Ya hace casi dos meses que se terminó el Burn Residency, el concurso de DJs en el que el mejor de una selección de los mejores DJs jóvenes de todos el mundo, podía ganar 100.000 euros para impulsar su carrera profesional.Hoy, que aquí en Barcelona, desde donde escribo, ya va refrescando y notamos cómo va llegando poco a poco el invierno, nos ha dado por acordarnos de aquellos fantásticos días de verano que pasamos en Ibiza junto a los participantes, futuros maestros de las mesas de mezclas.Pero el concurso era duro, y pronto algunos de los participantes que llegaron a la isla blanca tuvieron que empezar a marcharse.Los que quedaron tuvieron que currar realmente mucho, aunque tenían la ayuda de grandes del género como Carl Cox y Pete Tong.A todo esto, nuestro representante español, Javi Row, fue haciéndose cada vez más importante en la competición y ganándose la confianza de los jueces y del resto de sus compañeros.Finalmente, él fue el elegido como ganador de la competición de este año, llevándose el premio para impulsar su carrera como DJ. Estamos seguros de que no pasará mucho tiempo hasta que su nombre comience a sonar como uno de los habituales de nuestras discotecas favoritas.En unos días hablaremos con Javi para preguntarle qué tal le va y para que nos cuente sus planes de futuro. Mientras, ¡que la música os acompañe!
Publicidad