¿Cuánto cobran los que mandan en los puertos españoles?

Los españoles costeamos el sueldo público de 28 autoridades portuarias, más el salario del presidente de Puertos del Estado. Se llama José Llorca y cobró 108.327 euros brutos en 2015. Por otro lado, el colectivo de los estibadores en España lo forman unos 6.150 empleados. También sabemos que trabajan para empresas privadas dentro de un sector que no está liberalizado. Me pongo en contacto con Puertos del Estado y con la Coordinadora Estatal de Estibadores Portuarios (CEEP), que es el sindicato mayoritario de la estiba en territorio español, con delegados en la mayoría de los puertos de nuestro país. Los primeros reconocen que los sueldos públicos de los responsables de los puertos están bastante escondidos en la página web y no están en la sección de Transparencia, donde deberían estar. Ya sabes, información pública pero no visible. Es más, están a cinco clics y todavía no han actualizado los datos. Nos hemos de conformar con las retribuciones de 2015. A pesar de ello, un responsable del Departamento de Comunicación nos explica que están dispuestos a plantear mejoras en ese sentido.

Sí sabemos, por ejemplo, lo que cobró el presidente del Puerto de Barcelona en 2016, pero porque la web sí informa de ello, aunque no se sabe de todas las provincias. Silencio en la web del Puerto de Valencia. El máximo responsable del puerto de la Ciudad Condal, Sixte Cambra, percibió un salario de 132.559 euros brutos el año pasado. Exactamente, 81.651 euros de sueldo y 22.688 euros de variable. 14 pagas de casi 9.500 euros brutos. Echando un vistazo a las páginas webs de cada puerto te das cuenta de que no hay uniformidad en los datos. Cada ente es autónomo y publica lo que quiere. Como no me aclaro, pido a los sindicatos que nos aclaren el tema de los sueldos de los estibadores, porque ellos dicen una cosa y la patronal, otra. Para aportar más transparencia a este reportaje, contacto con el Departamento de Prensa de la Coordinadora Estatal de Estibadores Portuarios (CEEP). Solicitamos un par de copias de nóminas de estibadores, omitiendo los datos personales, claro. Me atienden amablemente, pero se niegan a facilitar esos documentos. Volvamos al mundo de los puertos españoles recordando que, durante la etapa del anterior presidente, Rafael Aznar, el Puerto de Valencia gastó 69.000 euros en cestas de Navidad. Eran tiempos de Rita Barberá y Francisco Camps y en Valencia se ataban los perros con longanizas. El escándalo se sumó al asunto judicial del propio Rafael Aznar, que se vio involucrado por cobrar sobresueldos. A finales de enero de este año, el Tribunal Supremo confirmó la decisión de la sección segunda de la Audiencia de Valencia de archivar la investigación sobre Rafael Aznar y dos exdirectivos porque "no hubo concertación para defraudar". Estamos hablando de 1.680 euros mensuales o 550 euros, según los casos. No hay delito. Tras la entrada del PSPV-PSOE y Compromís en el Gobierno de la Generalitat Valenciana, Rafael Aznar dejó la presidencia. Dese el 31 de julio de 2015 ocupa el cargo de presidente de la Autoridad Portuaria de Valencia Aurelio Martínez. Su sueldo exacto lo desconocemos. Sí tenemos constancia de que hace dos años el cargo estaba retribuido con 76.347 euros brutos y un variable de 20.286 euros. En total, 96.633 euros. Martínez cobraría la parte proporcional a cinco meses de trabajo y gran parte de una paga extra. Otro de los cargos que más cobra, según la tabla, es el de Bilbao: 76.347 euros brutos de sueldo y 21.699 euros de variable en 2015 y el de Algeciras, con el mismo fijo pero un variable algo inferior, 19.787 euros. Todos ellos superan los 78.000 euros brutos, pero hay diferencias evidentes. Recordemos, el presidente del Gobierno percibe 78.966 en 12 pagas anuales.

Si España no tuviera mar, este reportaje carecería de sentido. Pero no es el caso. Resulta que nuestra 'piel de toro' —y sus islas— es el país de la Unión Europea con mayor longitud de costa, unos 8.000 kilómetros. Además tenemos la segunda mayor flota pesquera del mundo, solo por detrás de la de Japón. Nuestra situación geográfica está próxima al eje de una de las mayores rutas marítimas más importantes del mundo y nos hemos consolidado como una gran plataforma logística en el sur de Europa. Actualmente, el Sistema Portuario español es de titularidad estatal. Es público y depende de la Administración General del Estado. Está formado por 46 puertos de interés general que están gestionados por 28 Autoridades Portuarias. Pero, ¿quién manda realmente?

La coordinación y control de la eficiencia corresponde al Organismo Público Puertos del Estado, ente que depende del Ministerio de Fomento, el ministro Íñigo de la Serna, que percibe un salario de 69.671 euros brutos anuales en 12 pagas. Eso son 5.805 euros al mes.

El buen funcionamiento de los puertos es vital para nuestra economía ya que por ellos pasan casi el 60% de las exportaciones y el 85% de las importaciones. Eso supone el 53% del comercio exterior español con la Unión Europea y el 96% con terceros países. Según Puertos del Estado, la actividad de los puertos españoles aporta cerca del 20% del PIB del sector del transporte, es decir, el 1,1% del PIB español. Eso son más de 11.000 millones de euros. El empleo directo que genera supera los 35.000 puestos de trabajo y 110.000 de forma indirecta. Para que te hagas una idea, las dos cifras equivalen a toda la población censada de las ciudades de Huelva o Salamanca. Otro dato. En el convenio colectivo de los empleados públicos de Puertos del Estado aparece, en un anexo de la página 63, una escala salarial de 2004 vigente hasta 2009.

El conflicto del colectivo de trabajadores de la estiba en los puertos de España ha puesto sobre la mesa unas 'anomalías' laborales que se arrastran desde hace décadas. Así, recientemente, el Gobierno, los empresarios y los sindicatos han hecho un amago de arreglar el asunto ante las presiones de Bruselas de imponer al reino de España un 'multazo' millonario que ya conoces. Los deberes son claros: liberalizar un sector que, a todas luces, choca con uno de los fundamentos básicos del Tratado de la Unión Europea: la libertad de empresa y la libertad de contratación. Con todo, el asunto es más complejo de lo que parece y seguro que en tu círculo de amistades, familia o vecinos, sobre todo en ciudades portuarias, el tema ha salido en una comida o almuerzo y las opiniones y argumentos han hecho saltar por los aires la armonía de la sobremesa.

Desde hace semanas, con una multa millonaria de la Unión Europea en el cogote del Consejo de Ministros -que pagan los contribuyentes-, y un decreto ley que tiene que convalidarse en el Congreso de los Diputados, los protagonistas han hecho el esfuerzo de sentarse en la mesa de negociación.

La bola de nieve y multas empezó el 11 de diciembre de 2014, cuando España fue condenada a pagar 27.522 euros diarios por no reformar/liberalizar el sector de la estiba. Es decir, las empresas deberían tener libertad para contratar al personal que deseen, no el que les dicte la Sociedad Anónima de Gestión de Estibadores Portuarios (SAGEP), que es la que tiene, hoy por hoy, el monopolio de la contratación.

Actualmente la multa asciende a 22,8 millones de euros, pero la cifra puede aumentar. Eso sí, España no está obligada a desembolsar ese dinero hasta que no haya una nueva sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea que le condene por el doble incumplimiento (saltarse la ley y luego por no corregir la irregularidad). Estamos pues, en unos meses de espera y el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, se ha apresurado a meter más miedo diciendo que el nuevo fallo del Tribunal podría hacer aumentar la multa a 134.107 euros diarios.

Según los sindicatos, el sueldo medio de un estibador oscila entre los 30.000 y 40.000 euros brutos anuales. Los empresarios del sector y la patronal dicen que estas cifras no son ciertas y afirman que la retribución media es de unos 70.000 euros, lo que haría que fuesen más que las de un ministro. Incluso reconocen retribuciones anuales de más de 100.000 euros, dependiendo de la carga de trabajo.

Por un lado tenemos un sector privado, con empleados y empresas privadas, pero sin libre competencia según la Unión Europea, que se tiene que sentar a negociar las nuevas condiciones laborales a través de los representantes sindicales con los empresarios y los hombres propuestos por el Gobierno para desatascar una situación bajo la presión de la Comisión Europea. Los estibadores no quieren perder las prestaciones laborales que tienen y las empresas quieren libertad para contratar y reclaman menos plantilla, menos salarios y más horas de trabajo. Y en medio, el Estado, que ha permitido esta anomalía durante décadas (el asunto viene del la época de Franco) con diferente inquilino en La Moncloa sin mover un dedo. Hasta ahora, que viene el lobo en forma de multa millonaria.

La Asociación Nacional de Empresas Estibadoras y Consignatarias de Buques (ANESCO), es decir, la patronal, plantea una rebaja salarial del 30 por ciento, menos estibadores y que hagan más horas. Los sueldos se quedarían en 49.000 euros y supondría pasar de 14 pagas de 5.000 euros brutos anuales a 3.500 euros.

Es evidente que hablamos de un colectivo muy reducido que goza de buenos sueldos y cuyos niveles de vida y de capacidad de consumo son muy superiores a la media española. Eso sí, los sindicatos insisten en que no todos cobran las cantidades que se han dicho. La verdad es que nadie hasta ahora se ha atrevido a mostrar una nómina. Saldríamos de dudas.

Y ahora te preguntarás. ¿Qué es un estibador? ¿Qué trabajo hace para cobrar ese dineral si es un trabajo que no requiere una titulación universitaria? Con años de experiencia o una formación profesional puedes obtener una capacitación para trabajar. El diccionario de la Real Academia Española define "estibador" como "aquel trabajador que se ocupa en la carga y descarga de un buque u otro medio de transporte y distribuye convenientemente los pesos en él". Incluye una segunda acepción: obrero que aprieta o recalca materiales o cosas sueltas. Otros te dirán que es alguien que maneja una grúa. Y si consultas a los que manejan grúas en la construcción, te dirán que no cobran tanto.

Recientemente, los estibadores han concedido hasta un seis por ciento de rebaja en su sueldo pero manteniendo hasta tres veces el Salario Mínimo Interprofesional cuando se jubilen. Actualmente está en 707,60 euros al mes, por lo que tendrían una pensión de 2.122 euros. Y en diciembre y enero, con la paga extra, el doble. Es decir, más de 4.200 euros. La pensión máxima que se cobra en España es de 2.573 euros brutos mensuales en 2017. Dependiendo de las retenciones, puede quedarse en 2.100 euros netos. Los estibadores están exigiendo cobrar, prácticamente la máxima, independientemente de sus cotizaciones reales.