Comer a media noche le hace daño a tu cerebro

Todos comemos a altas horas de la noche después de un largo y pesado día. ¿Quién no ha espiado la cocina para hacerse un pan con nutella o meter al microondas una quesadilla improvisada en la madrugada? Exacto: todos, porque nos encanta irnos a dormir con la panza llena, eso ayuda a caer en un sueño profun

Parece bastante inofensivo, ¿verdad? Seguro, todos hemos escuchado cómo podrías bajar algunos kilos si eliminas tus alimentos después del atardecer. Aunque otros estudios recientes dicen que esto no afecta realmente al organismo. Pero si no estás buscando perder peso, puedes comer y comer sin sentir culpa. Bueno, de hecho sí hay un problema. Hay una razón que explica por qué al día siguiente de comer mucha pizza en la noche, te pueden encontrar sufriendo al calcular la propina de tu comida, haciendo bizcos ante tus hojas de excel o perder tus llaves dos veces en el transcurso de seis horas. Esto quiere decir que tus comidas de media noche te pueden estar convirtiendo en un estúpido, según un nuevo estudio publicado por la Universidad de California en Los Angeles.

Se descubrió que comer a media noche no solamente es confuso para tu metabolismo, también perjudica a tu ritmo circadiano, el reloj interno que controla nuestro estado de ánimo, nuestro sueño, nuestras hormonas y básicamente todo lo que pueda hacernos sentir bien o mal durante el día. Esta es la razón por la que cinco minutos después de despertar no eres tan brillante como tres horas después. Comer tarde en la noche, entonces, puede perjudicar nuestra destreza de las funciones de aprendizaje y memoria.

El estudio fue hecho con ratones por un grupo de investigadores en el departamento de Psiquiatría y Ciencias Bioconductuales de UCLA. Inmediatamente lograron apuntar que los resultados tenían implicaciones para los humanos también. El equipo, liderado por el profesor Christopher Colwell, separó a los ratones en dos grupos, permitiéndole a un grupo comer normalmente y al otro alimentándolo en el momento en el que normalmente están dormidos. A los dos grupos se les dio la misma cantidad de alimentos y durmieron la misma cantidad de horas.

Después de varias semanas, los investigadores llevaron a cabo ensayos de aprendizaje en los ratones, como la evaluación de su capacidad para asociar un sonido con una descarga eléctrica. Los ratones que estuvieron en un calendario alterado de comida durante horas de sueño, se desempeñaron peor en las pruebas, sus habilidades de aprendizaje se vieron comprometidas. Por otro lado se vieron cambios en sus riñones, glándulas suprarrenales y en el hipocampo, la parte del cerebro que controla el aprendizaje y la memoria y tuvieron más dificultad en identificar nuevos objetos en sus jaulas. ¿Acaso esto significa que visitar las gavetas de la cocina antes de irte a dormir te puede dejar sin recordar ninguno de los nombres de los personajes de tu serie favorita? Puede ser que no.

Pero algunas veces, la alteración del ritmo circadiano se afecta por comer a horas extrañas o desvelarte mucho frecuentemente. Esto puede tener un impacto en tu día, sobretodo en la forma en la que te comportas. Algo realmente alarmante es que además también puede despertar tu sistema inmunológico y aumentar la posibilidad de adquirir diabetes tipo 2. Pero así como no debes comer hamburguesas antes de acostarte, tampoco debes hacer ejercicio en la noche, pues hacer ejercicio duro antes de dormir también puede confundir a tu reloj orgánico. Desafortunadamente, los más afectados son los trabajadores por turno, como los restauranteros, quienes quizás trabajan de día siendo meseros y de noche en bares sirviendo bebidas hasta las 3am. Esto por supuesto saca de balance al cuerpo completamente. Pero si puedes evitarlo, olvídate de tus snacks de media noche y cambia tu hábitos por el bien tu cuerpo.