El tiempo se acabó para Brock Osweiler y los Texans

Tiene mucho sentido que los Texans hayan fichado a Brock Osweiler, considerando que se trata de un equipo sin alternativas verdaderas con el sello de la casa. Sin embargo, en retrospectiva, se trató de la última compensación desesperada que impactó a los Texans luego de pasar por alto a la generación de mariscales de campo del 2014. Un error los llevó a poner a Ryan Fitzpatrick como quarterback durante un año, después Brian Hoyer, y por último desembolsaron 37 millones de dólares por Osweiler. La presión por ganar los llevó a esta decisión; un gran gasto para un jugador que es pésimo bajo presión y en la zona roja.

Aclaremos que aunque en su momento lució como un apuesta razonable —fichaje por el que John Elway habría pagado mucho menos dinero si Osweiler no habría salvado a los Broncos de ellos mismos— ha fracasado. Las 12 semanas de Osweiler en Houston han sido un desastre. Ha sido exitoso en desaparecer a DeAndre Hopkins del campo, y la ofensiva ha bajado su rendimiento a dos series ofensivas por juego. Cuando los Texans han conocido la victoria en esta temporada, lo han logrado con las peores estadísticas a la ofensiva en toda la NFL. Osweiler, al haber jugado con Broncos y Texans, posee una marca de 11-7 como titular, lo cual debería ser capaz de informarte todo lo que necesitas saber sobre la validez de las victorias para un mariscal de campo.

Sin embargo, los Texans aún pueden salvar su temporada. Con una marca de 6-5, tienen posibilidades, algo lejanas, de meterse a postemporada. Pero para ello, tienen que admitir que Osweiler ha mejorado en nada y que no lo hará. Así que es tiempo de embarcarse a lo desconocido, tal y como lo hicieron al fichar a Osweiler. Es tiempo de regresar al 2014. Es momento de poner de titular a Tom Savage.

Savage fue seleccionado en la cuarta ronda como un mariscal de campo a desarrollar por encima de Teddy Bridgewater y Derek Carr. Y aunque era un buen jugador prospecto por su versatilidad, pero poca experiencia en el futbol americano universitario, lució bastante competente en la pretemporada. La fuerza de sus lanzamientos es la mejor que los Texans tienen en su plantel por el momento.

La razón más importante para poner de titular a Savage es para evitar una situación como la de los Jets. Nunca supieron si Bryce Petty estaba listo, y aún siguen sin saberlo, así que en lugar de optar por lo desconocido, escogieron a Fitzpatrick una y otra vez, y obtuvieron pésimos resultados. No saben si pueden confiar en alguno de sus mariscales de campo, y tienen demasiado miedo para intentarlo con nuevas opciones porque podrían perder aún más.

Poner de titular a Savage haría una que otra cosa para los Texans. La primera es que, al no existir vídeos de él, las defensivas jugarán con cierta desventaja durante algunas semanas mientras descifran su estilo y tendencias de juego. La segunda es que es casi imposible que juegue peor que Osweiler.

Como es de esperarse, esto nunca sucederá, porque la NFL es una liga malvada, y los Texans un equipo terco con las personas en las que confía. A veces, como en el caso de Whitney Mercilus y Kareem Jackson, la recompensa se ha dado a largo plazo.

En este caso, todo lo que Osweiler hará como titular es ocasionar más tristeza y arrepentimiento para todos en el equipo, ya sea perdiendo en postemporada ante un equipo superior, como sucedió con los Chiefs el año pasado, o cayendo ante equipos como los Titans y Colts.

Es muy claro lo que podemos esperar de estos Texans. Pero no siempre tiene que ser así.