Reflexiones de un peleador: La vida de Yodwicha en el muay thai

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Reflexiones de un peleador: La vida de Yodwicha en el muay thai

El joven campeón Yodwicha Kemmuaythaigym habla sobre las peleas callejeras en Isaan, sobre dejar la escuela cuando era adolescente, la diferencia entre pelear en el extranjero y Tailandia y un futuro ideal como granjero.

Fotografías por Matthew Yarbrough

[Yodwicha Kemmuaythaigym, antes conocido como Yodwicha Por Boonsit,_ _es un peleador de 19 años de la Provincia Nakhon Ratchasima (Khorat) en Tailandia. Es uno de los contendientes más prometedores en el muay thai en Tailandia, con varios campeonatos que incluyen Lumpinee, Omnoi, Tailandia y regional de Isaan. Actualmente pelea en eventos estelares en Tailandia y el extranjero, y entrena en Kem Muaythai Gym en las montañas Khao Yai].

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Niñez y entrenamiento a temprana edad

El tiempo más difícil que puedo recordar fue al principio de mi vida. Eramos muy pobres cuando era niño. Mis padres eran granjeros y transportaban papas para ganar dinero. Mi madre y padre tenían que embolsar papas y ponerlas en la camioneta por toneladas.

Pero mis padres eran buenos con el dinero e invirtieron en nuestra granja de puercos. De niño, competí mucho para ganar dinero para mi familia también.

Mi padre hizo que comenzara a entrenar en casa cuando tenía nueve años. Me mudé a Bangkok a los 14. Cuando llegué a la gran ciudad, fue mi primera vez en el gimnasio.

En Saengmorakot en Bangkok, muchos de los peleadores no podían seguir el paso con el entrenamiento pesado, pero soporté porque para mí, el entrenamiento no era nada comparado a lo que tuve que soportar de niño. Saengmorakot fue donde comencé a construir mi fama. Pero nunca firmé contrato con ellos.

Llegué a Kem Muaythai Gym el año pasado cuando inauguraron. Otro peleador aquí, Berneung Topkingboxing fue quien me dijo que fuera. Me gusta mi nuevo gimnasio pero es difícil ajustarme al entrenamiento aquí en las montañas porque hace mucho frío. Aunque por las tardes no hay problema.

Peleando en Tailandia

Mis ganancias son diferentes dependiendo donde peleo. Por ejemplo, peleo por más de cien mil bahts en Lumpinee, pero acepto bolsas más pequeñas en Channel 7 porque los apostadores dejan muchas propinas ahí. Es algo bien sabido. La bolsa no es menor a 50mil baht en Channel 7 y hasta de 100 mil, pero como peleo por propinas tengo que ganar. En cuanto a mis ganancias, el gimnasio me da la mitad. De mi parte, me quedo diez mil para mí y le doy el resto a mi familia.

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Me gusta pelear en Lumpinee. He peleado ahí muchas veces y conozco personas ahí, me parece cómodo. Además, me gusta Lumpinee porque las peleas son en la noche, y es cómodo para mí. Además, me gusta Lumpinee contrario a Channel 7 donde son a mediodía

Peleo cada 45 días, que es menos frecuente que otros peleadores, pero la administración del gimnasio siente que es lo mejor para mí. Puedo ganar suficiente dinero con esta agenda. Mi gimnasio me apoya para pelear en el extranjero y aquí en Tailandia, por eso puedo hacer ambas cosas.

Lo que no me gusta sobre las peleas en Tailandia es en gran parte los cortes de peso. Son cortes grandes y son frecuentes. Apenas tengo 19 años y sigo creciendo. En verdad quiero ganar peso para poder tener más peleas en el extranjero pero los cortes de peso me desgastan mucho.

Es más difícil encontrar oponentes para mí en Tailandia. No peleo mucho aquí porque en este momento, solo hay tres o cuatro personas a quienes podría enfrentar. Es una de las grandes razones por las que estoy tratando de pelear en el extranjero. Hay más oportunidades fuera de Tailandia. Nuevos oponentes, nuevos estilos, nuevas técnicas.

Pelear en el Extranjero

Me gusta pelear en el extranjero. He peleado en Francia un par un par de veces. Cuando peleas fuera de Tailandia no hay apuestas, ni presión de los apostadores. Con que des un buen espectáculo a la audiencia no le importará tanto si ganas o pierdas.

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Pero tienes que pelear diferente fuera de Tailandia. Mi entrenador Kem Sitsongpeenong está cambiando mi estilo para las peleas internacionales. Tengo dos estilos diferentes ahora: uno para las peleas aquí y otro para las peleas en el extranjero. El entrenamiento es exactamente el mismo físicamente, pero la preparación mental es diferente.

No tengo idea de qué esperar cuando enfrento peleadores extranjeros. Como en el primer round, no se si saldrán rápido o lento, no tengo idea del estilo con el que pelearán. Podrían comenzar lento como un tailandés, o salir alocados con las manos. Cuando peleo contra tailandeses sé que esperar. Conozco a mis oponentes. Pero a los extranjeros no es así.

Dejando la escuela

Dejé la escuela cuando tenía 11 o 12 porque sentí que el muay thai era más importante. Actualmente estoy estudiando para tener mi examen de equivalencia de preparatoria. Sigo contento de haber dejado la escuela porque en ese momento de tu vida como peleador, tienes que llegar a la cima. Lo hice para avanzar en mi carrera y llegar a donde estoy ahora. Era un peleador tan dedicado que nadie nunca dijo nada negativo, ni los maestros me dijeron que estaba cometiendo un error. De todos modos no era buen estudiante.

Mis padres también me apoyaron. Creo que están felices por las cosas ahora. Quieren que siga peleando y están orgullosos de que soy conocido.

Si no tuviera el muay thai, estaría batallando como cuando era niño. No habría manera de que mejorara mi situación, no habría manera de que viviera de manera diferente que mis padres.

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El Futuro

Ahora tengo familia. Mi esposa tiene 20 años; hemos estado juntos desde hace cuatro años. Está estudiando la universidad. Tenemos un hijo de tres meses. Él y mi esposa viven con mis padres en Isaan. Se que mi hijo crecerá viéndome pelear y si alguna vez quiere hacerlo, está bien. Depende de él. Soy peleador, sí, pero no quiero abrir un gimnasio en el futuro. Prefiero abrir un negocio pequeño en mi pueblo. Una granja de cerdos. Ríes pero es verdad. Mi familia ya tiene una y quiero mejorarla, invertir y hacerla mucho más grande.

También quiero ser soldado. Un soldado con una granja de cerdos. Soy soldado voluntario ahora, registrado en Chonburi. Peleo de manera voluntaria para el ejército. Hasta ahora tengo dos medallas. Esas peleas fueron amateur así que teníamos que usar careta. Fueron bien emparejadas y difíciles. Me sentí feliz de ganar esas medallas porque significa que hice un buen trabajo en el ejército.

Regresar a Isaan para pelear

He peleado solo una vez en Isaan desde que me mudé a Bangkok cuando tenía 14, tal vez diez veces en total. Pelear en Isaan es divertido porque es muy natural y parte de la cultura.

La manera en la que te tratan cuando ganas o pierdes es muy diferente en Bangkok y en Isaan. Cuando peleas en Isaan te acompañan tus familiares y tu esquina y los apostadores están felices contigo, ganes o pierdas. En Bangkok hay una diferencia muy drástica entre ganar y perder. Si pierdes en Bangkok te acusan de no entrenar de manera apropiada, te acusarán de muchas cosas. En Isaan saben tu historia. Si pierdes pero das una buena pelea los apostadores pueden conseguir una revancha y recuperar su dinero. Los apostadores en Isaan piensan como "Bueno, está bien porque recuperaré mi dinero". Pero si pierdes en Bangkok no vales nada para los apostadores y no les da miedo que lo sepas.

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Entonces sí, me gusta regresar para pelear. Pero cuando regresaba a Isaan, todos mis amigos iban por mí y me decían que los ayudara a pelear, en peleas callejeras. Siempre me pasa cuando regreso de Bangkok. Mis amigos llegan y me dicen que tienen problemas con una persona y me piden apoyo.

La razón por la que peleo es porque si no ayudo a mis amigos los tipos malos van por mí. Así que todos peleamos contra todos. Así es como funciona en Isaan. Nunca he peleado con cuchillos o algo más. Uso mi cabeza y no peleo si los oponentes tienen armas blancas. Si tienen cuchillos tienes que analizar la situación de nuevo.

Ya no me meto en peleas callejeras. Mis amigos saben que no deben buscarme para eso. Les dije que ya no lo haría. Ahora tengo un hijo y quiero que mi hijo tenga un padre.

Interpretación por Frances Watthanaya.