana (77) juegan cartas casi todas las noches, apuestan cosas viejas de sus casas y poco dinero, pero se toman el juego tan enserio que usan máscaras para impedir que lean sus expresiones en la cara.