FYI.

This story is over 5 years old.

Noticias

Estas personas realizan enemas de cloro a sus hijos para 'curarlos' del autismo

Creen que funciona porque limpia el cuerpo de parásitos misteriosos conocidos como "rope worms" (gusanos de cuerda) y de otros patógenos que creen ser causa de autismo.

Foto vía Flickr del usuario Vox Efx.

Ya sea que tengas sida, malaria, cáncer o autismo, existe un producto que se vende en internet que dice ser capaz de curarte. Ese producto, llamado Milagroso Suplemento Mineral (MMS por sus siglas en inglés), suena muy parecido a cualquier otro producto milagroso. Pero a pesar de que algunas formas de medicina alternativa resultan ser benignas, el MMS en realidad puede ocasionar daños bastante serios. Esto se debe a que es una solución de clorito de sodio al 28%, que al mezclarse con ácido cítrico —como indican las instrucciones— forma dióxido de cloro (ClO2), una poderosa forma de cloro usada como pulpa industrial y para blanqueo textil.

Publicidad

Obviamente esto no es algo que te gustaría meterle a tu cuerpo. Aún así, hay algunos padres que están dando esta peligrosa sustancia a sus hijos, tanto vía oral como por enemas, pues creen que esto los curará del autismo.

La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) ha estado al tanto del MMS durante algún tiempo. En 2010 lanzó una advertencia en la que decía que el producto se convierte en un "poderoso cloro" que "puede causar náusea, vómito, diarrea y síntomas de deshidratación severa" al ser consumido. Existen reportes de al menos una muerte causada por el uso de MMS; además, unos niños fueron evacuados de sus casas en Arkansas bajo la sospecha de que sus padres les estaban dando dicha sustancia.

No obstante, existe mucha gente que está convencida de que usar el Milagroso Suplemento Mineral —también conocido por seguir el "Protocolo DC" (DC significa dióxido de cloro)— curará lo que sea que les aflija. Ellos creen que funciona porque limpia el cuerpo de parásitos misteriosos conocidos como "rope worms" (gusanos de cuerda) y de otros patógenos que creen ser causa de autismo (hay que aclarar que esta teoría no está fundamentada por la ciencia médica). Además, no sólo cura el autismo. El MMS se vende como un producto cura-todo, desde la diabetes hasta la malaria, el ébola y el sida. Incluso hay una seudo-Wikipedia en donde puedes buscar qué protocolo seguir para tratar cualquier mal, ya sea calvicie o cáncer cerebral.

Publicidad

Si todo esto suena como a una especie de culto, se debe a que en realidad lo es. El MMS fue "descubierto" por un hombre llamado Jim Humble, un ex cienciólogo que comenzó su propia iglesia llamada Génesis II, de la cual ahora es el arzobispo autodesignado. La iglesia parecer ser poco más que un órgano de mercadotecnia de la supuesta cura milagrosa, aunque cabe destacar que el sitio en realidad no vende el maravilloso producto. No obstante, el sitio ofrece un montón de materiales adicionales, como un "Curso en video de MMS para casa" de 199 dólares e información acerca de seminarios increíblemente caros sobre el MMS.

LEAKED: Proof the Red Cross Cured 154 Malaria Cases with MMS — Genesis II Church (@GenesisIIChurch)November 4, 2014

Si Humble es el padre de una manada de sofistas, entonces una mujer llamada Kerri Rivera es la mamá oso. Rivera es obispo en una iglesia de Humble y es también autora de un libro llamado Healing the Symptoms Known as Autism (La sanación de los síntomas conocidos como autismo), en el que recomienda dar a niños autistas "dosis por hora" de dióxido de cloro y alega que los enemas con dióxido de cloro son una manera de "matar patógenos que se encuentran en el cerebro".

Su página web, CDAutism.org, es —así como la de Humble— bastante cuidadosa al declarar que no vende el MMS. En cambio, el sitio promueve la idea de que esta sustancia curará el autismo. También vende materiales como su libro y ofrece consultas por Skype acerca de cómo administrar el "tratamiento" que cuestan más de 100 dólares la hora.

Publicidad

En otras palabras, en vez de vender el MMS (que probablemente no hacen por razones legales), Humble y Rivera abogan por éste como un estilo de vida. Por lo tanto, promueven la peligrosa idea de que la compleja condición neurológica conocida como autismo es en esencia un problema de los intestinos que en cierta forma puedes sacar de tu cuerpo con cloro industrial. Y sus seguidores se lo creen. (Los intentos para contactar a Humble y a Rivera para esta historia fueron inútiles).

No hay manera de estimar con certeza cuántas personas están haciéndose esto a sí mismos o a sus hijos. Uno de los sitios de Humble declara que el MMS ha ayudado a 20 millones de personas, mientras que Rivera habla de un número más modesto (pero escabrosamente más específico) de 164 niños que han sido curados de autismo.

A pesar de que su comportamiento cada vez se encuentra más sujeto al escrutinio legal, los entusiastas del MMS se han vuelto bastante elusivos. Incluso abandonaron una página de Facebook que tenía más de siete mil seguidores para mudarse a un foro anónimo en la página CDAutism.org. En éste, dicen sin ironía alguna, se sienten más "seguros", ya que aquí se requiere tener cuenta propia.

Es aquí en donde aquellos que han comprado la milagrosa cura comparten sus historias y hablan de qué tipo de dosis les pueden ayudar.

Hurgar entre estos posts es como entrar en un caldero de bruja lleno de información falsa, pseudociencia y paranoia. Aquí puedes encontrar a padres que hablan abiertamente de los méritos de beber agua de mar y de hacerse limpias en ciertos ciclos lunares. Los entusiastas del MMS hablan casualmente como si estuvieran intercambiando recetas acerca de qué tantos centímetros debes insertar el catéter en el recto de sus hijos, cómo meterlos en un baño de dióxido de cloro y de cómo usar "tácticas y trucos" para vencer la resistencia de los niños a recibir un enema de cloro.

Publicidad

Lo más horrible es que estas "tácticas y trucos" incluyen usar el autismo de los niños —por ejemplo, su "amor por la rutina"— en su contra.

Guiados por moderadores anónimos, los usuarios intercambian anécdotas en lugar de intercambiar ciencia, siempre tomando decisiones que afectarán a sus hijos de maneras íntimas, con efectos secundarios físicos y psicológicos desconocidos. Mientras tanto, los moderadores emiten comentarios tranquilizadores de que no se preocupen de cosas como función intestinal reducida o de "cientos de pequeños objetos rojos" en el excremento de los niños tras los enemas. Ellos están convencidos de que todo esto es parte del proceso de sanación.

Hay un sentimiento bastante amplio en contra de la vacunación en esta subcultura, ya que las vacunas son vistas por muchos usuarios de dióxido de cloro como la fuente inicial del autismo de sus hijos. Mucho de esto es resultado del efecto de onda de un estudio desacreditado de 1998 que postulaba una posible conexión entre la vacuna MMR (sarampión, paperas y rubéola) y el autismo. A pesar de haber sido refutado, el estudio aún continúa dando pie al debate en torno a las vacunas y ha contribuido a recientes brotes de enfermedades que ya habían sido erradicadas, como el sarampión.

No obstante, algunos fanáticos del MMS creen que las vacunas resultan en parásitos, los cuales, a su vez, causan autismo. Le pregunté a Emily Willingham, una divulgadora científica que ha escrito acerca del MMS en Forbes y en Thinking Person's Guide to Autism, si me podía explicar esta lógica.

Publicidad

"Uno de los argumentos principales de los que creen que las vacunas causan autismo es que éstas contienen toxinas, que un 'intestino permeable' juega una parte importante de alguna manera, y que estas vulnerabilidades conducen a infecciones parasitarias, a sobrecargas de levadura y a un montón de cosas raras que 'deben' ser tratadas", me dijo Willingham en un mail.

En efecto, los entusiastas del MMS/CD están completamente obsesionados con los parásitos. En CDAutism.org y en todos lados postean fotos asquerosas de lo que creen que son los "gusanos de cuerda" u otros parásitos que supuestamente salen de los cuerpos de sus hijos después de las dosis orales o rectales de dióxido de cloro (la evidencia de que los gusanos de cuerda existen es de hecho bastante limitada).

Me escribí con una doctora en Sudáfrica, Louise Lindberg, quien examinó tres muestras de excremento que le dio una mujer que admitió haber usado dióxido de cloro en ella y en sus hijos. Ella no encontró evidencia alguna de dichos parásitos. "La microbiología no reveló ningún parásito o incluso huevecillos", escribió Lindberg en un mail. "La histología confirmó que era una combinación de mucosas, materia vegetal, enterococos (flora prebiótica) y células intestinales".

No obstante, lo que sí encontró en sus pacientes fue "incomodidad abdominal, comportamiento agravado, pérdida de peso, niveles bajos de sodio y deficiencia de hierro". Para aclarar las cosas, le pedí su opinión acerca del MMS/CD. Lindberg, experta en autismo, contestó: "Siento que es bastante dañino y que no es capaz de 'curar el autismo' de ninguna manera".

Publicidad

De acuerdo con Fiona O'Leary, defensora del autismo y activista radicada en Irlanda, el asunto es bastante claro: "Tenemos que detener estos tratamientos falsos porque son peligrosos, no están autorizados, no están comprobados científicamente y sólo han demostrado causar daños reales".

O'Leady —madre de dos niños autistas y que también sufre un poco de éste— ha estado involucrada en el activismo contra el MMS en Irlanda desde 2014. En una larga conversación, O'Leary habló de su campaña contra del MMS y comparó el uso de dióxido de cloro con otros tratamientos desacreditados para el autismo como la quelación y la terapia de shock.

"Es como algo salido de una película de Stephen King", dijo. "Son conejillos de indias. No tienen una vida. Desde el minuto en que despiertan están drogados con él [dióxido de cloro] y están drogados todo el día. Los padres los sacan de la escuela debido a que no se les permite administrarse dosis ahí y se esconden de las autoridades protectoras de menores, porque saben que lo que están haciendo está mal".

Las declaraciones de O'Leary parecen tan increíbles como escabrosas, pero de hecho, los padres que frecuentan los foros de CDAutism intercambian abiertamente tips acerca de cómo evadir a los servicios de protección de menores, quienes ya están conscientes de algunas áreas en donde se administra dióxido de cloro a niños.

"Es tan increíble que tienes que pellizcarte para ver que es cierto. Pero en realidad está pasando. Está sucediendo en donde vivo", dijo O'Leary, quien dice que le han ofrecido MMS en Irlanda y una de esas veces se lo ofreció un dentista.

Publicidad

Si desafía toda creencia, definitivamente desafía toda lógica. Los fanáticos del dióxido de cloro están tan casados con su método que la verdad de fondo no puede ser cuestionada. De hecho, en su distorsionada percepción, los efectos negativos en el niño, como los alarmantes excrementos, son prueba de que la terapia está funcionando y de que se necesita más dióxido de cloro para seguir purgando el cuerpo.

Cuando los niños son hiperactivos o ansiosos —lo cual se toma como evidencia de un comportamiento autista—, tanto los consejos en los foros de CDAutism.org y los del libro de Rivera sugieren "una dosis doble". Además de los inquietantes excrementos, los padres reportan síntomas en sus hijos tales como náusea, diarrea y "orina rosa": cosas que son resultados claros de la ingesta de cloro, pero que son considerados evidencia de autismo. La validez del protocolo es en sí misma sacrosanta, y en este mundo retorcido, cuando hay alarmantes efectos secundarios derivados de los enemas, la solución es… más enemas.

Aquí un padre consternado se pregunta por qué su hijo "se revuelca del dolor después de cada dosis", pero explica que tuvo que "incrementar rápidamente la dosis" para evitar cualquier "comportamiento" indeseado.

"Son tan inconscientes de lo que hacen que a veces creerías que no deberían ni siquiera tener una mascota. No deberían tener hijos", dijo O'Leary.

No hay cura para el autismo, el cual cada vez es más visto como un ejemplo de la diversidad neurológica y no como una enfermedad. Willingham cree que es la noción de que el autismo es una "tragedia horrible, una enfermedad que se 'roba' a su hijo" la que ha causado que algunas personas compren "terapias" falsas y peligrosas.

"El autismo es una condición del neurodesarrollo que se remonta al desarrollo fetal. No puedes blanquearlo y desaparecerlo, y la gente autista merece respeto y atención a su condición como persona", dijo Willingham.

Existen señales positivas de que el Departamento de Justicia de Estados Unidos está reprimiendo a los distribuidores en el país: en 2013, un proveedor mayor de MMS llamado Louis Daniel Smith fue arrestado por cargos relacionados al contrabando y por etiquetar la sustancia con otro nombre. (El juicio comienza este mes y los partidarios de Smith han comenzado a financiar poco a poco su defensa). Aún así, el MMS es técnicamente legal.

O'Leary teme que si no surge una nueva regulación, los tratamientos pirata, como el dióxido de cloro, se volverán peores y mucho más difundidos. Jim Humble postea regularmente fotos estremecedoras de visitas a países en desarrollo en donde el dióxido de cloro se le da a personas ya enfermas como una supuesta cura a la malaria y al sida. Humble anunció en febrero sus planes de construir una iglesia de Génesis II en Sierra Leona.

A pesar de que varios países como Irlanda y Canadá han lanzado advertencias, O'Leary dice que espera que la creciente atención mediática logre que los poderes tomen acciones concretas en este asunto.

"Sólo pido a Dios que el gobierno se encargue de esto y que en serio lo vea como una violación a los derechos humanos", dijo O'Leary. "No es nada menos".

Sigue a Stefan Sirucek en Twitter.