Cómo follar siendo cristiano y sin hacer llorar al niño Jesús

El sexo y la Iglesia Católica son dos mundos que no están tan lejos como parece. Ahora que el Papa es rockero, no nos extrañaría que dentro de poco lanzara algún tipo de nota de prensa (o encíclica o lo que haga) diciendo de una vez que follar está bien, aunque no se esté casado, que vivan los condones, que adelante con los vibradores, que bien eso del sexo oral y festejando la masturbación. Que nadie se ha quedado ciego, ni se le han llenado las manos de granos. Pero hasta que llegue ese momento, nosotros hemos decidido rebuscar en fuentes apócrifas en Internet a ver qué se cuece por ahí sobre otras líneas de pensamiento dentro de la Iglesia.

Lleva ya tiempo publicada pero la web Sex in Christ sigue siendo un auténtico pozo de sabiduría. Un manantial que no deja de deslumbrarnos con sus ideas y justificaciones. Con cómo argumenta, por ejemplo, temas como el sexo anal y las ventajas de beber semen. "Aparte de ser una medida que evita el desperdicio de las semillas, la ingestión de lo eyaculado puede tener beneficios espirituales. En el Antiguo Testamento se hace referencia a la amargura del semen ('y dará de beber a la mujer el agua amarga'), pero en el Nuevo Testamento se proyecta luz al acto de consumir lo eyaculado, cuando Jesús habla a la mujer samaritana acerca del don del 'agua viva'". Y esto solo es un ejemplo.

Hay para todos. Para justificar el consumo de Viagra, el bondage, el fisting o el sexo anal. Vamos a hacer una nueva parada, merece la pena, en el acto de la masturbación, que tan de cabeza ha traído siempre a la Iglesia y a sus feligreses. Ellos dicen que previene de las enfermedades de transmisión sexual (algo plano); previene los embarazos no deseados (sic); es una alternativa a las relaciones sexuales prematrimoniales (en fin, lo que se conoce como matarse a pajas); es una alternativa al comportamiento pecaminoso del adulterio (o sea, matarse a pajas pensando en la vecina de enfrente); proporciona placer si el sexo no es satisfactorio (hombre, no es lo mismo); nos permite disfrutar de los beneficios de la liberación sexual (aquí nos han matado, directamente); nos permite disfrutar de nuestros cuerpos y del regalo del placer sexual que nos da Dios (la mejor, meter a Dios en el saco de las pajas, nos encanta). Todo esto para decir que la masturbación no hace llorar a Dios, que lo pone un poco más feliz.

Pero dejemos este agujero negro en la red, para seguir navegando en busca de más datos de la apología del sexo de acuerdo a las Sagradas Escrituras. En Desarrollo Cristiano encontramos una entrevista al matrimonio Penner, que se autodenominan expertos en el tema que hoy nos ocupa. En este caso abordan la falta de apetito sexual. Y tiran de Biblia para decir que hay que estar siempre al pie del cañón. "El mejor ejemplo de que el placer sexual mutuo es bueno se puede encontrar en el Cantar de los Cantares de Salomón, que está lleno de placer sexual". "En un pasaje se dice claramente que el esposo no puede defraudar a su mujer en lo que le corresponde y que la mujer no puede decepcionar a su esposo". Vale que entra por medio el tema del matrimonio, pero también se defiende follar aunque sea para no tener hijos.

Vamos a la web de preguntas y respuestas del Pastor Ureña donde se vuelve a hablar del sexo oral. Porque parece que es un tema que a la gente le preocupa especialmente, a la gente que reza, nos referimos. El pastor demuestra ser un converso en este tema y donde antes veía pecado, ahora ve un acto bien decente. "El pene fue diseñado para expulsar residuos y para proporcionar esperma para producir la vida humana. La boca está diseñada para introducir comida por ella, pero note que también besamos con los labios de la misma boca… también hablamos con ella y tomamos líquidos. Es por esta multifunción de la boca que en realidad hoy no estoy tan convencido de que el argumento levantado por algunos sea aplicable para prohibir el sexo oral entre el marido y mujer cristiana". Vaya, nos ha quedado bien claro: motivos fisiológicos puros y duros.

El Punto Cristiano es un sitio en el que se pretende combinar entretenimiento y divulgación, al menos así se presentan ellos. Hemos encontrado algunas perlas en el post que dedican a la sexualidad dentro del matrimonio creyente que para ellos es uno de los temas "candentes y controversiales de los que se puede hablar". Festejan mucho follar, animan a ello, incluso a disfrutar del erotismo y los jueguecitos íntimos. Pero ponen un 'stop' como una catedral al tema del sexo anal: "Podemos decir que sí existen límites, y estos son los que puedan ser desagradables para ambos. Entre estas prácticas encontramos, el sexo anal, éste puede degradar la relación sexual pues evade mirar el uno al otro a la cara, y puede resultar muy incómodo. Algunos pueden considerar el sexo anal como algo egoísta, como algo que pervierte el orden divino".

Y terminamos nuestra búsqueda en Biblia Online donde encontramos un auténtico festín de sugerencias. Entre ellas destacamos las que se proponen a una mujer para hacer feliz a su marido: "Preséntese de forma sexy. Aproveche aquellas ocasiones mágicas en que tomas un baño relajante, vistes algo sexy, esparces un poco de perfume alrededor, disminuyes la luz de la habitación, pones una música romántica, en fin, preparas la habitación para un momento especial. Con toda seguridad tu esposo sentirá placer tanto como tú". No es mal consejo.