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Cultură

Pasamos una mañana en una oficina de empleo

Gente sellando el paro, mesas vacías, salas de espera y dos ordenadores a los que llaman "punto de autogestión". Si lo que quieres es encontrar trabajo, quizá este no sea el lugar más adecuado.
Fotos por el autor

Faltan cinco minutos para las nueve de la mañana y la cola de desempleados que espera a que abra la Oficina de Empleo de Argüelles en Madrid ocupa la calle Evaristo San Miguel. Un hombre sale, levanta la persiana y vamos entrando para recoger ticket y esperar a que el marcador indique nuestro turno. No es una película de Ken Loach ni de Fernando León, pero se le parece mucho.

Malas caras, bostezos y movimientos de autómata en un lugar como mínimo poco acogedor. ¿A dónde hay que dirigirse? Un cartel nos lo aclara: "Planta Baja: Comunidad de Madrid. Oficina de empleo. Demandas, ofertas, formación, empleo". Mmm… a ver qué pasa en la de arriba: "Planta Primera. Ministerio de Empleo. SEPE (antiguo INEM) Prestaciones por desempleo (con cita previa)".

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Llamadme clásico, pero donde esté un antiguo INEM que se quite una Oficina de empleo. Subimos las escaleras.

Si las estancias tuvieran nombre, esta sala de espera se llamaría DESOLACIÓN. Hay consultas de urgencias más alegres que estas sillas de plástico mirando a una pared y una señal de "silencio".

Hablamos con Adir, de 37 años, que hace veinte días solicitó su cita. Se dedica a la exportación y no tiene ninguna esperanza de que le ayuden a encontrar un puesto de trabajo. "Me conformo con poder registrarme porque ya vine una vez y, como mi empresa no me había dado aún de alta, no pude hacerlo".

Parece que aquí se viene a fichar y poco más.

Sistema Nacional de Garantía juvenil. Invirtiendo en nuestro futuro

La máquina solo permite elegir entre A) Información prestaciones, B) Tramitación prestaciones y c) Gestiones varias. A nuestra derecha, una mesa de recepción vacía ("Seguridad No Pasar") y en lo alto una pantalla como las del anden de metro por la que solo corretea en bucle la web www.redtrabaja.es.

Los pósters informativos no ofrecen información útil ni lectura entretenida. "Sistema Nacional de Garantía juvenil. Invirtiendo en nuestro futuro". Y diez muchachos con camisetas posando sonrientes o, quizá, descojonados, por cornudos y apaleados.

Con un discurso de contención y crisis que ya aburre y todos los partidos políticos prometiendo creación de empleo, ¿cómo es posible que en este edificio hostil no haya siquiera una gestión integral de ofertas y demandas o que a veces haya que pasar de un servicio a otro (de planta baja a planta primera) para hacer la misma gestión? Se han dado casos de parados que comunican su situación al servicio autonómico pero son sancionados por no haber avisado también a los funcionarios del servicio estatal.

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¿No hay ningún despacho aquí en el que ayuden a encontrar trabajo a alguno de los casi cuatro millones de parados con mucha mala hostia y ganas de currar que hay en España? El conserje del portal contiguo (desde hace 18 años) dice que cree que "se hacen reuniones, probablemente charlas informativas o de orientación", pero al preguntar a la recepcionista el sueño se desvanece. Nos explica que "aquí no se hacen cursos, se hace todo fuera". Lucía, secretaria de 25, lleva en el paro desde que volvió de Francia hace dos años y asegura que jamás la han llamado para ofrecerle nada.

¿No hay ningún despacho aquí en el que ayuden a encontrar trabajo a alguno de los casi cuatro millones de parados?

Mohamed, de 38, confiesa que desde el año 2009 apenas suma algunos meses de vida laboral recogiendo fruta en el campo o como vigilante de seguridad. Solo viene a esta oficina "a firmar la hojita del paro". Y eso cuando se acuerda, porque en alguna ocasión se le ha pasado la fecha.

Su situación le agobia pero no cree que aquí se la vayan a arreglar, "como mucho me darán la ayuda para el Abono Transporte". Tampoco Borja, abogado de 37, desposita aquí esperanzas de ningún tipo. "Vengo solo para pedir el paro mientras preparo unas oposiciones".

Teniendo en cuenta que a la mesa con dos ordenadores y conexión a una intranet aburrida lo llaman "punto de autogestión", proponemos que en vez de oficina de empleo la bauticemos "oficina de trámites rápidos". O, como muchísimo, "oficina en la que ver en los tablones un par de ofertas tipo FP": formación en gestión de almacén, instalaciones eléctricas, diseño de tuberíaa industrial, conducción de vehículos de transporte de mercancías,,, también algo de fitness acuático e hidrocinesia o gestión de los procedimientos tributarios. I+d+i.