FYI.

This story is over 5 years old.

Cultură

Las gemelas de París

Monette y Mady hacen absolutamente todo juntas.

La primera vez que vi a Monette y Mady, paseaban tranquilamente por el distrito once de París, donde yo vivía. Las gemelas idénticas siempre llaman la atención, pero estas damas eran espejos andantes. Su uniformidad era asombrosa.

Durante los siguientes meses, y luego años, me las seguía encontrando. Siempre estaban vestidas exactamente igual, con trajes siempre nuevos, costosos y de buen gusto. Cada que las veía parecía que iban tarde a una función o a una reunión importante, sus gestos apresurados y su lenguaje corporal siempre estaban en perfecta sincronía.

Publicidad

Siempre quise hablar con las gemelas, descubrir qué pasaba en sus vidas, pero nunca se presentaba una buena oportunidad. Años después de mi primer encuentro, un domingo cualquiera, me las encontré en el mercado y les pedí que me dejaran tomarles una foto. Aceptaron casi de inmediato.

Pronto descubrí que Monette y Mady estaban muy familiarizadas con el modelaje y la actuación. Han aparecido en películas fracesas como Amélie y Paris, je t’aime, como bailarinas en un video de George Michael, y posado para numerosos comerciales y proyectos de arte.

Entre más hablaba con ellas, más quería saber sobre su simbiosis. Descubrí que han vivido juntas toda su vida, nunca se han casado ni tenido hijos, se refieren a ellas como “yo” en lugar de “nosotras”, se completan las frases con tanta fluidez que parece que, quien habla, es una sola persona. También tienen la misma rutina diaria, que incluye comer los mismos platillos y en las mismas cantidades.

Después de conocernos un poco mejor, les pregunté si podría documentar su vida diaria indefinidamente. Al principio no entendían por qué alguien querría hacer eso, pero eventualmente aceptaron.

VICE: ¿Siempre se han vestido igual?

Monette: Cuando éramos pequeñas, nuestra madre nos vestía diferente para que fuera más fácil reconocernos. Después, cuando empezamos a vestirnos igual, no
le pareció.

Mady: Siempre nos daba regalos diferetes y nos trataba como individuos separados.

Publicidad

Monette: ¡Pero usar la misma ropa es divertido! Nos divierte ver cómo reacciona la gente en la calle; voltean y nos miran raro…

Mady: …porque a nuestra edad todavía nos vestimos igual. La originalidad podrá ser importante para las personas singulares, pero no lo es para nosotras.

¿A qué te refieres con “personas singulares”?

Mady: Las personas singulares son aquellas que no tienen gemelos. Lo que quiero decir es, por ejemplo, si una persona singular ve a dos personas vestidas igual, se sorprende.

Monette: No somos personas singulares, para nosotras estar vestidas igual es parte de nuestra personalidad. Habría un desequilibrio si una de nosotros se vistiera casual y la otra se arreglara y se pusiera tacones.

Mady: Sería como ponerse toda esa ropa al mismo tiempo. ¡Creamos un balance entre las dos; no podemos hacer eso!

¿Les molesta que las personas se les queden viendo?

Mady: ¡Nosotras también nos reímos de ellos!

Monette: Una vez, tres chicos como de veinte años pasaron junto a nosotras en la calle, todos vestidos con jeans y chamarras similares. Hicieron un comentario ridículo sobre cómo estábamos vestidas iguales.

Mady: Los alcanzamos y les dijimos: “Al menos estamos conscientes de ello”.

Monette: Mucha gente no se da cuenta, pero hoy en día todos se ven muy parecidos.

¿Alguna de ustedes ha tenido novio?

Mady: Esto es muy difícil de explicar; una gemela
siempre será una gemela aunque se case. Siempre estará
ligada a su otra mitad. Llevas a tu gemela contigo todo
el tiempo.

Publicidad

Monette: Sabíamos, y lo digo con modestia, todo lo que implica tener una pareja mucho antes que cualquier persona singular de nuestra edad. Encontrar un alma gemela es increíblemente difícil para una persona singular, puede que no la encuentre en toda su vida.

¿Quieres decir que comparten relaciones románticas?

Monette: ¿Qué quieres decir?

Permíteme reformular esa pregunta: ¿Alguien se ha enamorado de las dos? 

Mady: [Risas] ¡Tendrías que preguntárselo a ellos!

¿Se han enamorado de la misma persona?

Monette: ¡Oh, ahora estás haciendo preguntas que no vamos a contestar!

Una vez me dijeron que la gente a su alrededor es supersticiosa, que les llevan regalos.

Mady: ¡Sí! Para una comunidad africana, los gemelos son un elemento que perturba su equilibrio, así que nos regalan una moneda para protegerse. También piden deseos.

Monette: Esa es su costumbre y si nos negamos, nos dicen: “¡No, no, debo darte algo!”

Mady: Hace como un año, cuando estábamos esperando el camión, una joven africana pasó frente a nosotros. Sonrió y nos saludó, después se regresó y nos dijo: “¿Les puedo regalar una moneda?” Le preguntamos por qué y nos explicó.

Monette: Así que ahora aceptamos sus regalos por respeto.

¿Pasan algún tiempo separadas?

Monette: Hacemos la mayoría de las cosas juntas, pero pasa. Por ejemplo, una va a la tienda mientras la otra lava la ropa.

Mady: No tenemos una necesidad de separarnos, es algo que las personas singulares no pueden entender. Cuando salimos a hacer cosas por separado nos mantenemos en contacto por teléfono.

Monette: Las personas nos dicen que somos afortunadas porque podemos ser más eficientes, se podría decir que podemos estar en dos lugares al mismo tiempo.