El 'contador de Auschwitz' acaba de ser condenado como cómplice de 300.000 asesinatos

Después de un juicio que penetró hasta las entrañas de la culpabilidad nazi, el antiguo miembro de las SS Oskar Groening, también conocido como "el contable de Auschwitz", ha sido condenado hoy a cuatro años de cárcel.

Groening, de 94 años, fue juzgado en abril de 2015, 70 años después de la liberación del campo de concentración de Auschwitz, al final de la 2ª Guerra Mundial.

Groening también ha sido declarado cómplice de 300.000 delitos de asesinato. Los nazis exterminaron al menos a 1.1 millón de personas en Auschwitz, la mayoría judíos.

Groening nació en 1921 y fue destinado al campo de concentración en 1942, a los 21 años. Si bien no participó directamente en la muerte de ningún prisionero, era el encargado de inspeccionar el equipaje y el dinero sustraído a los pasajeros que llegaban en tren hasta el campo de concentración — la mayoría de los cuales eran directamente enviados a las cámaras de gas.

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El juicio abordaba los crímenes cometidos entre mayo y julio de 1944 cuando se estima que 137 trenes que transportaban alrededor de unos 425.000 judíos húngaros, llegaron a Auschwitz. Según la acusación, 300.000 de ellos fueron asesinados casi inmediatamente.

El juez titular, Franz Kompisch afirmó que Groening había decidido formar parte de la maquinaria de muerte nazi. Groening ha estado sentado e inexpresivo durante la lectura el veredicto, que ha escuchado atentamente durante la hora y media en que ha sido proclamada la sentencia. De vez en cuando ha bebido tragos de agua. Acto seguido ha salido caminando del tribunal sin dirigir una sola palabra a los periodistas.

'Los supervivientes están felices de que el juicio haya sido celebrado hasta el final y de que haya un veredicto'.

Las dos partes enfrentadas dispondrán de una semana para apelar, y tanto el fiscal como la defensa han expresado que considerarían hacerlo. El abogado defensor, Hans Holtermann, ha relatado que Groening permanecerá en libertad hasta entonces. Y debido a su edad y a la probable dilación del procedimiento de apelación, no se sabe si terminará o no yendo a prisión.

El abogado Thomas Walther, que representa a 51 de los co demandantes, ha asegurado que se trata de un "excelente veredicto".

"Para nosotros es lo de menos que sean tres, cuatro, cinco o seis años de prisión — eso nunca se discutió", afirmó. Los supervivientes están felices de que el juicio se haya celebrado hasta el final y de que haya un veredicto".

"Es algo que no puedo explicar hoy pero entonces yo me lo negaba", explicó Groening durante el juicio. "Quizá se tratara también de la necesidad de la obediencia en la que nos educaron, donde no había cabida para contradecir nada. Esta obediencia adoctrinada nos prevenía de registrar las atrocidades diarias y que nos reveláramos contra ellas".

Groening apareció en un documental producido por la BBC en 2005 titulado Auschwitz: Los nazis y la solución final. Y declaró sin tapujos contra quienes negaban la existencia del Holocausto: "Yo vi las cámaras de gas. Vi los crematorios. Vi los fusilamientos. Yo estaba en la rama cuando se llevaban a cabo las selecciones [para la cámara de gas]. Me gustaría que creyerais que todas atrocidades sucedieron — porque yo estuve allí".

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A la pregunta de por qué no cuestionó jamás los motivos del exterminio que él y los suyos cometieron, Groening dijo: "Nuestra visión del mundo nos convenció de que habíamos sido traicionados por el planeta entero y de que los judíos habían orquestado una gran conspiración en nuestra contra".

Y dicha conspiración era extensible a los judíos menores de edad. "Los niños no eran el enemigo en ese momento", afirmó. "El enemigo era la sangre que circulaba por sus venas"

El nonagenario, de pelo blanco, se desplaza con ayuda de un caminador y sus problemas de salud provocaron varios aplazamientos durante el juicio. El acusado relató sentirse moralmente culpable durante el proceso y confesó que escucharon los testimonios presentados le había hecho darse cuenta de la auténtica dimensión de las atrocidades cometidas.

"Pido que se me perdone", declaró. "Comparto la culpa moral pero si soy o no culpable a la luz de la ley criminal es algo que tendrán que decidir aquí".

Susan Pollack fue una de las voces que testificó en el juicio contra Groening. La superviviente de Auschwitz declaró al Daily Telegraph que se había avenido a prestar su testimonio "sin dudarlo", después de que Walther se lo pidiera hace seis meses. "Tengo 83 años. No volverá a pasar. Es algo que siempre me acompañará, de manera muy intensa. Es algo que todas las generaciones tienen que recordar", explicó.

Pollack también expresó en las páginas del periódico inglés lo decepcionada que estaba con que los más de 27.000 guardias que desfilaron por los campos de concentración no hubiesen sido sometidos a juicio.

"Creo que una de las lecciones que nos tenemos que aplicar para el futuro es que todos y cada uno de los que estuvieron involucrados son culpables — al margen de que fuesen quienes abrían el interruptor del gas o de que fuesen quienes abatían a la gente a tiro. Tú estuviste allí. Estuviste allí cuando todavía se podría haber hecho algo para evitarlo", dijo.

"¿Por qué lo hiciste? Eras un hombre con educación. Sabías lo que estaba pasando. Alemania era un país educado, culto. ¿Acaso ese conocimiento de que ibas a gobernar por encima de todos era lo único que tenías en la cabeza? ¿Lo que justificaba que nos tratarais a nosotros y a tantos otros tan brutalmente? Para ellos éramos peor que gusanos", sentenció Pollack,

Sobre Groening, Pollack dijo: "no le odio. Pero en mi corazón no existe el perdón para él. No es lo que me corresponde".

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Sigue a Sally Hayden en Twitter: @sallyhayd

 Associated Press colaboró en este artículo.