Así juegan los Warriors de Golden State, con marca de 8-2, cuando están en su máximo nivel: talento innegable con un toque de espectáculo. Lo hermoso de esta jugada es que en el momento que Devin Booker atrapa el balón al contragolpe sabes lo que pasará en ambos lados de la duela:1. Un tapón de Kevin Durant al estilo de LeBron James. Debería cobrar por derechos de autor.2. Un lento recorrido de Curry a su más fiel estilo. También debería considerar cobrar por ello.Durant alcanzó tan rápido a Booker de una manera que sólo los jugadores ridículamente talentosos pueden hacerlo. Y después Curry presumió todo su talento como sólo él puede hacerlo. No había presión alguna para que Steph se animara a lanzar —contaba con 20 segundos en el reloj de disparo, y poco más de un minuto restante en el cuarto-—, pero de todos modos se animó. Las vueltas del balón sobre el aro le añadieron un poco más de dramatismo a su tiro. En general, la jugada fue alucinante, y los Warriors terminaron ganando 133-120. Y pensar que apenas hace unos días, algunas personas se preguntaban qué estaba pasando con Golden State. Comenzamos a extrañar esos días.Wow, just wow! pic.twitter.com/SxO8MBGgB7
— GoldenStateWarriors (@warriors) November 14, 2016