FYI.

This story is over 5 years old.

Comida

Futurólogos afirman que el chocolate pronto costará más que el oro

Con todos los problemas que la industria del cacao envuelve, futurólogos afirman que para 2020 habrá una crisis de chocolate y, tal vez, el cacao sea tan caro como el oro.

Encontramos chocolate en todos lados, en las palomitas y hasta en el vodka. La verdad, es fácil pensar en levantar un vaso con refresco de chocolate y brindar por la aparentemente interminable mina de cacao en el mundo occidental. Pero antes, demos un vistazo al estado actual de la industria del chocolate.

No es ningún secreto que el clima está cambiando ni que la sobrepoblación está provocando escasez de agua. Brasil está viviendo la peor sequía de los últimos 80 años y California no se está quedando atrás con sus cada vez más bajas reservas de agua. Las reservas de lluvia están empezando a decaer y la Cruz Roja advierte una inminente catástrofe relacionada con esto en el Medio Oriente.

Publicidad

Cuando tomamos en cuenta que para producir una barra de chocolate de 100 gr. se necesitan 1 700 litros de agua, tu adicción al Tin Larín deja de ser tan importante (porque, seguramente, hay usos más útiles para el recurso natural más importante de la vida).

LEE: Tu adicción al chocolate ayuda a promover la esclavitud infantil.

MUNCHIES-cacao

«Chocolate Thirst globes», hecho por el futurólogo de la comida Morgaine Gaye y el afamado chocolatero Paul A. Young.

Los precios del cacao están subiendo también. Los granos han subido dos terceras partes su precio desde el 2012 hasta el 2014 (oscila alrededor de los 4 mil dólares por tonelada). En el último reporte anual de Barry Callebaut, una de las productoras de chocolate más grandes del mundo, se afirmó que es posible que para el 2020 exista una escasez grave de chocolate.

La prensa llevó a más este tema, hablando sobre una crisis inminente de chocolate y apoyando el almacenamiento personal de barras de Snickers. Esto antes de que Michael Segal describiera estas afirmaciones como mentiras, asegurando que: «El mundo actualmente no tiene problemas con el chocolate».

Pf.

Si bien podemos estar seguros de que la siguiente Navidad seguirá habiendo Chocolate Abuelita, no hay duda de que la gran demanda de este producto, está cambiando el mercado.

De acuerdo con la institución del Comercio Justo, el mercado del chocolate cuesta alrededor de 80 mil millones de dólares a nivel mundial. Actualmente se producen 3.5 millones de toneladas de cacao al año, cantidad que se espera suba otro millón el los próximos 5 años. La demanda está matando a la oferta y se espera que para el 2020, esto aumente un 30 por ciento. La demanda por alimentos dulces en países como la India (y, antes de que el crecimiento económico fuera más despacio, en China) ha subido mucho en estos años.

Publicidad

En respuesta a estos cambios en el mercado del chocolate, Morgaine Gaye, «futurólogo de la comida», y el afamado chocolatero Paul A. Young, han tomado cartas en el asunto para averiguar el futuro del chocolate.

Como parte de la degustación y demostración del FutureFest en Londres, la pareja se preguntó cuál sería del futuro del chocolate en 10 años, presentando un mundo en el que el cacao cuesta lo mismo que el oro y se utiliza para hacer arte, joyería y muebles.

LEE: [Tus mentas con chocolate fueron hechas por trabajadores explotados.](Tus%20mentas de chocolate están hechas en fábricas por trabajadores agotados)

«El reto era utilizar las tendencias investigadas y crear algo comestible, interesante y al alcance», explica Gaye, un consultor y asesor de varios negocios internacionales de comida. «Las tendencias son exactas, pero los productos son una combinación de posibilidades».

Esta combinación de posibilidades está un poco subestimada. La demostración incluyó creaciones como la «seda sorbete», hecha de cortinas de azúcar comestible con sabor a plátano y a coco. Teniendo en cuenta los problemas que hay con el consumo de ésta, mientras nosotros pensamos en controlar la ingesta, Gaye dice que en un futuro, la seguiremos utilizando para iluminar nuestras casas, con lámparas de algodón de azúcar.

La pareja también predice que va a haber una transformación gradual de «lo hecho a mano» a las máquinas, y se muestra una serie de elaboradas máquinas de diseño que, por ejemplo, rocían los dulces con terciopelo rojo, convirtiéndolos en una obra de arte.

Publicidad
MUNCHIES-chocolate.1

En la tendencia del chocolate como pieza artística, se presentaron unos diamantes hechos con una impresora 3D, pero Young piensa que esta tecnología no se puede usar a gran escala.

«Posiblemente serán utilizadas para un trabajo creativo e innovador, pero ¿para hacer chocolates individuales? Probablemente no», dice. «Una impresora no se puede comparar con el trabajo artesanal, la formación o la habilidad del chocolatero. Las impresoras no pueden hacer combinaciones de sabores ni pueden ser tan creativas como los chocolateros».

Junto a estas dedicadas creaciones, Gaye y Young, dieron a conocer sus «Thirst Globes», que son bolas de chocolate rellenas de polvos deshidratados de manzana, zanahoria, tomate, diente de león y bardana. Al entrar en la boca, se convierten en una sustancia derretida tipo .

Vamos a ver una división en la industria del chocolate. Las grandes empresas no van a subir sus precios, sino que harán sus chocolates más pequeños año con año; aunque cada vez hay más chocolates artesanales en el mercado.

Todo esto es muy inteligente, pero: ¿saben bien los chocolates futuristas?

«Parece que a todo el mundo le encanta, pero como estamos reduciendo nuestros niveles de azúcar, edulcorantes y saborizantes, el gusto de la gente va a empezar a modificarse», dice Gaye. «Algunas de las opciones menos dulces serán mejor aceptadas más adelante».

LEE: Los británicos están enamorados de la cocoa.

Es difícil saber qué tan reales pueden ser estas predicciones sobre el chocolate. Cadbury´s, Thorntons y Nestlé prefirieron no hacer comentarios sobre esto, pero Dom Ramsey, fundador y editor del Chocablog y cofundador de la Guía Mundial del Chocolate, añadió su punto de vista.

«Paul y Morgaine tal vez llevaron las cosas al extremo, pero algunas de las cosas que dijeron están sucediendo ya», dice. «Vamos a ver una división en la industria del chocolate en respuesta al alza de precios del cacao. Las grandes confiterías no querrán subir sus precios pero cada vez harán más pequeños sus productos. Pero en el otro lado de la escala estamos viendo un aumento exponencial en el numero de empresas artesanales que producen chocolate con métodos tradicionales».

Si la escasez de agua y de cacao, combinada con la tendencia sin-azúcar, nos hace recurrir a un chocolate más artesanal, el futuro de éste tal vez no sea tan sombrío.

Hora de poner hielos al refresco de chocolate.