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Mi primera pelea: Joanna Jędrzejczyk

Hablamos con Joanna Jędrzejczyk sobre el estadio improvisado, su nariz ensangrentada, y el padre nervioso que la hizo darse cuenta que esto era lo suyo.
Photo by Brandon Magnus/Zuffa LLC

Todos —o casi todos— aman una buena historia de origen. Desde el Nuevo Testamento hasta las infinitas muertes de los padres de Bruce Wayne y el tío de Peter Parker, estamos fascinados por los catalizadores, epifanías, y momentos clave que hacen a las personas lo que son.

Con esto en mente, Fightland ha decidido conversar con nuestros peleadores profesionales y amateurs favoritos, y entusiastas sobre el primer momento que los marcó y que los inició en su viaje por las artes marciales. Ya sea que haya sido su primera pelea oficial, su primera sesión de sparring, o incluso un pleito cualquiera en la calle o en el patio de recreo, ¿cuándo fue la primera vez que estos guerreros del futuro se dieron cuenta que el combate era algo que querían y podían hacer?

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En "Mi primera pelea" de hoy hablamos con la campeona de peso paja, Joanna Jędrzejczyk —quien enfrentará a Karolina Kowalkiewicz en UFC 205 el 12 de noviembre— sobre el estadio improvisado, su nariz ensangrentada, y el padre nervioso que la hizo darse cuenta que esto era lo suyo.

"Joanna Champion" está a pocos días de defender su título —y su nombre— en el evento que podría decirse es el más grande y comentado en la historia de UFC, ya que la promotora hará su debut en el estado de Nueva York en el Madison Square Garden este sábado. En cuanto al tamaño e historia, el legendario recinto de la ciudad de Nueva York es lo más grande a lo que se puede aspirar después de haber realizado su primera aparición pública en un pequeño gimnasio como peleadora prometedora hace más de una década. Pero la emoción que la adolescente Jędrzejczyk sintió aquella noche no es muy diferente de lo que está a punto de experimentar en el Madison Square Garden.

En un principio, Jędrzejczyk optó por el muay thai porque quería mantenerse en forma, pero su motivación real se transformó casi de inmediato. "Quería perder peso", comentó para Fightland. "Pero después de unos cuantos entrenamientos, me sentí en casa. Sentí que era algo que quería hacer toda mi vida".

Dos meses después estaba lista para una sesión de sparring, y su entrenador decidió hacer un evento para ello. "Es una historia graciosa", dice mientras se ríe. "Era un lugar pequeño donde solíamos entrenar, y uno de los entrenadores formó un ring. Colocó varias sillas para que se viera como un cuadrilátero".

Después su entrenador invitó a una audiencia de un tamaño considerable, incluyendo a toda la familia de Jędrzejczyk, para que vieran la cartelera improvisada. Casi 60 peleas de muay thai profesionales y 12 victorias en artes marciales mixtas después, "Joanna Champion" aún se refiere al repentino recinto con una mezcla de sobrecogimiento e ironía. "¿Sabes algo? A pesar de que sólo iba a hacer sparring sentí que era algo oficial. Fue como una pequeña noche de pelea. Había unas 50 personas, pero un gran ambiente. Mucha adrenalina".

Pero Jędrzejczyk no saldría limpia de su primera sesión de sparring —"Recuerdo que mi nariz estaba sangrado…", dice— pero mantuvo la determinación. "Pero por supuesto quería seguir peleando porque fui competitiva desde el principio", concluye. "Me puse a pelear más y más, y luego de seis meses empecé a competir. Después cada mes porque en muay thai te permiten competir más seguido".

Su padre fue el menos entusiasmado cuando su familia regresó de aquella noche. Al ver la nariz ensangrentada de su pequeña hija, comenzó a preocuparse un poco por sus futuros contrincantes. "Mi padre dijo, '¡No puedo soportar que mi hija sea peleadora'", recuerda con un poco más de gracia. "Pero estaba tan emocionada que no me importaba y quería seguir haciéndolo porque sentí que era lo que me apasionaba. Sentí como si me hubiera enamorado".

El sentir del padre de Jędrzejczyk cambió con los años. Sin embargo, su inquebrantable pasión por los combates siguen siendo tan firmes como siempre.