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Viernes de Manga: Tank Tankuro (1934)

A Osamu Tezuka, el creador de Astro Boy y muchos otros mangas clásicos, se le conoce como el papá del manga en Japón. Pero antes de Tezuka el manga ya existía, y Tank Tankuro de Gajo Sakamoto era uno de los má...

A Osamu Tezuka, el creador de Astro Boy y muchos otros mangas clásicos, se le conoce como el papá del manga en Japón. Pero antes de Tezuka el manga ya existía, y Tank Tankuro de Gajo Sakamoto era uno de los más populares entre los niños japoneses. Para los japoneses parece que hubo como un borrón y cuenta nueva después de su vergonzosa participación en la Segunda Guerra Mundial, y entre las cosas que quedaron olvidadas fueron los mangas anteriores a esta época, como Tank Tankuro o Norakuro.

Tank Tankuro es un hombre tanque, que parece entre un Buda y una bola. El estilo del dibujo es suelto y divertido, es obvio que era una obra dirigida principalmente para niños, pero no por eso es algo bobo o simplón. Al contrario, el mundo de Tankuro es muy diverso, con una variedad de personajes y enemigos de una imaginación admirable. El mismo Tankuro es un personaje multifuncional: puede convertirse en un avión o un submarino, y sacar una infinidad absurda de armas de sus entrañas. El estilo de Sakamoto es muy particular, y creo que es evidente que fue una pieza clave en el desarrollo del estilo característico del manga que conocemos ahora, en personajes como Doraemon o el mismo Astro Boy.

Me parece una decisión muy acertada de la editorial japonesa PressPop publicar en el 2011 esta primera colección en inglés de un cómic tan interesante, tanto estéticamente como una pieza histórica; sin embargo creo que el diseño de la portada no le hace justicia al interior. El diseño corrió a cargo de Chris Ware, y me parece que justamente, parece más una portada de uno de sus cómics de una portada de Tank Tankuro. Pero bueno, tampoco es despreciable su esfuerzo y entiendo que tal vez también la decisión de utilizar esta portada haya sido modernizar un poco el trabajo de Sakamoto y hacerlo más atractivo para los lectores contemporáneos. A mi parecer, Tank Tankuro trasciende épocas, permaneciendo como un cómic extraño, hermoso y original.