¿Es posible presenciar la aparición de un ser de otros planos en una sola pieza magnífica de res? En algún momento u otro, todos nos hemos encontrado con una mancha de grasa que se parezca a Elba Esther Gordillo o la cáscara de un cacahuate que nos recuerda a Donald Trump, pero ¿qué hay con eso que es tan innegablemente espeluznante que solo puede explicarse como la encarnación del mal mismo?

No, no estamos hablando de alguna mierda metafórica, como sentir la presencia de Dios después de comer un taco al pastor a las 2 de la mañana; estamos hablando de una señal de fuego y azufre, pero encarnada en tu bistec frito. ¡Y seguro que es glorioso!

Así ocurrió todo: un tipo con suerte en el estado mexicano de Baja California Sur recurrió a Internet para mostrar su filete Rib Eye en el que, según él, el marmoleado formó una imagen del Diablo –sí, Lucifer, Belzebú y Mefistófeles–. Ese tipo.

El sito web de noticias local El Metichón se dio cuenta del impío bistec y lo publicó en Facebook el miércoles pasado. En la publicación, El Metichón informa que el bistec fue vendido por la empresa SuKarne, el productor de carne más grande de México, y pregunta a los lectores qué piensan de él: "Hemos recibido esta imagen, donde el Diablo aparece en una chuleta de SuKarne. ¿Usted qué opina?"

No se sabe si el bistec fue consumido o no, o si dicho acto podría considerarse blasfemo (o lo opuesto a ello), pero parece claro que el Príncipe de las Tinieblas probablemente tuvo qué ver en la creación de este bistec.

Ahora, si tan sólo pudiésemos encontrar un poco de seitán que se parezca a Satán, tendríamos todo cubierto.

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