El historial de violencia doméstica de Aroldis Chapman "tarde o temprano se olvida", dueño de los Yankees

En diciembre de 2015, los Yankees de Nueva York adquirieron al flamante cerrador de los Reds de Cincinnati, Aroldis Chapman, a cambio de cuatro jugadores de los que jamás has escuchado. La situación parecía un poco extraña, incluso imposible de concretarse, hasta que recuerdas que tres semanas atrás se habían dado a conocer reportes de que Chapman había ahorcado a su novia y disparado un arma de fuego siete veces contra la pared de su cochera mientras su pareja se escondía en los arbustos. Después de negociar y cumplir una suspensión de 30 partidos, Chapman lanzó bastante bien para Nueva York, antes de ser transferido a Chicago, donde ayudó a los Cubs a ganar la primera Serie Mundial de la franquicia desde 1908. Chapman se convirtió en agente libre poco después, y los Yankees lo volvieron a fichar, esta vez a cambio de más de cuatro jugadores que jamás has escuchado en tu vida.

Pero el dueño de los Yankees, Hal Steinbrenner, no tiene inconveniente alguno para pagarle a Chapman 86 millones de dólares en cinco años porque 1) es bueno 2) llena los estadios. ¿Pero qué hay en el ámbito de relaciones públicas luego de fichar a un tipo con un historial de este tipo?

Estas son las palabras de Hal vía Bob Nightengale de USA Today:

"Francamente fue una situación capaz de controlarse desde el primer minuto que llegó a esta institución el año pasado", dijo Steinbrenner en una de las reuniones de dueños este jueves. "Mira, [Chapman] admitió su culpa. Pagó su multa, y tarde o temprano nos olvidamos, ¿no? Así es como se supone que debemos vivir. Hizo todo bien, y dijo todo lo correcto cuando estaba con nosotros".

¿No se supone que no deberíamos ser tolerantes con la violencia física en contra de nuestros seres queridos o cualquier otra persona? Pero igual nunca lo sabremos porque no somos dueños de un equipo de beisbol. Existe mucha tensión entre los fans cuando se trata de discutir este tipo de historias. Es difícil reconciliar tu desprecio por la violencia de cualquier tipo y el amor por tu equipo. No hay otra manera de lograrlo que aceptar que dicha tensión existe. Lo cual es totalmente opuesto a la manera de Steinbrenner para lidiar con la problemática.

Pero el asunto se pone peor. Steinbrenner se puso a decir una serie de estupideces, entre ellas que se trataba más del aspecto comercial, al mencionar que el brazo de Chapman es una buena razón para llevar a tus familiares al estadio:

"Lo aman", dijo Steinbrenner. "Hay muy pocos beisbolistas que de verdad pueden hacer que los fans compren boletos y lleven a sus hijos a los partidos, y él es uno de ellos".

Cuando los asientos detrás del home cuestan 850 dólares en temporada regular, no hay de otra más que contratar a los pesos pesados.