Ver a Dios de cerca por 7000 euros: Los balcones más caros de la Semana Santa de Andalucía

Cuando llegan estas fechas tan señaladas son muchos los españoles que deciden peregrinar a ciudades como Málaga, Sevilla o Córdoba para disfrutar de las míticas procesiones de Semana Santa. Algunos lo hacen descalzos, otros penitentes se enfundan en capillos o capirotes para mostrar su humildad y hay quienes les apetece hacer fuerza durante tres días para no ir al gimnasio en todo el año y tener agujetas de por vida. Secciones de mazas, bocinas y báculos circulan a ritmo de redoble ante los miles de nazarenos. Desde luego soy muy fan de aquellos que lo ven pasar todo desde un palco en forma de balcón. Son los más inteligentes de todos: las mejores vistas con la mejor compañía. Pero hay gente con más luces que estos.

Me refiero precisamente a la gente que decide sacar un sobresueldo a costa de su pequeña porción de tierra en medio del cielo. Sevilla, por ejemplo, es la la ciudad que alberga el barrio más pobre de España, pero seguramente es también la que tiene el precio más alto de alquiler por metro cuadrado en tiempo de procesiones. Y es que disponer de unas vistas privilegiadas en la ciudad puede costar mucho más que el alquiler de un piso durante casi dos meses.

Viendo esto, dos arquitectos valencianos, Fran y Jose, han decidido digitalizar todo el proceso de alquiler de balcones para fiestas para convertirse así en la primera inmobiliaria "balconil" de toda España, un negocio que les funciona desde hace cinco años.

Como ellos mismos me dicen, la idea se les ocurrió "en las fiestas de El Palio de Siena. Veíamos que había muchísima gente pero los que tenían las vistas más privilegiadas eran los que estaban arriba en los balcones. Nos preguntamos cómo se podía alquilar un balcón, pero en internet no había nada. Así fue cuando se nos ocurrió hacer una página web para alquilar balcones en épocas de fiesta. Sobretodo para Fallas en Valencia. Somos de allí y puede que eso tenga algo que ver". Los balcones por los que más se han llegado a pagar están "alrededor de los 2.000 euros por unas horas". Casi nada.

Después de hablar con ellos toca echarle un ojo a los balcones más caros para ver que es lo que ofrecen para que sus inquilinos temporales estén dispuestos a pagar tanto.

Primer piso de la calle Sierpes. Sevilla. Apenas unos metros de balcón de un palmo de ancho. Precio 1.800 euros. ALQUILADO PARA TODOS LOS DÍAS. Aforo para 12 personas. Condiciones: Hora de entrada. Una hora antes del primer paso. Hora de salida. 30 minutos después del final del último paso.

Me chifla la idea que puedas filtrar tu búsqueda por si tienen wifi, admiten mascotas o si se puede fumar en el exterior.

Vamos a otro: Calle Granada, Málaga. Balcón con experiencia gastronómica incluida en primera planta de la doble curva —uno de los puntos neurálgicos de la procesión de Málaga—. Ubicación cinco estrellas. El precio para la noche del día 24 es de 200 euros por persona. Según el anuncio publicado en internet con solo asomarte por el balcón ya puedes tocar el trono.

De menos categoría, pero no por ello menos barato, es este balcón de la plaza constitución. Es una tercera planta y el alquiler es de unos 600 euros para la sala en exclusiva.

Tiene rampa de acceso, tiene ascensor y hasta puedes utilizar el baño.

En Milanuncios encontramos un balcón de una primera planta en la calle Sierpes para 10 personas por el módico precio de 1.500 euros. Se especifica en el anuncio que se puede fumar y que se pueden traer mascotas. El espacio es de 30 metros cuadrados, los usuarios pueden llevar su propio catering y además pueden usar el baño.

Cuanto más arriba, más barato. En la misma calle sierpes y en el mismo edificio la segunda y la tercera planta cuestan 1.200 euros. Las características las mismas que en el anuncio anterior. No nos extrañaría para nada que se tratara de un mismo propietario de toda la finca. Si sumamos los tres anuncios que hay publicados en un solo día, o mejor dicho, en unas pocas horas se ganaría 3.900 euros.

Por el centro, en La Campana, encontramos otra perla. En éste se especifica que el balcón cuenta con calefacción. Se ve en la imagen una señora de espaldas mirando como poseída la muchedumbre bajo sus pies. Tiene tan mala calidad que nos ahorramos ponerla.

Me pregunto cómo es la gente que gasta sus ahorros para presenciar un momento tan efímero y espiritual. Cada uno gasta el dinero como quiere, pero esta me parece una forma muy peculiar. Llamamos a uno de los anuncios que encontramos por internet para saciar mi curiosidad.

Nos coge el teléfono Jose Antonio, un particular que a dos días de las vacaciones aún no ha llenado su balcón. Pide 7.000 euros por una semana entera de disfrute católico. Cuando le pregunto por los metros cuadrados que tiene el balcón me contesta que eso no se mide así, que se mide por la ubicación. El suyo está situado en pleno centro de Sevilla y es de más o menos unos 10 metros cuadrados. Es la primera vez que lo pone en alquiler. Sus padres fallecieron y ahora dispone de su piso, pero solamente alquila el balcón para ferias y semana santa.

Nos explica que ha decidido poner el anuncio porque sus vecinos le aconsejaron que lo hiciera. Nos dice que normalmente vienen familias enteras de toda España para vislumbrar el momento. También vienen turistas del extranjero. Cuelgo la llamada fantaseando en qué haría yo si me llovieran 7.000 euros del cielo. Y nunca mejor dicho.