‘Karmesí’, el cómic que predijo la violencia en Juárez

En 2006 al colectivo 656 Cómics le vino una idea para su próximo personaje: un ex agente de la policía en Ciudad Juárez que, harto de la violencia, decide convertirse en vigilante para torturar y matar a los delincuentes. Pero lo que ellos no sabían es que ese cómic sería una predicción.

El colectivo, formado por un promotor cultural, un plomero, un profesor de primaria y un lava coches, comenzó a dibujar a Ciudad Juárez en medio de soldados mexicanos, cuerpos colgados en puentes y un antihéroe que busca la justicia mediante la violencia.

El primer boceto que dibujaron fue a finales de 2006. Era de un convoy de Hummers del ejército mexicano entrando a la ciudad en medio de una tolvanera. Dos meses después, el viernes 28 de marzo de 2008, su dibujo se convirtió en realidad y entraron a Ciudad Juárez decenas de tanquetas militares a través de los polvorientos aires de marzo.

En 2007 el personaje del cómic les cuadró finalmente y nació Karmesí, un violento ex policía que decide “arreglar las cosas” en Ciudad Juárez de la única manera en que sabe hacerlo: con violencia.

Karmesí, como se autonombró el antihéroe por esa viva tonalidad de la sangre fresca, se publicó justo antes de que comenzara la guerra contra el narcotráfico, iniciada por Felipe Calderón. Y entonces otra alarmante coincidencia: en 2010 organizaciones no gubernamentales en México comenzaron a hablar de “escuadrones de la muerte” operando en aquella urbe. Vigilantes anónimos que asesinaban sicarios, secuestradores y extorsionadores. Karmesí, como la creación del Doctor Frankenstein, tomó vida.

Los fundadores de 656 Cómics escondieron todos los números que se habían impreso y vendieron unos pocos en El Paso, Texas. Hasta ahora, lo que queda de ese cómic satanizado está guardado en cajas en el sótano oscuro de Oliver Lee Arce, el dibujante. Pero el recuerdo vivo lo tiene su hermano Francisco, el escritor de Karmesí, y con quien platiqué para preguntar más sobre su trabajo.

VICE: ¿Por qué crear personajes como Karmesí?
Francisco Lee Arce: No hay una intención en nosotros de crear personajes como Karmesí, pero se van creando solos con características extremas de contextos como la guerra del narco, que nos tocó vivir.

¿Quién es realmente Karmesí?
Es una respuesta violenta al sistema corrupto de Juárez. Es un hombre que se tuvo que ensuciar las manos e involucrarse en el gobierno para luego, cerca del final, limpiar lo que él mismo ensució. Aunque no puede limpiar toda la ciudad, trata de “arreglar” lo que está en sus manos con pura violencia.

¿Y qué temas le importan a este ex policía?
La pedofilia, el narcotráfico, la trata de blancas. El contexto actual de Ciudad Juárez.

¿Dónde está Karmesí ahora?
A Karmesí decidimos esconderlo. Vendimos pocos ejemplares en Estados Unidos y luego lo guardamos porque Juárez está muy caliente y no queremos sustos.

¿Sustos?
Sí. En este cómic estábamos vaticinando lo que iba a pasar en la ciudad, estaba pasando lo que escribíamos y eran cosas muy fuertes.

¿Cómo es diferente Karmesí a otros vigilantes?
La identidad mexicana y sobre todo la fronteriza, le da ese toque diferente. Además no es ningún millonario que tiene armas sofisticadas y que pagó por su entrenamiento. Karmesí no fue a ninguna guerra, no le mataron a su familia, simplemente estamos hablando de un tipo harto de la sociedad y fastidiado de ser parte de la corrupción. En Ciudad Juárez no existe un Capitán América, aquí hay que sobrevivir.

¿Cómo nació 656 Cómics?
Nos formamos hace 12 años adaptando las habilidades de cada uno. Hay quienes sabemos escribir los guiones y hay quienes saben dibujar, pero además de eso uno de nosotros es promotor cultural, otro plomero, otro profe de primaria y el otro lava autos en un estacionamiento público. Y nuestro nombre 656 es por la lada para llamar a Ciudad Juárez.

¿Qué quieren hacer ahora con el colectivo?
Básicamente vivir de esto. Ya no queremos lavar coches ni reparar tuberías, pero está muy cabrón vivir de dibujar monitos.

Aunque casi todos los números de Karmesí están escondidos bajo tierra, Francisco me confesó que cabe la posibilidad de que en esta liga exista uno o dos ejemplares aún a la venta.

Facebook: Luis Chaparro

Twitter: @LuisKuryaki

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