Fans de 'La casa de papel' nos cuentan cómo robarían un banco
Screenshot vía Netflix.

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Fans de 'La casa de papel' nos cuentan cómo robarían un banco

Le preguntamos a fans de la serie de sus planes más elaborados para robar bancos en la vida real.

Cuando era pequeño y acompañaba a mis padres al banco, veía a todas las personas con fajos de dinero y miradas de desconfianza mientras esperaban a ser atendidos. Miraba alrededor e imaginaba cómo sería robar el banco. Observaba minuciosamente a las personas de seguridad mientras pensaba qué tan difícil sería armar un plan y asaltar el banco para poder vacacionar por el resto de mi vida.

La casa de papel, en Netflix, nos ha enamorado. Vi las dos temporadas en dos días: 22 capítulos en 48 horas y ahora solo tengo en mi cerebro las distintas maneras en que podría burlar la seguridad de una institución financiera. Gracias internet, gracias Netflix, gracias Berlín.

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Para saber qué tanto ha influenciado La casa de papel a sus fans, les preguntamos cómo robarían un banco. Con fines periodísticos, obviamente. Ya saben que somos buenas personas.

Foto cedida por Nacho.

Nacho, 31 años

Para empezar, te tienes que rodear de la crema y nata de la delincuencia. Para atracar un banco no se necesitan más de cuatro personas. Claro, si lo sabes ejecutar. Una vez que has reunido a tus bestias, lo que sigue es asignarle a cada uno su labor, dependiendo de sus habilidades. Por eso hay que tener un olfato perrón, ya sabes, de canalla. Escoger a los mejores. Lo que sigue es seleccionar la zona en la que está el banco. Esta zona la tienes que conocer perfectamente y tener amigos y familiares cerca de ahí. No hay robo perfecto. Entonces debes de estar preparado para todo. Prepararte física y mentalmente. Nada de alcohol y mota. Ese vicio no sirve para este jale, pero la cocaína es bienvenida.

Bueno, una vez que ya tienes a la cuadrilla y la zona, sigue conseguir a dos informantes dentro del banco. Un cajero o supervisor y alguien de intendencia. Tienen que decirte qué días y qué horarios es cuando la marrana va a parir. Al policía de la entrada del banco lo tienes que tener bien vigilado. Saber dónde vive y a qué escuelas van sus hijos. A ese lo sobornas y lo amenazas para que no le quiera jugar al James Bond. Otro apoyo que tienes que tener es a alguien pesado. Al jefe de sector de la policía, por ejemplo. A ese se le promete una parte del botín a cambio de 15 minutos de silencio y órdenes contradictorias que distraigan a los otros mandos. Que genere caos y confusión entre sus filas.

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El escape se debe realizar en un auto compacto y turbo cargado. Que entre en todos lados y que arranque rápido. Yo escogería un GTI o un Cupra cuatro puertas. La música es muy importante para este jale, hay que mentalizarse. Escuchar a La Santa Grifa, mucha música de cholos y delincuentes. Llenarte la cabeza de letras violentas y faltosas.

El atraco se tiene que hacer en un tiempo máximo de 15 minutos. Lo que sí va a tomar tiempo es salir a la calle y usar el dinero. Para eso habrá que esperar. Es importante una casa de seguridad con alimentos enlatados, mucha agua y mucha marihuana para mantenerse calmados y bien sedados. No asomar el pescuezo por dos semanas, hasta que se enfríe un poco el asunto. Nada de alcohol o drogas que te pongan picudo. Antes de salir de la casa de seguridad tienes que deshacerte de tus cómplices. Darles piso, pues. Por algo les tocó morir y a ti ganar.

Cuando haya llegado el tiempo de salir y gastar el dinero, me lo gastaría en mis viejos: en una casa para ellos en provincia, con su alberca y un pitbull chingón. Y a dar el rol por el mundo, vestido muy fino y conquistar italianas y preñar mujeres por todo el mundo. Tener hartos chamacos. Que las mujeres conozcan el latin flavor.

Engelberth, 27 años

Primero tendría que haber estudiado el plan con tiempo: saber dónde están las cámaras, los guardias de seguridad y quizás hacerme “amigo” de alguien del personal a través de regalitos para obtener información que pueda ser útil.

Trataría de reclutar un buen equipo que tenga sus funciones bien delimitadas: un par de tipos fuertes que puedan intimidar al personal y a los rehenes; y otros cuantos en las afueras del banco para controlar los puntos de acceso de la policía. Buenos pilotos de motocicleta o automóvil, cero mujeres (nada personal); y otro par que tranquilice a la gente para que no se alboroten, que los mantengan tranquilos y les diga que nada les va a pasar si colaboran, que esto es cuestión de poco tiempo.

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Lo haría en un solo día, en poco tiempo. Llegar, neutralizar a todos, ir por el botín y pegar la huida, sin darles mayor tiempo de respuesta. Lo haría faltando poco tiempo para que cierre el banco y así no levantar sospechas del por qué están cerradas las puertas, de una manera tranquila y sin violencia. Que nadie se altere o habrá consecuencias.

En cuanto a los nombres eso sería lo de menos, obviamente no usaría el mío ni nada alusivo como el de algún familiar directo, podría usar números para identificarnos o nombres falsos comunes: Miguel, Luis, Juan. O mejor, para hacerlo más cool usaría nombres de futbolistas: Messi, Ronaldo, Buffon. Creo que no escucharía ningún tipo de música para poder concentrarme únicamente en el asalto, pero s tengo que escoger escucharía algunas de Eminen: “Lose Yourself”, “You Don't Know”, “Cleanin' Out My Closet”, y también otras de Linkin Park.

El dinero lo usaría para comprar bienes pero a nombre de terceros y con un contradocumento privado que me acredite como el verdadero propietario firmado por el testaferro. También montaría otro negocio que sirva para limpiar el dinero y a su vez ir generando más plata, algo como un salón de belleza o una licorería. Así llevaría una vida tranquila sin volver a madrugar para trabajar.

Foto cedida por Isabel

Isabel, 23 años

Lo haría en un país extranjero con suficiente conocimiento, claro, acompañada de un grupo de personas. Unas cinco personas, cada una con un rol de acuerdo a las habilidades que tengan cada uno. Los nombres serían lo de menos, con tal de que no tenga nada que ver con sus nombres reales. Lo primero que haría sería buscarme a alguien como El Profesor, astuto e inteligente para que me ayude a realizar el plan con la mejor perfección posible. Una semana de robo sería el tiempo máximo que tomaría para llevarlo a cabo.

Haría que mis compañeros de robo impriman varios pasaportes para cada uno y así salir del país tranquilamente. Finalmente el dinero lo usaría para donar y crear escuelas con buena educación para niños con bajo recursos. Y el resto para vivir la vida.

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Foto cedida por Carlos

Carlos, 23 años

Infiltraría a dos personas como empleados del banco para tener información al instante, en caso de algún cambio en el sistema o la seguridad del lugar.

Reuniría un equipo multidisciplinario de expertos en diferentes áreas que no tengan nada que perder. Buscaría que estos fueran personalidades compatibles pero con diferencias sustanciales para evitar vínculos afectivos que pudieran poner en riesgo la operación. Adicionalmente integraría a algún cirujano que haya perdido su licencia, para hacerse cargo de cualquier eventualidad. Quizás a un psicólogo en una situación similar, para poder manejar crisis de ansiedad tanto en rehenes como de los atracadores.

Los nombres que usaría serían de signos zodiacales: Cáncer, Aries, Libra. Suenan cool. Durante el entrenamiento y planeación haría que todos los atracadores adoptaran otro acento, ya sea de otra región del país o de Latinoamérica.

Una vez dentro del banco y con los rehenes tomados, usaría la misma estrategia de vestir a todos por igual, pero con máscaras del rostro de Diego Rivera (porque nacionalismo). En este momento entran en juego las dos personas que infiltré como empleados del banco, ya que fingirían ser rehenes e informarían de cualquier intento de escape o motín. Se daría buen trato a los mismos, para propiciar así el síndrome de Estocolmo, pero no habría tolerancia con aquellos que trataran de hacerse los héroes. Separaría a los rehenes que parecieran que podrían ocasionar problemas y los pondría bajo vigilancia de uno de los rehenes cómplice.

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Habría dos personas fuera, uno encargado de coordinar la operación y dar instrucciones a los que están encerrados en el banco, y otro encargado de la campaña de medios para desprestigiar a las autoridades, buscando tener un gran impacto en redes sociales. Esta persona será la encargada de verificar que el plan de escape no presente fallas y en caso de haberlas realizar los ajustes correspondientes.

El robo estaría planeado para ocho días. Escaparíamos por un túnel directo a una propiedad cercana y la distracción sería el “escape” de dos rehenes, los cuales serán los empleados infiltrados, dando información imprecisa sobre el robo y los planes que se tienen.

Una vez concretado el robo y el escape me iría a un país sin proceso de extradición (al menos en lo que me aseguro que no se conoció mi identidad) y ocuparía el dinero para poner diversos negocios alrededor del mundo, llevar una vida tranquila y discreta. Todo esto lo imagino escuchando a Ray Charles, 2 Chainz, A$AP Rocky, M.I.A., Banks & Steelz y Grimes.

Foto cedida por Karen

Karen, 23 años

Yo tendría por “convicción” a todos los prisioneros. Dedicaría un año completo a la observación de blancos. Fijaría un día en especial, investigaría a cada uno de ellos. Después de un análisis, escogería de cada uno, a la persona más importante de sus vidas y la secuestro. Así con cada una de las personas involucradas. Les diría que todos participarán en el atraco. Ellos solos deberían hacer que el banco pareciera que está funcionando a su normalidad, sin embargo deberían aumentar el robo cada día para poder pagarme una cuota mensual de 200 mil euros.

En enero sería mi mes para secuestrar a los blancos, desde febrero empieza mi cuota mensual que duraría seis meses. Fijo día de liberación, y luego pasaría datos de cómo pagarme en criptomonedas cada mes en cuentas diferente para no ser rastreada.

Puedes seguir a Diego en Instagram y hablar de robar bancos con él.