Miguel Pazcabrales
Perder es peor que sólo hacer el ridículo
En Corea del Norte perder un partido de futbol se castiga con trabajo forzado en las minas.
El futbol como motor de la limpieza étnica
Arkan, el genocida apasionado de su equipo La Estrella Roja de Belgrado.
El deporte no pone límites al tamaño del crimen
Supremacistas blancos haciendo negocios con afrocaribeños para hacer un golpe de Estado.
Libia y Guinea Ecuatorial: unidad nacional a través del fútbol
Para ejemplo de este desmadre basta platicar sobre la balacera que le propinaron al autobús del equipo nacional de Togo.
La nueva orden mundial del futbol
El deporte mundial, evento de masas donde se mueve dinero y poder, es donde hoy por hoy existe la corrupción más descarada.