Mi Hermana Mayor...

Afincada en Nueva Jersey, la banda Fast Times funcionó a mediados de los años 90, y tenía a mi hermana Alison como cantante. Cuando yo iba a la escuela elemental ella le contaba alguna trola a mamá y nos íbamos las dos a ver tocar a Fanshen, Life’s Halt, Rorschach y su propio grupo en una iglesia, en un parque donde se hacía skate o en el sótano de la casa de algún amigo a varios estados de distancia (asegurándose ella, eso sí, de que yo hacía los deberes y que llegaría al día siguiente puntual al colegio”.

Para mí, y para cualquiera que haya estado realmente metido en la escena, el hardcore era más que música. Era una forma de probar cosas nuevas y excitantes. DIY, PMA, pensamientos profundos, bailes salvajes colectivos, zambullidas desde el escenario, fanzines fotocopiados, una comunidad cohesionada más allá de lo imaginable… Si necesitabas algo en lo que apoyarte, el hardcore siempre estaba allí, el mejor amigo con el que tomar el almuerzo y escuchar sus palabras de ánimo cuando te sentías baja de moral (algo que sucedía muy a menudo).

Vice: ¿Recuerdas la letra de tu canción “Where Were You”? Decía: “¿Fue en ese concierto, cuando te tiraste por primera vez desde el escenario, cuando oíste cantar a Ian McKaye y ese desconocido entre el público te levantó del suelo, cuando te enamoraste del hardcore?”

Alison Mennor:

Ahora me hace sentir un poco incómoda. Le faltaba alma. De entre todo lo que escribí como Fast Ali, eso fue un error. Esa canción era una cursilería. Acabé odiando cantarla. Cuando monté Fast Times no tenía ni idea de los problemas de verdad. Todavía me encanta la vida pero en su conjunto, con todo lo que tiene que ofrecer, incluyendo el dolor y la lucha por salir adelante. El rollo positivo ha de conservar un equilibrio con el negativo. El dolor engendra alma y creatividad. Sin él, la existencia es agradable pero hueca. Nuestra música empezaba a ir por ahí… Y el grupo se disolvió.

Vale, de acuerdo. A los 12 años ví al Dr. Chud, de los Misfits, recogiéndote en una furgoneta de reparto de color púrpura. Una cita romántica. ¿Os besásteis con lengua?

¡Joder, vete a la mierda, hermanita!

¡Se lo diré a mamá!