Este hombre sólo come pizza

Mi amigo Dan sobrevive comiendo sólo pizza. Dicen que la riqueza está en la diversidad, pero para Dan, un carpintero de 38 años de Maryland, la riqueza está en el queso, la salsa, y el orégano, lo único que le pone a la pizza. La próxima vez que te digan que te comas tus verduras, mándalos a la chingada e ilumínalos con la siguiente historia.

Todos los que conocen a Dan se preguntan cómo es que sigue vivo. Más allá del hecho de que su dieta sea terrorífica, también es diabético y frecuentemente tiene bajos niveles de azúcar en la sangre. Cuando le baja el azúcar por lo general se cae y queda inconsciente en calzones con trozos de comida alrededor. Una vez se compró un coche y se quedó dormido mientras lo estrenaba. Se salió del caminó y destrozó el vehículo, pero fuera de ese accidente, todo parece ir a su favor. Hablé hace poco con Dan para saber más sobre su dieta de gluten, tomate y queso.

VICE: Se dice que eres el rey de la pizza. ¿Cómo conseguiste esa reputación?
Dan Janssen: He estado comiendo pizza cada día durante los últimos 25 años, y no se trata de una rebanada. Por lo general me como una pizza grande al día, y sólo como pizza de queso. Nunca me harto. Cuando cambio de pizzería o de marca, es como comer un platillo diferente.

¿Cuáles son tus pizzas favoritas?
La que más me gusta es la de Pontillo en Nueva York. No la he comido en más de diez años, así que no puedo decir si sigue tan rica como la recuerdo. Pero la última vez que la comí, fue por mucho mi mejor pizza en la vida.

¿Por qué no comes otra comida?
Antes comía "comida normal" como todas las personas, pero cuando tenía 15 o 16 años tomé la decisión de ser vegetariano por razones éticas. Aún me gustaba el sabor de la carne, y me sigue gustando, pero por mis creencias, renuncié a eso. Esto fue hace como 23 años. Y odio los vegetales.

¿Tu dieta agrava tu diabetes?
Cuando me dio diabetes, mi endocrinólogo me dijo: "Deberías ir a un nutriólogo. Comes horrible". Así que fui a un nutriólogo, y fue una pérdida de tiempo. Básicamente te dan una lista y te dicen "como eres vegetariano puedes comer esto y esto". Pero son cosas que no me gustan. A mí me gusta la pizza. Nunca he recibido una reacción negativa además de ese primer endocrinólogo. Todos los demás doctores me dicen: "Tu colesterol está bien. Te ves saludable. Sigue haciendo lo que estés haciendo". Nadie se ha preocupado por esto, salvo que mi novia, y no se preocupa demasiado. Con sus consejos y su apoyo, empecé a ir con un terapeuta para tratar mi repugnancia por la comida y saber la razón de tener una dieta tan limitada. Debo decir que suena a que soy una persona gorda y enferma, pero no. Soy delgado. Tengo mucha energía, y me siento bien, así que tal vez tenga algo que ver con la dieta de pizza.

¿Puedo preguntar de qué hablas con tu terapeuta?
Me ayudan a descubrir cosas que siempre he sabido pero que no les daba importancia. Como cuando tenía cuatro o cinco años, vivíamos por un bosque en Carolina del Norte. En la guardería nos alimentaban con estofado Brunswick, que no es algo que le darías a un niño de cinco años. Lleva puerco, pollo o conejo con lima, frijoles, elote, papas y tomate. Yo protestaba y trataba de correr. Me sentaba a llorar y gritar hasta que me recogían.

¿No hubo otra historia traumática que involucraba a tu hermana?
Cuando tenía cinco años, estaba en mi jardín y mi hermana me dio de comer unos hongos, que resultaron ser venenosos, y me tuvieron que llevar corriendo al hospital. Me dieron Coca-Cola y miel hasta que vomité, y seguí vomitando sin parar toda la noche. Al otro día estaba bien.

Suena horrible. ¿De las grandes cadenas de pizza, cuál es tu favorita?
Bueno, diría que todas son muy malas, pero voy seguido. La pizza es como el sexo, hasta cuando es malo, es bueno.

¿Te gusta cocinar?
Para nada. Mis habilidades llegan hasta el horno de microondas. Nunca he entendido la cocina. Dedicas tanto tiempo y energía, y luego comes y se acabó.

¿Hay alguna comida en particular que te gustaría probar en el futuro?
No quiero abandonar mi pasión por la pizza. Sin embargo, me gustaría poder ir a restaurantes donde no sirvan pizza y poder ordenar del menú, cosa que no puedo hacer ahora. Mi novia es vegetariana, así que sería bueno ir a otros restaurantes con ella. Estamos limitados por mi adicción a la pizza. Pero al mismo tiempo, no la quiero dejar. No me quiero convertir en esas personas que tienen fetiches con la comida. Me gusta la comida procesada. Me gustan los conservadores y la pizza. Mi papá es igual. Le hicieron una cirugía de bypass gástrica y una semana después se comió un bistec enorme.

¿Desde que vas con tu terapeuta has comido cosas diferentes?
[Risas]. No. De hecho, una de las razones por las que me gusta ir es porque al lado de su consultorio está Joe Squared [una pizzería] y siempre voy después de la sesión.

Genial. Disfruta tu pizza, Dan.