Shitgazers United

Foto de Mike Jordan

Los componentes de Psychedelic Horseshit, acuñadores del término “shitgaze”, formaron el grupo en el transcurso de una fiesta porque les apetecía hacerlo, y ahí mismo se bautizaron con lo primero que les pasó por la cabeza. Procedentes de Columbus (Ohio), es el suyo un sonido impredecible y sin refinar, un caótico barullo que se te sube a las barbas como uno de esos viejos borrachos que en los bares no dejan de dar la barrila pidiendo que les des cambio y que no te dejan en paz hasta que no les has dejado tiesos de una patada en los huevos.

Les han echado del escenario en más sitios de los que parece posible dada su corta existencia, pero ni todas las anécdotas de gira juntas valdrían media mierda si su música no fuese una bronca de esas que ponen el corazón a mil, el ruido más genial desde el disco de versiones de My Bloody Valentine que Comets On Fire jamás han grabado.

Vice: La decisión de formar el grupo fue un impulso. ¿Tenía alguno de vosotros experiencia previa en otras bandas?

Matt Horseshit (guitarra y voz):

En primer lugar, la historia esa de que montamos el grupo una noche de fiesta es totalmente cierta, pero había alrededor más hierba y nenas de lo que se ha contado por ahí. Pero qué va, nunca hemos estado en otros grupos. Ni siquiera sabíamos que los había. Pensábamos que sólo estábamos nosotros y Royal Trux.

¿En directo, tendéis a confundir improvisación con incompetencia?

Tenemos canciones, pero es difícil que las toquemos igual dos veces. No porque seamos súper-asombrosos y nos guste improvisar, sino porque somos tan malos que no podemos hacerlo.

¿De qué color sería una boñiga sicodélica?

Dependería de la droga que hubieses tomado y de si te estás fijando en ella o no. Si lo hicieras, cambiaría constantemente, como David Bowie. Si no, pues tampoco la verías. ¿Por qué debería alguien prestar atención a una plasta en el suelo? Dicho esto, añado que solemos tomar ácido para hacer nuestra mierda sicodélica, pero supongo que beber jarabe para la tos funcionaría igual de bien.

¿Qué te parecería que el “shitgaze” se convirtiera en un auténtico movimiento?

Ah, el shitgaze. Un movimiento que surgió de mi corazón, producto de mi obsesión enfermiza con My Bloody Valentine y de nuestros esfuerzos de mierda por hacer shoegazing. El shitgaze va a conquistar el planeta, ¿no lo sabías? El próximo disco de My Bloody Valentine estará barnizado con mierda, nadie volverá a mirarse la punta de los zapatos. Vamos a por vosotros.