La semana pasada, el Diccionario Inglés de Oxford declaró al emoji “cara con lágrimas de felicidad” como palabra del año. Las reacciones artísticas a esto sucedieron; pinturas de emojis al óleo, un proyecto de Alex Godin, creador de un campamento para adultos y de este viaje en limusina. “Hemos alcanzado la cumbre de los emojis,” dice a The Creators Project. “Alguien tenía que hacerlo.”Pequeños pictogramas electrónicos, que alguna vez estuvieron disponibles únicamente para compañías japonesas, los emojis se han convertido en un lenguaje virtual nuevo, que Godin llama el verdadero “símbolo de la generación del internet.” Las pinturas de emojis son diseñadas en Nueva York y pintadas en China por artistas de Dafen, solo a algunos km de la fábrica de iPhone. A diferencia de los trabajadores de la fábrica, Godin asegura que los artistas son bien remunerados por su trabajo, la mayoría de las veces desde casa donde se especializan en reproducciones hechas a mano en gran escala, de famosos artistas europeos.
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Godin quería comisionar la pintura del emoji como un “símbolo universal del que nadie es dueño,” trabajos que sacan de su realidad al emoji para llevarlo al mundo del arte. Las pinturas son una reflexión directa del mundo actual y sus conexiones digitales; Godin comparte que la comunicación con estos contactos chinos se basa mucho en los emoticones.
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