New York - Cuando hacíamos fanzines

Hola. Estamos muy, pero que muy orgullosos de presentar hoy el “Proyecto Vice de Conservación de los fanzines-oscuros-que-nuestros-amigos-hicieron-en-los-90s”. Empezamos con la editora general de Vice New York y su aclamado fanzine noventero “If Prince Was My Girlfriend” (“Si Prince fuese mi novia”) que, en 1997, recibió críticas brillantes en Factsheet Five, Queer Zine Explosion, Screw y en cada pequeña publicación lesbiana existente en ese momento. El fanzine era sobre Prince, pero sobretodo era de amor. Jaja, no, era sobre la autora, sus pensamientos, sueños e ideas sobre el amor, el sexo y el género (era licenciada en Estudios de la Mujer, lo que explica todo), y como todo se vinculaba con PRINCE. Era muy divertido. Comencemos este viaje atrás en el tiempo, hace mucho tiempo, antes de los blogs, antes de MySpace, cuando los fanzines le decían al mundo “Este soy yo, mundo! Y estoy lleno de angustia!”. Acompañadme…

La portada la dibujó Jim Krewson, que ahora hace muchas ilustraciones para Vice. Se supone que debería parecerse a un libro para colorear, y es Prince paseando dos versiones mutantes del símbolo por el que se cambió el nombre. Jajajaja!

Diez años después, aún escribo igual. ¿Es bueno o malo? (PS: haz click en la imagen pequeña y, con suerte, se agrandarán lo suficiente como para que puedas leer).

Sinceramente creo que el artículo “Experiencia Sexual Formativa en relación con Prince” se sostiene por sí mismo bastante bien.

Realmente no queda claro de qué van las imágenes en el margen inferior izquierdo de la página, pero son los pechos de Apollonia en Purple Rain, de la escena donde se quita la camisa y salta al lago Minnetonka. He tenido que ir pausando la escena en la video para hacerle fotos y luego llevarlas a revelar, corta y pegar, y bla bla bla. Dios, solía ser tanto trabajo! Además, en ese entonces, los letraset eran nuevos y apasionantes.

Mi amiga Itchie, que ahora usa su nombre normal Jenny, escribió este artículo. Creo que es realmente muy gracioso. Solía hacer un fanzine llamado “Everything I Touch Turns to Shit and Garbage” (“Todo lo que toco se vuelve mierda y basura”). Era una de mis escritoras favoritas. No sé por qué lo dejó!

“¿Sabías que el pseudónimo/alter ego de Prince, “Camille”, es una referencia al apodo de Herculine Barbin, el famoso hermafrodita del siglo XIX?” Ja ja ja! ¿Muchos estudios de género? A la derecha está lo que escribió el loco padre de mi amiga, al que le comprábamos hierba, despotricando sobre un jardín que estaba siendo destruido. Es un incondicional de las lesbianas. Aún lo veo algunas veces en el “Fish” y me flipa.

Una reseña de un concierto de Prince en Jones Beach. En aquel entonces me emocionaba tanto por las cosas! Suspiro.

Creo que estas dos páginas son muy divertidas. Richard Wang, otro escritor increíble que dejó de escribir por alguna razón poco convincente. Ah sí, se hizo en médico.

“Prince=Punk” es para reirse entre dientes. También es significativo mi comentario “No me importa mucho la web”.

Una nota de este tío Justin, con quien solíamos hacer largos viajes. Era tan guapo. Se vestía como un mod afeminado y yo llevaba la cabeza afeitada. Una vez condujimos hasta New Orleans y lucíamos tan frikis que no puedo creer que no nos hayan pateado el culo unos rednecks de Alabama. Hace poco intenté localizarlo pero es como si hubiese desaparecido. Lo ultimo que supe es que estaba viviendo el Los Ángeles vendiendo ácidos. ¿Alguien tiene alguna pista?

Algunos estudios graciosos de las letras de Prince.

Itchie tenía un número de Hustler con un tío idéntico a Prince en la portada y un desplegable al estilo “When Doves Cry”. Era muy lindo, pero obviamente no sería un fanzine si no estuviese tan mal fotocopiado que parece una mierda total.

El desplegable.

Un artículo gracioso llamado “La Guerra de las putas: Apollonia vs. Vanity” que reimprimimos de Blair, una revista online pionera y divertidísima que hizo Richard Wang. Aún está online!

JF Ryan, actualmente de Excepter, pero en ese entonces de No-Neck Blues Band, contribuyó con un poco de su propia diatriba sobre Prince.

Aquí defino la palabra “hegemonía”.

Reimprimí un ensayo (en su totalidad, que os lo ahorraré) de un extraño periódico académico sobre cómo el cambio de nombre de Prince por un símbolo era un gran me-cago en el género, el sexo, el lenguaje y no me acuerdo que más.

Con bibliografía y todo! Me encanta ese pequeño recorte que hice de Morris Day y Prince. Es tan riot grrl! Era bastante guay. Fin.