Colores, arquitectura y moda: el lente de Ward Roberts y Juan Camilo Estévez

Para nuestro número anual de foto nos pusimos en contacto con nueve fotógrafos y les preguntamos por algunos de los artistas que los habían inspirado a dedicarse al medio. Entonces también los buscamos a ellos con la consigna de publicar su obra en esta edición. Creemos que el trabajo que recibimos crea una conversación única sobre la línea de influencia entre los artistas jóvenes y los más experimentados. También se mantiene fiel a nuestro compromiso de mostrar nuevo talento y honrar a los maestros en el campo.

Uno de los fotógrafos emergentes de nuestro especial anual de fotografía "Derriba a tus ídolos" es Juan Camilo Estévez, un lente que le rinde tributo a la juventud, al color en series, a la diversidad. Sus fotos, como recortadas de una película adolescente, fueron inicialmente autorretratos que coqueteaban con el estilismo de moda, cuando descubrió la cámara digital de su padre.

Su sueño era en ese entonces entrar a Lookbook, la famosa plataforma de fotógrafos y blogueros de moda.

Inspirado por el arte contemporáneo, las series japonesas, las redes sociales y el cine adolescente de los años ochenta y noventa, Estévez se enfocó en inmortalizar las expresiones de belleza en su entorno y congelarlas en un momento casi cinemático.

El enfoque de su mirada tuvo un giro al conocer a su ídolo de este especial, Ward Roberts. Gracias a él, Estévez empezó a considerar la fotografía de arquitectura, convencido de que los espacios de nuestra cotidianidad guardan una belleza oculta, tal y cómo opina Roberts.

Los encuadres perfectamente compuestos y los colores brillantes de las paletas cromáticas de este ídolo le brindan al espacio captado un nuevo significado. Este análisis profundo fue inspiración para que Estévez saliera a recorrer las calles de su contexto local con una nueva mirada, enfocando su lente en las expresiones arquitectónicas de Bogotá, tan inspiradoras para él como dialogar con los individuos que las habitan.

Ver las fotografías de Ward Roberts es experimentar una y otra vez cómo una imagen se desdobla poco a poco frente a nuestros ojos: cómo germina y cómo florece. Con las canchas de basquetbol y tenis como objeto de su lente, Roberts logra que estos espacios pasen de ser familiares a desconocidos, llamativos, dignos de asombro.