Entrevistamos a Lars Ulrich, el baterista de Metallica

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Entrevistamos a Lars Ulrich, el baterista de Metallica

Platicamos con el baterista de Metallica sobre su chamarra blanca de piel, faltar a la escuela y el problema de la juventud en la actualidad.

Lars Ulrich. Foto por Ross Halfin.

Conocí a Lars Ulrich de Metallica en un entorno no muy metalero: en una suite de dos pisos en el Hotel Connaught de Londres, con todo y candelabro, charola bañada en oro con té y galletas, y un tazón de frutas muy elegante. El baterista danés está en plena gira promocional de Hardwired to Self-Destruct, el último álbum de Metallica. "Qué civilizado", dije. "Esto es Metallica", dijo entre risas mientras tomábamos asiento en el comedor.

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VICE: ¿Qué hubieran preferido tus padres que escogieras como carrera?
Lars Ulrich: Mi papá era jugador profesional de tenis. En los dos años que traté de seguir sus pasos en el mundo del tenis, se veía un poco enojado porque, según yo, creía que no tenía el talento necesario. Pero de todas formas me dio todo su apoyo con una mente muy abierta. Mis padres jamás me habrían sugerido hacer algo que no fuera de corazón. De hecho, contrario a la mayoría de las historias del rock 'n' roll, mis papás eran cool y eran mis mejores amigos. Nunca tuve la necesidad de rebelarme o ser grosero con ellos. De hecho, nunca entendí eso de rebelarse contra los padres hasta que llegué a Estados Unidos y conocí a la gente del sur de California. Eso nunca fue parte de mi agenda adolescente.

¿Cuántas personas han estado enamoradas de ti?
¿De las 200 personas que vimos anoche en la tienda? [Metallica dio un pequeño concierto para House of Vans de Londres una noche antes de nuestra entrevista]. A juzgar por eso, creo que han sido bastantes. Anoche hubo muchas lágrimas. Esa es una expresión de amor extremo que está a otro nivel.


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¿Cuál ha sido tu peor fase?
Tuve un amorío con una chamarra blanca de cuero que duró más de lo necesario.

¿Cuál es el recuerdo de la escuela más vívido que tienes?
Mi papá viajaba mucho y yo me iba muy seguido con él. Mis papás siempre le escribían cartas al director que decían "Creemos que serviría de mucho a la cosmovisión de Lars venir con nosotros a Estados Unidos durante todo febrero en la gira de su padre". Podía irme de viaje con mis papás en pleno año escolar y era muy divertido.

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¿Cómo fueron tus primeras vacaciones con amigos?
Estábamos en la gira de Ride the Lightning de 1985 en Estados Unidos e íbamos a tocar por todo Texas. Conocimos a unos güeyes en Dallas que tenían una banda y al final nos hicimos muy buenos amigos. Cuando acabó la gira, James [Hetfield, el vocalista de Metallica] y yo compramos unos boletos de avión y no fuimos a cotorrear con ellos unas semanas. La banda que acababan de formar se llamaba Pantera.

Lars Ulrich. Foto por Ross Halfin.

Completa esa oración: El problema con los jóvenes de hoy en día es…
Que no soy uno de ellos.

¿Cuál ha sido el momento más aterrador de tu vida?
En 1986 tuvimos un accidente en el autobús de la gira y perdimos a nuestro bajista. De hecho, fue todo un escándalo. Después de eso ya no nos sentíamos cómodos viajando en autobús y decidimos transportarnos en avión. En la gira de The Black Album en 1992, poco después del despegue en Nashville, entramos a una tormenta que duró cerca de 10 minutos y se escuchaba así de [sonidos de truenos]. Todas las cosas volaban por la cabina y el equipaje de mano estaba por todos lados y pegaba en el techo. Parecía de película. Estaba oscuro y se veían los rayos por la ventana. Fue aterrador y parecía que nunca se iba a acabar.

¿Qué es lo más bonito que tienes?
Soy afortunado de tener unas casas muy lindas. Mi favorita es probablemente una que está en las montañas de Montana. No voy muy seguido pero justo ahora, la idea de que en cinco o seis semanas voy a estar en Montana es lo que me ayuda a seguir. ¿Qué más? Las canciones de Metallica. Es bueno tenerlas. Esa va a ser mi pensión.

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¿Qué sería tu última comida?
Creo que un poco de todo. Tal vez una combinación de muchas cosas diferentes, Me gustan los placeres gastronómicos donde todo viene en porciones pequeñas pero hay mucha variedad. Mi última comida seria una probada de caviar, una de falafel, una de papas a la francesa, una de sushi, un poco de arenque al curry danés y una mordida de un bagel.


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¿Qué película o programa de televisión te hace llorar?
Los diez mandamientos de Cecil B. DeMille. La original, con Charlton Heston.

¿A qué hora es lo más tarde que te has ido a dormir?
Hasta en mis peores días trato de dormir aunque sea un poco. Nunca me he quedado una noche completa sin dormir. No importa si me voy a la cama a las 6:00 AM, 7:00 AM, 8:00 AM, 9:00 AM, 10:00 AM. Muy pocas veces, si acaso una o dos, me he acostado a las 11 AM. No sé, nunca he sido como otras personas que conozco que pueden pasar uno, dos o tres días sin dormir. A veces se me va la onda pero siempre busco un momento para dormir, hasta en las peores noches. De hecho, eso me enorgullece bastante.

¿Qué es lo que más te enorgullece de tu trayectoria?
Creo que nuestra independencia y nuestra autonomía. Nunca hemos hecho las cosas por la razón incorrecta. Nunca hemos cedido el control de ciertas situaciones por dinero. Nunca nos hemos vendido por anticipos considerables ni hemos fallado con el control creativo. Siempre tratamos de mantener nuestro trabajo puro y orgánico. Creo que podemos decir con la frente en alto que hemos hecho un buen trabajo al conservar nuestra integridad.

Si fueras luchador, ¿con qué canción entrarías al ring?
Killing In the Name de Rage Against the Machine. Porque la única arma que tengo con mis 1.54 metros de estatura es mi actitud. Tendría que entrar gritando: "Fuck you, I won't do what you tell me".

@natalie_hughes