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Ricardo Ferretti y su 2015: el mejor año en la carrera del 'Tuca'

¿El mejor DT de la historia? El legado del 'Tuca' lo pone en el selecto grupo donde está Ignacio Tréllez, Raúl Cárdenas, José Antonio Roca o Javier de la Torre.
Foto: Imago7

Pasara lo que pasara en la final, el premio sería para él. 2015 será el año más importante dentro de la carrera de Ricardo Ferretti, para un servidor, el mejor entrenador en la historia del futbol mexicano.

Hay técnicos que marcan épocas, que hacen escuela, que generan simpatia y cariño entre los suyos y los no tan suyos. Personajes que se hacen necesarios y que son inolvidables. El 'Tuca' es parte intrínseca de México y es imposible contar la historia de esta liga sin las imágenes de Ferretti gruñendo desde un banquillo.

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Todo comenzó con una final de Copa Libertadores, continuó con un exitoso 'bomberazo' en la selección nacional mexicana y culmina con su cuarta corona como director técnico. Pero yendo más a fondo, inició por una pasión que continuó tras ser campeón como jugador, el afán de enseñar su visión del mundo de la pelota, su amor por el trabajo y el estudio y finalmente, la sapiencia de conducirse correctamente y decir las cosas que piensa en un camino lleno de espinas y que puede generar traiciones.

Foto: Imago7

Ricardo Ferretti solo podría estar fuera de un banquillo como técnico por tres razones: por una enfemedad que afortunadamente no ha tenido, por una expulsión o por ceder su trabajo como pasó con el Tri. De otra manera, desde hace casi 25 años cuando se retiró como futbolista, ha trabajado día tras día con un equipo, siempre haciéndolos cuadros regulares y protagonistas. Es impensable vivir una jornada de la Liga sin el querido 'Tuca'.

A muchos el estilo de Ricardo Ferretti no les gusta. A su edad, es imposible cambiarlo. Siempre será un entrenador con un estilo defensivo, precavido o equilibrado. Sus equipos dificlmente meterán cuatro goles por jornada y preferirá trabajar con jugadores más consagrados que con novatos o jovencitos. Aún así, hoy por hoy su visión es única en México.

El día de ayer en el Olímpico de C.U. vimos todos los rostros de Ricardo Ferretti. Los malos y los buenos. Un tipo que sabe que no tiene la verdad absoluta y que es capaz de pedir mediante unos auriculares la ayuda de sus auxiliares técnicos; el hombre que se equivoca en un planteamiento medroso y defensivo en su afán por cuidar un resultado; el tipo inteligente que lee un partido y que es capaz de modificarlo. El hombre que grita, que escupe y que se enoja en contra de sus futbolistas de una manera airada y explosiva; la persona que sonríe con un gol, que abraza y que se deja cargar por uno de los futbolistas que más relegó en la temporada,el tipo que antes de celebrar un título en penales va a darle un abrazo y una felicitación a su homólogo rival y finalmente, el ser humano que prefiere estar atrás de las cámaras y los micrófonos dándoles toda la gloria a sus jugadores. Todo eso, en 90 minutos.

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Ricardo Ferretti enseñó en este 2015 que es un viejo lobo de mar. La conducción de Tigres en la Copa Libertadores fue prácticamente perfecta. Solo queda esa duda por la forma en la que los regiomontanos pierden la final contra River Plate. Después, tras esa inestabilidad que hubo en el Tri con la abrupta salida de Miguel Herrera, entendió que dados los años que llevaba en México, era necesaria su ayuda para que la selección afrontara un reto mayúsculo como jugar contra Estados Unidos para ir a la Copa Confederaciones. En ese inter, leyó que su estancia y relación con la FMF tenía que ser breve y concisa, una relación que diera beneficios a corto plazo y que no acabara con un rompimiento similar al de otros técnicos que han sufrido más que gozado ese lugar. El 'Tuca' hizo lo que tenía que hacer en esos 90 minutos dándole un baño de táctica a Jürgen Klinsmann, un hombre que ha dirigido a la selección de Alemania o al Bayern München. Poca cosa no era.

Cuando se fue del Tri, lo hizo por la puerta grande, ganándose el reconocimiento de todo el futbol mexicano y dejando estabilidad y calma a su sucesor. Todos sabíamos que si se quedaba, cometería el más grande error de su carrera. La vida de Ricardo Ferretti está en la Liga, hoy en sus Tigres y mañana quien requiera de su trabajo. No en una selección nacional donde tenga que ser un tipo de poses, de calendarios comerciales o donde tenga que ser el papá de las vedettes.

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Con esa cachetada de orgullo, guante blanco y agradecimiento, volvió a Tigres para hacer campeón al equipo por segunda ocasión, cuarta tanto para los regios como para el propio 'Tuca'. Su leyenda cada día es más grande y es más importante, no solo en la institución sino fuera de ella.

Y más allá de toda esa parafernalia que conlleva ser el 'Tuca', de toda esa imagen que se le ha generado a su alrededor, está la de un tipo noble y bueno, divertido y elocuente. Una conferencia de prensa de Ferretti nunca será un desperdicio porque siempre tiene un punto de vista propio que enseña y que deja algo. Por más gritos que dé, los jugadores y la gente en general, lo respetan, le quieren y le reconocen.

Su nombre debe estar con figuras como Ignacio Tréllez, José Antonio Roca, Raúl Cárdenas o Javier de la Torre. Y de técnicos actuales como Manuel Lapuente, Ricardo Lavolpe, Enrique Meza o Víctor Manuel Vucetich. Unos más abajo que otros, y otros como el Tuca' más arriba de lo esperado en esa piramide de importancia.

Por eso y más, Ricardo Ferretti es el personaje deportivo en México durante 2015. Nos dio buen futbol, títulos, logros, reconocimientos internacionales, videos monumentales y sobre todo, el meme del año: Grrrrrrr.