Lo que le hará falta a los Warriors sin Andrew Bogut

Se siente mal escribir esto. Después de todo, imaginen lo doloroso que debe ser que J.R. Smith se lance hacia tu rodilla mientras estás en el aire y no te puedes defender. Cualquiera que sea tu impresión sobre Andrew Bogut, el hombre más atlético de los Golden State Warriors y uno de los defensores más condecorados (y abusones) de la NBA, la lesión en la rodilla que sufrió en el quinto juego fue horrenda. Pero hablar sobre eso no es la parte que se siente mal. La parte mala es ésta: en la serie, el haber perdido a Bogus puede significar una ventaja para Golden State.

Los hematomas óseos dejarán a Bogut en la banca durante el resto de las Finales. Y debido al camino que estaban tomando, Bogut probablemente iba a pasar mucho tiempo en la banca de cualquier manera. Tiene un promedio de 3.2 puntos (en un porcentaje de tiros del 47.1) y 3.0 rebotes por juego, y a pesar de las habilidades de Bogut, los Warriors han sido superados por 25 puntos con él en la cancha.

Bogut importa en maneras que detallaremos más adelante, pero relativamente a la cantidad de fenómenos destinados al Salón de la Fama con los que comparte la lista de jugadores, el australiano contribuye en las sombras

Golden State mostró la mejor versión de sí mismos durante las Finales de la NBA del año pasado cuando reemplazaron a Bogut con Andre Igoudala. Esa alineación maduró hasta convertirse en una fuerza enorme —la alineación de la muerte— haciendo uso de la incansable versatilidad de Draymond Green para atropellar cualquier cosa que se ponga en su camino.

Pivote de nombre únicamente, Green lanza triples, hace fintas y bloquea a jugadores más altos que tratan de enseñarle una lección. El suyo es un basquetbol futurista y ningún equipo ha averiguado cómo detenerlo.

Bogut no puede hacer eso, cosa que tiene en común con cualquier otro centro en la liga. Cuando los Warriors juegan siendo pequeños en esta serie no hay nadie para que los Cavs de Cleveland ataquen. Pero cuando los Warriors son grandes, a los Cavs les encanta usar a Bogut para bloquear a Kyrie Irving o LeBron James, sabiendo bien que no se aventurará a bloquear a un saltador. Cuando Bogut se aleja demasiado, los Cavs lo tienen justo donde quieren.

Los Cavaliers atacan a Bogut de esta manera en cada oportunidad que se les presenta, hasta que Steve Kerr encuentra un sustituto. Según NBAWowy, en 83 minutos Golden State ha usado a Green en el centro en estas finales y han logrado 127 puntos por cada 100 veces en las que han tenido el balón.

Por contraste, en los 60 minutos de acción de Bogut, la ofensiva de loas Warriors ha sido terrible; no ha sido mejor ya sea que esté en el suelo o lejos. Mantengamos en mente que estamos hablando de un tamaño muy diferente, y uno que se compara exclusivamente con la alineación inicial de Cleveland. También define lo bien que Golden State ha jugado todo el año con Bogut en la cancha. Los Warriors resentirán su lesión.

Contra los Cavaliers que han logrado un 30.8 por ciento de sus tiros en las Finales —que podría colocarlos en el segundo lugar en NBA durante la temporada regular— los Warriors no pueden darse el lujo de jugar así durante 48 minutos. Kerr lo sabe, y es en parte debido a que no quitó a Bogut de la alineación inicial después de su derrota en el tercer juego.

La tasa de rebotes de la ofensiva de Cleveland es del 32.5 por ciento con Bogut en la banca y 22.9 cuando está en la cancha —el equivalente a la caída que sufrieron del primer lugar al 23 en el ranking de la temporada regular. En lugar de depender de unidades pequeñas, cambiando constantemente y jugando con ritmo rápido, Kerr ha trabajado con grupos tradicionales que permiten que las unidades pequeñas prosperen como opciones para realizar cambios. Hay algunos riesgos pero podemos apostar por el balance, particularmente con alguien tan habilidoso como Bogut en la alineación. Bogut hace un buen trabajo al mantener a tipos como Tristan Thompson a raya. La defensiva de Cleveland en estas playoffs es del 78.6 por ciento, un número digno del top cinco tanto en la temporada regular como en playoffs. Con Bogut en la cancha, ese número cae al 70.7 por ciento, 1.9 por ciento más bajo que los Rockets de Houston que están en el lugar 30 del ranking.

A menos de que Kerr esté dispuesto a colocar a Green en el centro durante 48 minutos, Golden State enfrenta una decisión complicada. El efecto dominó es real cuando cae una de las piezas principales. Aquí están las opciones de Kerr para el sexto juego (y el séptimo, en caso de que se necesite): Anderson Varejao, James Michael McAdoo, Marreese Speights, y Festus Ezeli.

Podrán notar que las opciones no son buenas. Comparados con Bogut, ninguno de ellos puede proteger el aro, hacer fintas y bloquear mientras ejecuta de manera intuitiva la defensiva de Golden State. Bogut conoce su rol y le da a la defensiva del oponente algo más de qué preocuparse. Pocos hombres son rivales para su conciencia y visión:

Su ausencia le da más presión a Golden State y levanta dudas que Kerr y su equipo preferirían no responder. ¿Qué tanto se extrañará la protección de Bogut contra un equipo que atacará lo más que pueda, sabiendo que enfrentan una defensa frágil?

Cuando se cuente la historia de ésta era de los Warriors, Bogut podría (injustamente) terminar como una idea adicional. El que era la opción número uno no es universalmente reconocido como uno de los jugadores más importantes de su equipo, y es mucho menos divertido de ver que sus colegas. Pero es un jugador perfecto para los Warriors, una pared de intimidación que libera a los tiradores y les da lo necesario para lograr puntos. Es un guardaespaldas que le permite a Golden State plantar su bandera en las áreas más valiosas de la cancha.

Los Warriors deberían de cualquiera manera ser favoritos para ganar la serie. Son mejores que Cleveland con Green en el centro , pero ¿cuán sustentable será su éxito ahora que no tienen a su opción número uno para contraatacar? Los Warriors deberán esperar encontrar a la respuesta.

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