Nunca serás tan rico como estas mascotas

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Cuando te echan de tu casa (ya por impago de hipoteca, ya porque la habías okupado) y vas rastreando las aceras a ver si a alguien se le ha caído una moneda y te puedes comprar algo de desayunar, es inevitable soñar que algún día reposarás la cabeza en una almohada rellena de billetitos. Quizá porque te toca la lotería, o porque recibes una herencia de ese tío tuyo que hizo fortuna y del que tus padres nunca te hablaron. Bueno, siento decírtelo pero eso no va a pasar. Vas a vivir a trancas y barrancas y a morir pobre como una rata.
 
   ¿Y sabes quiénes son más ricos que tú? Un buen porrón de hijoputas de extrema derecha, genios tecnológicos con sudadera de capucha y oligarcas rusos de poco fiar. Y unos cuantos animalitos. ¡Sí, animales! Hay mascotas que son millonarias mientras tú sigues intentando colar ese carnet escolar que expiró hace dos años para comprar una tarjeta de metro a precio reducido. Y así funciona el mundo. Acéptalo. GUNTHER IV: Valor, 373 millones de dólares
Este pastor alemán es el perro más rico del mundo. Heredó su dinero de su padre, al que su dueña, la condesa alemana Karlotta Liebenstein, legó 80 millones de dólares en 1991. Los otros 300 salieron de inversiones hechas por sus fiduciarios. Sí, este animal tiene personas que trabajan para él. También es dueño de la antigua mansión de Madonna en Miami. TOBY RIMES: Valor, 80 millones de dólares
Dinero llama a dinero. El tatarabuelo de Toby, el Toby original, era el caniche mimado de una ricachona loca, una tal Ella Wendel, que a su muerte, en 1931, le dejó toda su fortuna. La herencia, que ha pasado de un perro a otro desde entonces, ha aumentado al mismo ritmo que decrecen tus ofertas de trabajo. LUKE, LAYLA, SUNNY, LAUREN Y SADIE: Valor, 30 millones de dólares
Oprah Winfrey ni nos dejaría acercarnos a una de las cosas que tuviera como favoritas, pero parece ser que en su testamento lega un fortunón a los chuchos que deje desamparados cuando fallezca. Eso, claro, si es que Oprah no es inmortal, lo cual es difícil de creer. TOMMASINO: Valor, 15 millones de dólares
Esas historias románticas de pobres que se hacen ricos sí existen en la vida real, pero sólo si eres un gato callejero que se cuela en la casa de la viuda Maria Assunta y le ronroneas cositas al oído para que te incluya en su testamento. Pero tú eres humano. Te arrestarían si intentaras algo así. Estás jodido. CONCHITA, APRIL MARIA Y LUCIA: Valor, 11 millones de dólares
Estos tres pulgosos (un chihuahua, un maltés y un yorkshire terrier) heredaron tres millones de dólares y una mansión en Miami (que se acaba de vender por más de ocho millones de dólares) de una ricachona loca (¡otra!) llamada Gail Posner. Su hijo sólo recibió un millón e impugnó el testamento, alegando que sus asistentes drogaban a la mujer con pastillas y querían robarle el dinero. ¡Florida! GIGOO: Valor, 10 millones de dólares
El heredero de la editorial británica Blackwell, Miles Blackwell, hizo una fortuna vendiendo libros. Y se lo dejó todo a una gallina. En el mundo hay una gallina millonaria. Ya te puedes cortar las venas.

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