Dejando aparte los irritantes controles de mi documento de identidad y haber recibido en una ocasión una falsa acusación de esconder inmigrantes ilegales, no he tenido muchos encontronazos con la policía española. No es el caso de los protagonistas del documental que acabamos de terminar: REVOLUCIONARIOS A LA FUERZA.Como probablemente ya sabréis, España lleva 4 años muy jodida a causa de la recesión económica. Las razones por las que nos está llegando la mierda al cuello son muchas. La caída del turismo, la corrupción en el estamento policial, la endémica mala gestión del gasto público… Todo eso ha contribuido, pero la gran culpa de todo la tienen los bancos, que inflaron el mercado inmobiliario concediendo préstamos de forma irresponsable tanto a las compañías constructoras como a todas esas personas deseosas de participar del sueño comprando su primera casa. Ya sabemos qué consecuencias está teniendo esto.Cuando el movimiento de los Indignados arrancó en marzo del año pasado, lo que más nos llamó la atención fue su apoyo a las familias que habían sido expulsadas de sus casas por no poder hacer frente a sus hipotecas y, además, en función de la malsana y perversa forma en que está estipulada la legislación española, quedaban atrapadas de por vida con una deuda abrumadora. En España los bancos no sólo se quedan con la propiedad, también pueden reclamar a las familias el importe total no satisfecho. Esto, evidentemente, es durísimo para la clase trabajadora y las familias inmigrantes, que irónicamente eran a menudo, antes de que todo se fuera al carajo, quienes solían ser empleados en el sector de la construcción. Con los juzgados declarándose incompetentes y los servicios sociales afrontando recortes, tuvieron que ser las familias y un grupo de punks con conciencia social quienes buscaran por su cuenta una solución.En octubre supimos de un edificio en el distrito de Nou Barris de Barcelona que había sido ocupado por un grupo de activistas cabreados con el Gobierno. Lo que esta ocupación tenía de novedoso era la declaración pública de que el edificio sería acondicionado para alojar a 11 familias sin hogar por haber sido deshauciadas. Aquella era una magnífica historia a lo Robin Hood, así que nos pusimos en contacto con ellos.El programa que estrenaremos el próximo lunes 2 de abril sigue el día a día de estos activistas buscando alimentos en contenedores, manifestándose por el cierre del servicio de urgencias y instruyéndonos en el arte de sortear obstáculos tan molestos como las cerraduras de un edificio que no te pertenece. Podéis ver el trailer aquí.PAUL GEDDIS