Guillaume Simoneau documentó en fotos el fin de su relación

El quebequense Guillaume Simoneau acaba de sacar un nuevo libro titulado Love and War, que trata de la relación con su ex novia Caroline Annandale. Él reconstruye la relación con Caroline, que pasó por rupturas y reconciliaciones, con una serie de recuerdos fragmentados. Ésta es una historia de felicidad absoluta que sucedió antes de los ataques terroristas del 11 de septiembre, después de los cuales Caroline se enlistó en el ejército estadunidense. En este libro se registran hechos diversos, como la separación de la pareja, el matrimonio de Caroline con un soldado, su servicio en Irak, su divorcio y el corto periodo de tiempo en que el fotógrafo y ella se reencuentran.

Esta historia es extraordinariamente íntima, pero el acercamiento de Guillaume es sutil. Da la impresión de encontrarse en una habitación de dos ex amantes, de leer viejos textos de Guillaume y de tomar fotos de fondos de escritorio de su computadora. La idea nació por accidente cuando Guillaume recibió ayuda para trabajar sobre un proyecto alrededor de la reinserción de Caroline a la vida civil como veterana de guerra. Cuando ella lo dejó definitivamente, Guillaume se vio en la necesidad de reconsiderar sus opciones. De pronto se encontró revisando viejas fotos y viejos textos y decidió compilarlos en un libro, y publicarlos por la editorial montrealesa Les Territoires.

Hablé con Guillaume luego de la presentación de Love and War, en Arles, para platicar sobre su obra, su relación con Caroline y el uso de diferentes soportes en el libro.

VICE: Hola, Guillaume. ¿Cómo te fue en la presentación?
Guillaume Simoneau: Bien. Hicimos la presentación en Arles con muy, muy poca difusión, tomando en cuenta que los ejemplares del libro llegaron a la editorial apenas hace dos días. Así que no pudimos enviar libros a los bloguers ni a los críticos. Sólo abrimos un evento en Facebook y pasamos la voz. La respuesta del público ha sido increíble.

¿Qué sentiste al ver el producto terminado? ¿Qué fue lo que más te llamó la atención?
Regresé a mis archivos, busqué y reuní todo esto para hacer el libro. En esos días yo estaba en shock. No me lo esperaba. Lo que sentí inmediatamente después fue muy duro. Es tu vida privada la que vas a hacer completamente pública y deberás afrontar todo eso porque esta historia debe ser contada.

Este trabajo es una reflexión sobre la memoria. Mucha gente vive en conflicto o cualquier otra situación desde la periferia del sujeto. Uno acumula testimonios, experiencias, recuerdos, y todo eso queda con nosotros. Es totalmente parcial y subjetivo. Contar esta historia de amor por medio de una reconstrucción imparcial y objetiva, me parece un método interesante. Si preguntaras a Caroline lo que ella piensa del libro o si le pidieras que contara la historia como ella la vivió, ciertamente habría toneladas de contradicciones.

¿Caroline vio el libro?
Sí. Tenía que dar su permiso para que yo pudiera hacer la publicación.

¿Te dijo lo que pensaba?
Le convenía, pero ella se quería asegurar que en el libro, o incluso en la introducción, no hubiera nada insultante hacia el ejército o los soldados. Era importante para ella. De cualquier forma, no puedo sino imaginarme lo que sintió sobre el libro: creo que debe ser halagador que alguien haga un trabajo sobre tu vida. Un trabajo como este debe ser intrigante, halagador y misterioso.

¿A partir de esta relación, tu percepción de la guerra cambió?
Sí, mucho. Pero no tiene nada que ver con mi relación con Caroline. Las montañas de material de guerra (fotos, videos, etcétera) que nos llegaban a diario a través de los medios fue lo que más contribuyó a cambiar mi percepción. Las idas y venidas desde Atlanta, Georgia, los días ahí entre soldados y civiles, los días en los suburbios de Atlanta… me di cuenta que entrar al ejército significaba algo, y que es una opción viable totalmente legítima cuando creces en ese entorno. Cuando uno está ahí dentro, carnal, uno se da cuenta que no hay opción. O trabajas para Starbucks, te metes de taxista o te enlistas en el ejército. Y con la última opción ganas un profundo respecto de parte de la comunidad. Eso también da respuestas a los chicos que tienen necesidad de enfrentarse a muchos problemas en su vida cotidiana. Eso te estructura, te permite tener dinero, una meta y, finalmente, respeto y atención.

Evidentemente cuando Caroline se enlistó, lo primero que hice fue emitir un juicio, como casi todas las personas. Y luego vi cómo eran las cosas y ahora siento gran respeto por esos chicos. El problema son los altos mandos, no los chicos en el campo.

¿Viste algún cambio en la percepción que Caroline tiene del ejército?
Luego de nuestra ruptura no la he frecuentado, y ahí es cuando ella empezó su reinserción. Si estuviéramos en contacto, estoy seguro de que te daría una buena respuesta. Pero te puedo decir que he visto cambios en Caroline. Hay un antes y un después de la guerra. Eso es un hecho.

Insistes sobre el hecho de que las fotos no aparecen en orden cronológico. ¿Cómo decidiste el orden de aparición?
Era importante de evitar jugar la carta de la cronología. Intenté ver cómo quedaba, pero era muy aburrido. Creo que fundamentalmente cuando las personas escuchan una historia, les gusta que uno no les dé el plato servido. Les gusta el misterio, aman reconstruir el rompecabezas. De la misma forma, uno puede hacer una comparación con nuestra relación, uno no pone todas las cartas sobre la mesa desde el principio.

Los dos textos y alguno que otro momento del libro me conmovieron. ¿Dudaste en incluir estos mensajes?
Cuando tenía el teléfono (el mismo que aparece en las imágenes), yo guardaba mis mensajes que enviaba a Caroline. Porque soy un romántico de mierda. Y cuando llegó la hora de reunir todo mi trabajo, empecé por imágenes de mi teléfono. De pronto tuve que buscar en mi celular y cuando me encontré esos mensajes, me detuve un instante. Sabía que podía tomar una foto de los textos y que podría servirme. Inmediatamente pensé que ahí había algo que mostrar. Así que las incluí, y tomaron gran importancia en el acomodo y la narración de la historia.

Esos mensajes son sobre lo que preguntan más seguido.